101 Razones Para Odiarte

14- Si, una lista.

Ethan...

Me acerqué a las tablas nadando con un brazo y con mis piernas, mientras que sostenía a Ainhoa con el otro brazo, hice que ella se subiera a su tabla y rápidamente subí a la mía.

-¿Qué?- pregunté curioso cuando vi de reojo que ella me observaba, apartó la vista enseguida y se quedó mirando la puesta de sol, ya que teníamos plena vista de ella.

-Nada, pensaba- me dijo cerrando los ojos, se veía tan tranquila, como si ya no tuviera nada de que preocuparse.

- Lo que daría por saber que pasa por tu cabeza- le dije llamando su atención, ella se rió con una corta carcajada.

-Créeme- se acostó en la tabla mirando hacia el cielo.- No te gustaría conocer a mi conciencia-.

Negué con la cabeza sin saber muy bien que quería decir con eso, ¿Era sarcasmo?, ¿Era una indirecta dirigida hacia mi?, o simplemente capaz que estaba loca y no me lo decía, bueno, eso seria algo estúpido, porque loca está, no es algo que ella sepa ocultar. 

- Como me gustaría vivir en el agua- dijo distraída, mientras pasaba apenas sus dedos por la superficie del agua.

-¿Vivir en el agua?- pregunté curioso mientras me acostaba en la tabla al igual que ella.

-Si, no se, trabajando en un crucero por, mínimo, toda mi vida, sería una excelente chef, con mucha práctica claro- me reí ante su comentario, ya había tenido la no muy agradable experiencia de probar su comida.

-Demasiado practica diría yo- me burlé dejando flotar mis piernas a los costados, mientras lentamente me movía mas cerca de ella.

-Que gracioso- dijo sarcástica, pero sorpresivamente no estaba enojada.

-También podrías trabajar como camarera- le sugerí- O como striper- me reí ganándome una gran cantidad de agua en mi cara- Bueno no te enojes, pero hablando enserio, ¿Que te gustaría hacer?- pregunté con ganas de saber todo sobre ella.

-Siendo sincera- dijo luego de pensarlo- No tengo ni la mas mínima idea-.

-Pero supongo que alguna vez has pensado sobre que quieres hacer el resto de tu vida- mierda, su vida me interesaba demasiado, para ya, Ethan.

-Obvio que si, quise ser maestra, doctora, psicóloga y hasta abogada como mi padre-.

-Pero...-

-Pero... te va a sonar muy estúpido y no quiero que te burles ahora que nos estamos llevando... mejor- dijo apartando la vista enseguida, estaba colorada, cosa que me daba mucha ternura.

-Prometo no burlarme- le dije serio, para que supiera que hablaba enserio.

-Siento... que no nací para eso, siento que nací, no sé, para viajar por el mundo y para trabajar de algo que no sea tan...-

-Cotidiano- complete la frase por ella mirándola sin mirarla, perdido en mis pensamientos.

Mierda, creo que amaba a esta chica, si, sabía que todos estos años que sentía algo extraño cada vez que discutía con ella era por algo, pero recién ahora me daba cuenta que era.

La amaba, era eso, ¿Era eso no?.

-Si lo sé, es tan de chica que no quiere nada con la vida, te dije que iba a ser estúpido-.

-No lo es, es mas, acabo de encontrar algo que tenemos en común-.

-¿A si?, ¿y que seria?- preguntó con cierta diversión.