Capítulo 6

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(Dereck)

Me encuentro en casa, decido apagar todas las luces e irme a acostar pues ya son las 9:50 Pm, pero de pronto por la ventana logré ver a dos personas en la entrada de la casa. Ordené a los guardias que no se movieran hasta que ellos se encontrarán en un lugar en el que los pudieran rodear y capturarlos.

Cuando lograron entrar me fijé de que era la misma chica que vi el otro día, pero venía acompañada de otro chico el cual no recuerdo haber visto, los guardias fueron pacientes y acataron mis ordenes, al estar en un punto en el cual ellos pudieran rodear a los intrusos encendieron todas las luces y los rodearon, pocos segundos después abrieron fuego en contra de los intrusos, sorprendentemente ellos reaccionaron rápidamente y lograron evitar la primer ráfaga de disparos y varios de los guardias cayeron, mientras todo esto sucede me esconderé en las escaleras, si mis instintos no me fallan ella subirá por allí, en cuanto al chico, solo mató a dos guardias y luego salió corriendo.

Ella logró eliminar a los guardias, y justo como lo pensé viene hacia las escaleras, empieza a subir, yo la empujo y con mi cuchillo en la mano hago un corte mínimo en su garganta, pero... Siento que no puedo hacer esto, la veo a los ojos y aflojando un poco el cuchillo le digo -No puedo hacer esto.-Me retiro un poco y le doy espacio, ella se acerca y me golpea con algo, caigo lentamente mientras ella empieza a correr hacia el cuarto de mis padres.

No sé que pasó ni cuanto tiempo estuve inconsciente, solo sé de mi padre me estaba hablando y me trataba de levantar cuando desperté.

-¿Que pasó?-Pregunté -¿Están bien?

-Hijo, le dispararon a tu madre en la cabeza, la asesinaron, por mi parte, me dispararon cerca del corazón, pero para prevenir cualquier percance yo llevo puesto un chaleco anti balas. -Mi corazón paró por un momento, si yo no me hubiese acobardado, mi madre no hubiera muerto, mi padre comenzó a llorar y junto a él yo también, nos dimos un abrazó y nos sentamos en las escaleras.

Entre el abrazó y las lagrimas sentí un dolor en la pierna, tenía un corte un poco profundo y en una de las escaleras estaba mi cuchillo con un pequeño rastro de sangre, no me importó, uno de los empleados de la casa ya había llamado a la policía y había informado del incidente, cerca de las 10:30 de la noche ellos llegaron los policías, nos preguntaron sobre lo que había sucedido, examinaron la escena, y nos dijeron que mientras fuera el plazo de investigación no podríamos estar en esta casa, así que empacamos a media noche, los trabajadores se retiraron a sus casa, y nosotros nos alojamos en un hotel cercano.

-Padre, ¿Porqué crees que pasó esto?

-Veras hijo, te contaré la verdad, no todos mis negocios han sido exitosos, e incluso he quedado debiendo a algunas personas, no sé si ese será el motivo, pero si es por eso, créeme que lo siento.

-Si alguien debe lamentarlo soy yo, tuve la oportunidad, tenía mi cuchillo en su cuello, pero me acobardé, no pude hacerlo, simplemente sentí que yo no estoy hecho para matar a alguien.

-Tranquilo hijo, no era tu responsabilidad, además, creo que es la primera vez que te enfrentas a alguien, no se si me equivoco, pero en todo caso sabes que ellos son profesionales experimentados y tu apenas empiezas a ser un hombre. -Esas palabras me tranquilizaron un poco, pero también me hicieron darme cuenta de que para matar a un asesino es necesario tener entrenamiento.

Me levanté, me dirigí a mi habitación de hotel y cerré la puerta, empecé a practicar con mi cuchillo al aire, dando golpes y simulando hacer cortes, luego tomé un marco de madera de una fotografía de cuando yo era niño, comprobé que tanto filo tenía mi cuchillo haciendo un leve corte que solo penetró un poco la madera, coloqué el marco sobre la cama, me alejé un poco, tomé el cuchillo por la hoja, inhale bastante aire  y lo lancé mientras suspiraba, el cuchillo hizo una entrada perfecta en el marco, lo atravesó y posteriormente lo rompió, también dañó un poco una de las almohadas, pero no importa, en la mañana iré a comprar otro cuchillo para tenerlo de reserva por si debo lanzar este a la hora de enfrentarme contra la asesina de mi madre, sé que la venganza no es el mejor camino, pero al fin de al cabo creo que es lo único que puedo hacer.

-No se cómo te llamas, tampoco sé donde o cómo encontrarte, pero ten por seguro que lo haré y esta vez no tendré miedo, ya sea por mi cuchillo, con su propia arma o con lo que sea, ella pagará con su sangre.

Octubre en AbrilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora