龍 (Tatsu)

CAPITULO XI

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El placer es como una droga,
una vez que lo pruebas es difícil parar

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-¿Cómo se siente, príncipe? -preguntó el doctor real tomando nota del estado del principe Kim.

Kim suspiró colocándose la camisa.

-Bien, ya no siento malestar, dolor de cabeza o algo parecido -respondió.

-¿Ocurrió algo diferente en este celo? ¿Su dragón ha presentado una actitud rara o fuera de lo común?.

Namjoon frunció el ceño recordando lo fastidioso que se había puesto en querer buscar a Jimin e incluso con el pequeño fragmento que recordaba de esa noche, le sorprendía lo gentil que fue en ese momento.

E incluso después del celo estaba ansiando estar cerca del peliblanco, y sentía cierta molestia.

— Ese silencio me hace creer que si -dijo su doctor sacándolo de su ensoñación que sin notarlo se había visto inmerso.

Namjoon se sonrojó sin poder evitarlo, Pero le dió la espalda al doctor para no mostrar esa actitud vulnerable.

Carraspeó un poco.

— Bueno en el celo mi dragón ha estado un poco inquieto e irritante, normalmente al pasar el celo deja de sentir necesidad de compañía -omitió conscientemente que la compañía en sí solamente era Jimin-. Y aún está presente, solo que no con tanta intensidad como sería en el celo.

Su doctor lo miró algo pensativo y asombrado ante ese hecho, que el principe fuera una persona que quisiera compañía era demasiado raro.

— Es normal que haya sentido eso, debido a que su dragón se está vinculando con su esposo, porque he de suponer que esa es la compañía a la que se refiere.

Mierda

Namjoon no pensó que sería atrapado.

— Aunque es raro si no se ha visto con él en su celo, dónde su dragón adquiere cierto apego a esa persona, usted no se ha visto con su esposo a menos que...¿Se ha visto con otra persona? -preguntó sin medir sus palabras.

El príncipe se giró al verlo y el doctor se dió cuenta de sus palabras, sus horribles palabras.

-¡Oh, perdóneme príncipe, no quise decir eso! -se arrepintió mientras se arrodillaba -. Perdóneme mi atrevimiento, fue una desfachatez preguntar eso.

Namjoon suspiró, Pero no entró en cólera porque el doctor solo estaba haciendo su trabajo y miró hacia su cama.

-¿Vincularse? Cuéntame más sobre eso.

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-Ah, el japonés es tan difícil -se quejó Jimin llorando por las planas que tenía que hacer.

-Hace unos segundos decía que era el lenguaje más fácil del mundo, mi príncipe -se burló un poco Hoseok con una sonrisa.

Jimin lo miró seriamente.