VI. Medianoche

872 62 5
                                    

Alexis;

"¡Y mis neumáticos estaban totalmente disparados!" Niall protestó antes de empujar una patata frita dentro de su boca, sus ojos azules de bebé mirando al grupo que estaba sentado alrededor de una mesa en uno de los lugares de comida rápida más grasientos de la ciudad, pero moríamos de hambre y era casi medianoche. Así que este era el único lugar abierto, las hamburguesas de Joe.

Harry negó con la cabeza. "Yo gané. Tú coche estaba perfectamente bien."

El rubio seguía insistiendo. Me senté al lado de Harry, nuestros brazos tocándose de vez en cuando. Me dio un codazo y me miró con una pequeña sonrisa, sus pálidos ojos verdes mirando hacia abajo a los míos. Me di la vuelta con las mejillas sonrojadas y una sonrisa.

"Estaban más disparados que las fantasías sexuales de Louis con la esposa del alcalde," añadió antes de que Louis levantara la mano y lo golpeara en la cabeza, regañándolo con los ojos entrecerrados antes de que él también mordiera una patata frita.

Myra estaba disfrutando de la conversación mientras bebía su batido a mi lado. Me limpié los dedos con una servilleta y también las comisuras de mi boca. Liam seguía robando mis patatas y yo no protestaba porque de otra manera ellos podrían ver que tan psicótica soy al nutrir mi cuerpo. Aunque que alguien robara de mi comida sin duda me hubiera dado un ataque al corazón al instante.

Zayn jugaba tranquilamente con los botones de su chaqueta de mezclilla, con las mangas remangadas hasta los codos. La fría habitación hacía contraste con la calurosa noche fuera.

"¿Así que de donde eres, Alexis?" Harry me preguntó de repente, antes de morder su hamburguesa.

Levanté la vista hacia el grupo, cada uno de ellos estaba realmente interesado. "Nací en Montana. Mi madre es italiana y mi padre alemán."

"¿Cómo terminaste aquí?" Louis rió disimuladamente.

Una risa se escapó de mis labios. "Estoy visitando a mi abuela por parte de mi mamá. Sólo durante el verano, luego volveré a la escuela en casa y viajaré por el mundo para hacer obras de caridad."

Los labios de Harry se abrieron en shock. "Whoa. Me gustaría poder darme el lujo de viajar por el mundo. Eso... eso es como mi sueño."

"Es muy divertido. Pero, me gusta estar aquí. Cuando te mudas tanto no tienes un lugar al cual llamar hogar e inevitablemente, no tienes muchos amigos." les expliqué.

Liam sonrió, colgando un brazo sobre los hombros de Zayn. "Si hay una cosa por la que estoy contento de vivir en este ciudad son estos cuatro muchachos de aquí."

"Aw, eres el más dulce," Zayn derramó, y luego casi inmediatamente lo empujó lejos de él. "Ahora no me toques nunca más."

Haciendo caso omiso de sus bromas, Myra puso sus manos en su mejilla y tarareó. "Me encantaría dejar este pueblo. Pero, siendo realistas, no creo que suceda, a no ser que no te hagas cargo de ningún negocio familiar y estés pensando en ir a la ciudad para estudiar allí, lo cuál es un dolor en el culo."

"Muy cierto. Ahora, me voy porque tengo que levantarme temprano. Hombre, iré a cazar a las 5 am en punto," Louis comenzó con un suspiro. "Así que, ¿los veo en otra ocasión?"

Hubo un coro de "bien" y "adiós Louis". Con eso, el chico de cabello castaño y ojos azules abandonó el lugar de hamburguesas y la puerta se cerró lentamente detrás de él.

Uno por uno los chicos comenzaron a salir, hasta que quedamos Myra, Harry y yo. Me reí de algunas de sus bromas, y cuando Myra estaba demasiado preocupada por su toque de queda, le respondí con un: "Está bien, puedes volver a casa antes de que te metas en problemas."

