IV. Cajas

907 62 4
                                    

Harry;

En el momento en que me desperté mi papá estaba apurado cruzando las muchas yardas de cultivo que teníamos para tomar algunas herramientas del cobertizo.

Me quejé y me pusé algo de ropa, empujando mi pelo fuera de mi cara en un intento de resolver el lío.

"Harry, no olvides que debes ir al pueblo para comprar la leche en polvo para tu hermano," me dijo justo cuando abrí la puerta de entrada de nuestra casa. "Ten, toma la camioneta."

Asentí y tomé las llaves. Mientras conducía la camioneta oxidada vi a unas cuantas personas que ayudaban a desmontar la feria.

Los recuerdos me inundaron de nuevo como una ola. Mis labios se curvaron en una sonrisa al recordar a esa chica. Esa bonita chica con enormes ojos color avellana y abundante pelo rizado.

Piel bronceada y labios carnosos. Ni siquiera podía hablar, mi garganta estaba oprimida con su notable exceso de belleza.

Con una estúpida sonrisa pegada en mi cara, me estacioné unas tiendas abajo de nuestro local en la plaza del pueblo.

En el camino vi a algunos de mis amigos, y a unas cuantas chicas, pero ninguno de ellos era ella.

Regresé a casa, colocando la leche para bebés en el mostrador de la cocina junto con las llaves. Luego corrí al cobertizo a toda velocidad.

"¡Váginas gratis!" Alguien gritó detrás de mí.

Con el corazón en la garganta, me di la vuelta con los ojos muy abiertos. "¿Qué -" Vi que no era nadie más que Louis y Niall caminando detrás de él con una sonrisa en sus labios.

"Son unos idiotas," les dije, golpeando a Louis en la cabeza como de costumbre.

El maniático de ojos azules se encogió de hombros. "Eh, ¿que puedo decir? Soy un idiota profesional. A las chicas les gusta," él bromeó, y Niall rió.

Rodé los ojos. "A las chicas les gustan los caballeros. ¿Aprendes eso?"

"Cómo si tu fueras uno", Niall bromeó y Louis movió su mano de acuerdo con Niall.

"Sí, lo que él dice."

Me di la vuelta hacia las herramientas, rodando los ojos. "Por supuesto que lo soy. Nombra una chica que haya dicho que soy un idiota."

Silencio.

"Está bien. Tal vez eres un buen chico, pero ese no es el punto." Louis admitió. "¿Qué hay esta noche? ¿Vas a correr contra Ben McConag?"

Me burlé. "¿Por qué dices su nombre como si fuera un dios de las carreras?"

"Porque es un tipo de dios, hombre. Él nunca ha perdido," añadió Niall.

"¿Qué te hace pensar que no lo puedo vencer?" le pregunté arrogante, dándome la vuelta para enfrentarlos.

Se miraron el uno al otro, Louis fue el primero en decir algo. "Creo que puedes. Eres un profesional, pero sabes cómo es Ben. Él es peligroso detrás del volante. Y si tú llegas a tener un accidente de carro, me voy a sentir como un imbécil por haber permitido la carrera."

Crucé los brazos sobre el pecho, haciendo una pausa para pensar en ello por un momento.

"Como sea, hombre. Yo puedo vencer a este tipo, así que déjenme entregarle estas herramientas a mi papá y volver a la ciudad para difundir la noticia." les dije.

Alexis;

Nonna seguía gritando, "¡No dejes caer las cajas!"

"¡Estoy intentando no hacerlo!" dije de vuelta sin aliento. Estas cajas estaban llenas de reliquias antiguas que ella estaba vendiendo a una tienda a cambio de dinero.

1996 [h.s] español TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora