VIII ~ The start of something awful

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-Jane-

Mis uñas se enterraron en la piel de mis manos, escalofríos pasaban a cada instante por mi columna. Su terrible mirada fría y gélida me miraba muy de cerca, sin dejarme respirar, él me estaba sofocando. Nunca había visto a una persona con una frialdad pura, que de seguro viaja por todas sus venas.

En realidad no sabía con quién me estaba metiendo, tal vez habría sido con el peor monstruo de todo Hauntland o con algo peor que eso. El negro de su ropa lo hacía verse más rudo, malvado e intimidante, estar frente a él me hacía sentir tan pequeña, un nadie en la vida. Acerco su cara a la mía, sentía sus respiración golpear en ella.

— ¿Tienes miedo, verdad?— acerco lentamente sus labios a mi oído y luego susurro —No te haré daño, ahora no.

—Aléjate de ella— Josh intervino.

— ¿Qué?— su risa resonó por el pasillo oscuro—Díganme ¿Quiénes son ustedes que me dan ordenes?

— ¿Te interesa? —desafié.

—De ninguna manera. Porque ustedes no son nadie para decirme lo que debo hacer— exploto con indiferencia dio un paso atrás, alejándose.

—Claro que lo somos — esta vez yo me burlaba. Pues mis dos manos en mi cintura —Soy la hija de Habbat.

—Y yo el hijo de Ruem — enseguida dijo Josh.

Louis ya no parecía ser el chico altanero de hace unos instantes, ahora sus rostro palideció sin tener ninguna expresión y estaba estático en su lugar. En cambio el chico de cabello negro se acercó con cierta dificultad al frente de Josh y mío; se hinco de rodillas con una mueca de dolor.

—Hijos de Habbat y Ruem, estoy a sus órdenes.

¿Pero porque hacia esto? No lograba entenderlo.

—Mierda — Louis susurro — ¡Logan levántate ahora mismo!

Logan no le hizo caso, Louis le hablo por segunda vez pero lo ignoro. Louis con ferocidad aventó a Logan por un lado haciendo que se golpear contra el suelo, este arrugo su nariz ahogando un gemido. Louis volvió a acercarse mucho a mí casi rosando su nariz con la mía.

—Estúpidos híbridos, más les vale que se larguen de aquí, al menos que quieran que yo mismo los mate con mis propias manos — Estaba totalmente sumergido en una gran cólera amarga pero la desesperación era muy notoria en sus ojos.

De nuevo me sentía tan pequeña, sofocada y eso me desesperaba. No sabía por qué Louis cambiaba repentinamente de humor, su mente ante la mía parecía estar bloqueada tal y como la de Josh. No podía leer ninguno de sus pensamientos crueles y cambiantes.

—Podría besarte en este momento, linda. Pero...

—Más te vale que no lo hagas y te alejes de mí.

Se acercó mucho —Pero tengo que comprobar que tan capaces son.

—Idiota

Y ese instante ocurrió rápido.

No sé cuándo fue el momento en el agarro con firmeza mi brazo, tal vez sería en el momento que le daría una bofetada en su mejilla. Su agarre me lastimaba la fina piel, sentía sus dedos marcarse en mi piel, cerré mis ojos escondiendo el dolor y mordí mis labios para no dejar pasar ningún gemido. Él era demasiado fuerte y rudo, un brillo escalofriante atravesó por sus pupilas celestes, su sonrisa de tiburón se extendió por sus labios.

Su agarre se intensifico, sin piedad comenzó a retorcerme el brazo. El dolor se hacía más profundo, en mi interior me decía que le hiciera algo a este loco, pero no podía por alguna extraña forma, no lo haría. Ya no aguante más, un gemido sordo sonó por en medio del pasillo y Louis sonrió con satisfacción, como si mi sufrimiento le excitara.

Another World| L.TDonde viven las historias. Descúbrelo ahora