-entonces... ¿el galán es tu novio?- pregunto Zara alzando ambas cejas, Keyla se sonrojo y beso la mejilla de Nick asintiendo con la cabeza, Nick solo sonreía mientras hablaba con Jean.
Aun no llegamos a la playa, ya es medio día y no dormí todo el camino como lo planeado, Dana me ah levantado para preguntar si antes no habías conocido, y ciertamente fue así, en aquel bar donde casi me desnudo estando ebria, nunca imagine que sería la misma chica con la que baile con la que iré a la playa.
Durante el viaje note muchas Cosas, Mike es un poco callado pero muy divertido en sus momentos, Zara se sonroja cada que Raúl la menciona o la mira, lo mismo con Raúl, Dana se la ah pasado abrazando a zara, en cambio Keyla y Nick han estado besándose y abrazándose, Jean solo acaricia al perro que según recuerdo en un momento le llamaron por su nombre, Rokie.
-Chicos!- grita Zara mirando por la ventana –¡la playa!- exclama con emoción mientras nos sonreía a todos nosotros –Totalmente nuestra...- dice en voz baja.
-en diez minutos estaremos tocando la arena con nuestros pies- dice Mike mirando por la ventana restándole importancia.
Mire a Nick disimuladamente, aquel esta sonriendo y abrazando a Keyla, definitivamente debo superarlo, no quiero enamorarme más, pero... no quiero dejarlo, estoy hecha un lio, nunca antes había sentido esto, entonces... ¿desde tiempo atrás me gustaba Nick?, eso explicaría mi comportamiento cariñoso con él, pero, ahora que lo pienso, hace unos días hablamos y menciono algo de "en ese entonces sentía muchas cosas" ¿a qué se refería con eso?.
-Laila- mencionaron mi nombre y voltee inmediatamente a ver quien era, cuando me di cuenta ya todos habían bajado, estaban estirándose en la arena y gritando de emoción, Nick era quien me llamaba, el me tendio la mano para ayudarme a bajar, cuando estaba dispuesta a caeptarla llego Keyla y se lo llevo a la Orilla del mar, Nick me miro con esa expresión de "perdóname, ya hablaremos", baje yo misma y cubrí mis ojos del sol con mi mano izquierda.
-El sol está muy fuerte ¿cierto?- dice Mike bajando las maletas y las casa de campaña, asentí con la cabeza y me acerque a ayudarle a sacar lo demás.
-¿Estaremos nosotros ocho solos en esta playa?- pregunte armando una de la casas de campaña con la Ayuda de Mike, ya que lo demás se encontraban poniéndose el traje de baño, la combi era el cambiador de las chicas.
-Así es- sonrió –Es mas cómodo de esta manera-.
-Supongo- respondí terminando de armar la última casa de campaña.
-Esta fue la última- dijo Mike mirándome a los ojos, me incomode y mire a otra parte –Pues a divertirnos- fue lo último que dijo antes de salir corriendo al mar y quitarse la playera y adentrarse al mar aun con las olas, no sería de esperar que una lo revuelque, reí para mí misma.
-laila!- gritaban Dana y zara desde la combi –Vamos ven!-.
Suspire y camine hacia ellas, aun estaba el sol, era demasiado temprano, realmente no me apetecía estar bajo el sol estas horas -¿Qué sucede?- pregunte nerviosa.
Dana estiro su mano entregándome un Bikini completamente negro, yo me sonroje y negué con la cabeza –No me pondré eso tan revelador- dije incomoda.
Zara rio y me jalo dentro de la combi, Dana cerró la puerta y me tomo de los brazos, me tiro al asiento y Zara comenzó a quitarme los zapatos, me sonroje y comencé a mover mis piernas y mis brazos, me incline hacia delante, Dana intento detenerme pero mi peso fue mas y ambas caímos, por supuesto yo derriba de ella.
-E-e-eeh!- grite poniéndome de cuatro derriba de Dana, quien me miraba sonrojada, Zara me miro sorprendida y soltó unas carcajadas, no entendí el porque hasta que sentí algo presionar mi pecho Derecho, me sonroje y volte a ver, Dana estaba tocando mi pecho con una de sus manos, ella estaba sonrojada y sorprendida.
-Tienes buenos pechos!- grito Dana tocándome ambos pechos, peque un grito y me aleje de ella.
-Tranquila Laila- dice Zara Dejando ver ese Bikini Rosado claro, mostrando su perfecto cuerpo, una pequeña perforación en su ombligo –Es normal en ella- sonrió.
¿¡NOMRLA!? ¿Desde cuándo es normal dejarse tocar por una Mujer?!.
-Tienes pechos grandes- repeti Dana con una mirada de niña, sus ojos brillaban de emoción, me sente y cubri mis pechos con mi brazos, ella sonrio de lado y salto hacia mi, comencé a gritar que se apartara pero ella de alguna manera logro retirarme la blusa que tenia puesta dejándome dolo en brasier, me sonroje y tuve que aceptar el ponerme el Bikini negro, una vez listas salimos de la Combi, yo cubria mi cuerpo con una Toalla, estaba temblando del miedo, nunca antes me había puesto uno.
Zara me tomo de la muñeca y me jalo hacia el mar, Dana me jalo la Toalla y la dejo caer en la arena, me adentraron al agua, realmente estaba congelada, por lo que Salí al poco rato.
Maldición.
Maldita sea.
Mierda.
Mierda.
Maldecía dentro de mis pensamientos mientras salía del agua y caminaba hacia la Toalla, cuando me agache a tomarla, alguien me tendió la toalla en mano mire arriba y era Jean quien tenía una sonrisa traviesa, me sonroje y le arrebate la toalla cubriéndome con ella.
-Pervertido!- grite dándole la espalda.
-¿A quién llamas pervertido?- pregunto Jean sentándose en la arena a un lado mío –Siéntate que no muerdo- alce una ceja y suspire –Bueno solo en ocasiones- me guiño el ojo.
Sabía que cometía el error de sentarme ahí, pero lo hice, me senté a su lado a mirar el sol esconderse entre el mar, ninguno de los dos decía una sola palabra, simplemente mirábamos al frente.
-Jean- mencione su nombre para captar su atención, y resulto el me miro -¿Por qué insististe en que viniera?-.
-Es difícil de explicar- respondió con firmeza.
-Ya veo...- suspire, agarre un mechón de mi cabello y comencé a hacerla trenza -¿Crees que duren mucho?- pregunto sonrojándome.
-¿Keyla y Nick?- pregunta.
Volteo a verlo sonrojada y le doy un leve golpe en su hombro –No lo grites, Imbécil- volví a mi trenza -¿crees... que duren mucho?, digo, no hay algo que pueda separarlos?- pregunte con un tono tembloroso.
-Tu-.
Abrí mis ojos y voltee a verlo, el se dedicaba a ver el mar, mi corazón latió con fuerza, intente hablar pero fui interrumpida por él.
-Tú puedes separarlos, Tu puedes conseguir lo que quieres, ¿pero estas dispuesta a quitar la felicidad de alguien para ser feliz?-.
No lo había pensado de esa manera, realmente soy egoísta, yo, simplemente pensaba en mi y no en los demás. Baje la mirada y comencé a jugar lo arena.
-Laila- dice Jean –No persigas algo que no ganaras-.
-Algo... que no... Ganare...- murmure sonriendo dolorosamente, nunca antes me había dolido tan fuerte el corazón como ahora, las palabras de el me están lastimando, quizás tenga razón, quizás deba dejar de buscar lo imposible, pero no quiero, pero debo hacerlo, pero no quiero porque siento algo demasiado fuerte hacia él, pero si no lo hago me seguiré lastimando a mí misma, y no quiero eso.
-Olvídalo, Laila, Me tienes a Mi- dijo Jean poniéndose de pie y dejándome sola.
-te tengo a ti...-murmure aguantando las lagrimas, fue un error haber aceptado venir, no quiero echarles a perder su viaje por mis cosas de niña, ahogue un suspiro y borre el camino de una lagrima que había escapado, sonreí y me puse pie, mire hacia los demás, intentaban encender una Fogata, tenían música a todo volumen –Quizás... pueda Divertirme- me dije a mi misma. Sonreí y corrí hacia ellos para ayudar con los preparativos antes de que la luz del sol desapareciera.
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Prometelo
Teen FictionSoy Laila, una chica de 17 años. Mi vida se volvió complicada desde el nuevo matrimonio de mi padre. Perdí todo en mi pasado, junto con mi madre. vivo en las montañas, en un pequeño pueblo. Jean, un chico de 18 años. Quien entra a mi curso, con gran...