Con el tiempo éramos solo Harry y yo, lo cuál no podría haber sido más perfecto. De esta manera, me acompañó a casa, después de encontrarnos al perezoso de Niall en la parada del camión.

Luego él estuvo pateando una lata durante unos minutos mientras caminábamos hasta pasar la plaza del pueblo, lo que significaba que pronto tendríamos que llegar a mi casa. "Vivo en la calle Brenton. Es justo alrededor de--"

"Sé dónde es. No te preocupes." él sonrió, sus pálidos ojos verdes mirando hacia delante mientras que los míos se centraron en su hermoso rostro. "Así que, espero que te gusten las películas."

"Por supuesto. ¿Por qué?"

"Porque voy a llevarte a ver una mañana por la noche." él respondió de nuevo sin problemas, su ronca voz mucho más áspera que antes.

Me reí. "¿Qué pasa si digo que no?"

"Yo... lloraría hasta quedarme dormido. Y eso sería embarazoso." admitió con una sonrisa divertida, mirándome.

"Iré contigo. No te preocupes," le respondí, usando las mismas palabras que el uso minutos antes pero esta vez con burla, que él notó.

Harry desvió la mirada y nos quedamos en silencio hasta que llegamos a mi porche. Ni siquiera me había dado cuenta de qué estábamos en mi calle, para empezar. Cuando me dejó, me volví hacía él. Nuestros ojos se encontraron y dijo, "Estoy muy contento de que vinieras esta noche."

"Yo lo estoy, también. Fue divertido," confesé en voz baja, juntando mis manos muy nerviosa.

Luego agregó, "Y... también quiero decir que... creo que eres muy hermosa."

Un calor estaba encima de mi cara como un gas tóxico. Aparté los ojos a mis pies cuando dijo esas palabras y murmuré en voz baja, "Gracias."

Dio unos pasos hacia delante y quedamos a solo unos centímetros de distancia gracias a mis botas. Contuve la respiración cuando se inclinó hacia delante, y sentí sus labios besar mi mejilla.

La puerta principal se abrió para revelar a mi abuela justo cuando Harry se apartó. Una enorme sonrisa plasmada en su rostro. "Bueno, siento interrumpir..." ella empezó lentamente.

Me sonrojé aún más y tragué, tratando de cubrirme con preocupación. "Nonna, ¿¡qué estás haciendo a esta hora!?" le pregunté con reclamación tomando su espalda y moviéndola al interior por los hombros. Sus ojos no se apartaban de Harry. "Vamos, volvamos a entrar." añadí.

Ella se rió y me di la vuelta, enviando a Harry una sonrisa tímida. "Gracias. Nos vemos mañana, ¿cierto?"

"Definitivamente," se rió entre dientes, sus ojos desviándose a la madera de mi porche. Sus manos se clavaron en sus bolsillos y se dio la vuelta, justo cuando cerré la puerta principal.

Me di la vuelta e inhalé profundamente, poniendo mis manos sobre mis mejillas calientes. Mi espalda se apoyó contra la puerta de madera y Nonna rió.

"Entonces..." ella empezó.

"Entonces."

"El Sr. Atrevido piensa que eres muy hermosa," ella declaró lo que había oído.

Mis labios se separaron. "¿Por qué interrumpiste?"

"Estaba previniendo la fabricación de un embarazo adolescente," bromeó, y mis ojos se estrecharon un poco. "Lo siento, he estado bebiendo y no puedo dormir."

Mis cejas se fruncieron y suspiré pesadamente. Debí haberlo notado. Se podía percibir el aroma a alcohol ahí adentro. "Nonna, sabes que no deberías estar haciendo eso," dije exasperada, poniendo mis manos sobre sus hombros. "Vamos, te llevo a la cama."

nota de la autora : capitulo un poco corto, pero gracias por leer. serán más largos a partir de ahora y sólo quiero hacerles saber chicos que esta es una historia corta (15-20 partes), por lo que no irá demasiado lento o demasiado rápido. todo encajará muy bien, espero.

muchas gracias por leer!

1996 [h.s] español TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora