32. «Noticias y rumores»

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—Harry's POV—

Apreté mis ojos, algo molesto, ya que el sol perforaba las finas cortinas blancas y, básicamente, me quemaba la cara, obligándome a despertar. Los cambios de horario eran algo que solía pesarme cuando hacíamos conciertos en otros países. Terminé por sentarme en la cama y frotándome la cara con ambas manos.

Luego de pasar por el baño, decidí salir de la habitación para ir a la cocina. Esta vez nos habían dado permiso de alojarnos en un departamento, ya que se estaba complicando dormir en hoteles donde tuviéramos que alimentarnos en el restaurante que poseían, ya que mucha gente nos reconocía y prácticamente no teníamos un momento de paz.

Después del concierto del miércoles en Adelaida, habíamos partido hacia Perth, donde teníamos fecha para el fin de semana, ambos días. A diferencia de Europa, Australia estaba siendo atravesada por la primavera, así que eso nos tenía de buen humor y bastante activos.

—Buenos días, rizos —saludó animado Louis mientras palmeaba mi espalda al entrar a la cocina.

—Buen día, chicos —respondí sentándome en la mesa junto a ellos. Liam dejó un plato de hotcakes frente a mí—. Gracias, Lee. —Se sentó a mi lado para seguir desayunando, aparentemente ellos estaban despiertos hacía más tiempo.

—Hace algo de calor, iré a abrir un poco la ventana —avisó Niall.

Se paró de su silla y todos lo seguimos con la mirada mientras caminaba hacia una de las ventanas. Cuando la abrió, todos nos sobresaltamos al escuchar gritos desaforados. Niall cerró apresuradamente la ventana y volvió a sentarse ágilmente.

—Ahora que lo pienso..., no hace tanto calor —dijo fingiendo desinterés. Reímos.

—Aún no me acostumbro del todo a eso —mencionó Liam alzando ambas cejas mientras comía.

—Estamos en la cima, amigo, y tenemos al mejor fandom —contestó Louis—. Es por eso... —señaló la ventana—, que los amamos. Lo hacemos por ellos.

—Recuérdenme eso cada vez que me queje de la extensión del tour —pedí junto con un suspiro.

—Tranquilo, Hazza, el tiempo se acabará tan rápido que ni te darás cuenta —dijo Zayn tratando de animarme—. Pronto estaremos en un avión hacia New York.

—Oigan... —Miramos a Liam, quien miraba su teléfono—. Prendamos la televisión, ahora mismo —pidió echándonos una rápida mirada.

Niall tomó el control remoto de la mesa y la prendió, para luego volver a apoyarlo. Volteamos un poco nuestras sillas, ya que había una televisión pequeña sobre la mesada de la cocina, para poder verla bien. Pusimos el canal que nos indicó Liam y vimos el banner que hablaba sobre nuestro paso por Australia. Dos conductores estaban sentados hablando del tema.

—¿Podemos ir a lo importante, Logan?

—Por supuesto, Olivia, no me lo pidas dos veces —bromeó él.

—One Direction, la banda en auge, se encuentra atravesando la última fase de su tour antes de la extensión por Europa. Escuché los gritos de las directioner desde mi casa hasta aquí —comentó divertida.

—No entiendo por qué tanto escándalo —se mofó Logan revoleando los ojos.

—Oh, Logan, sólo te hace falta escuchar sus voces y ver sus lindas caras. No necesitarás más explicación que esa —respondió Olivia riendo—. Lástima que estén embelesados por otras caras bonitas.

—Qué estupidez —comenté molesto, ante lo que mis amigos me chitaron para seguir escuchando. Suspiré y volví a prestar atención

¿Y quiénes son las afortunadas? —cuestionó Logan con tono sugerente.

La Apuesta | h.s | (2da EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora