Llegue a casa de Mónica y toque la puerta sin voltear atrás.
La razón, simple, Alex y Susi tienen una despedida cariñosa con besos incluidos.
Nada que deseé ver.
-Hola...¡¿Fabi?!
Al parecer Mónica no esperaba que viniera.
¡Sorpresa!
-Hola Mónica.
-Me sorprendente que hallas venido.
No me digas.
-Lo se, vine con Susana.
La cara de Mónica mostraba que Susi no era tan bienvenida.
Si, no soy la única que no la desea en su camino, eso es bueno.-Ok, pa-pasen.
Vi a Mónica darle una mirada amenazadora a Susana y esta no hacer mas que alzar una ceja.
Dentro de la casa de Mónica todas se encontraban sentadas sobre almohadas al rededor de una botella.
La habitación de Mónica era rosa pastel y tenia olor a fresa, con repisas que tenían distintos tipos de perfumes, labiales y todo tipo de maquillaje.
-Jugaremos a la botella borracha, ¿Juegan?
Lo se, jugar la botella borracha con chicas.
Se puede decir que jugaremos verdad o reto pero más peligroso, al parecer no todas se llevan del todo bien.
-Iré a ponerme la pijama-dijo Susana y se fue al baño.
-Deberias ponerte la pijama tu también Fabi hay un baño abajo.
-Si, creo que iré.
Si, tienen razón, sin pijama no hay pijamada.
Me puse mi pijama menos presentable.
Era la primera que encontré.
Mi pijama de cerdito.
Lo se, Tengo 16
Y eso que todos somos libres a elegir lo que queremos ponernos.
Es mejor marcar la diferencia.
Ser únicas.A quien quiero engañar esto es un golpe a mi aplastado orgullo.
Eso pasa por dejar que mamá compre mi pijama.
Tragame tierra.
Sin duda nunca saldre del baño.
Mi celular hizo un sonido y lo saque que mi bolsillo.
5, mi batería esta en 5, tengo que salir de aquí, adiós orgullo.
Camine hacia donde estaban las chicas y cuando estuve delante de ellas sentí la mayor vergüenza del mundo.
¿Dónde esta el fin del mundo cuando lo necesitas?
Todas rieron y me puse como un tomatito, todas con pijamas normales y yo con mi disfraz de cerdito que viaja en busca del arcoiris.
Es mas tomaron fotos.
Pero la vergüenza se me paso rápido y empezamos a jugar verdad o reto.
Me senté en una de las almohas del piso, al lado de Mónica.
Mónica giro la botella
Demonios.
-¿Verdad o reto Fabi?-dijo Laura.
Veamos verdad o reto.
No
Me conocen mucho así que me conviene la verdad.-Verdad.
La rubia puso una cara de maldad y empezó a hablar.
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Me cansé de ser el caramelo de menta
Novela Juvenil¿Alguna vez has sido un caramelo de menta? lo se, suena extraño, no me Tilden de loca aun, dejenme explicarles. Cuando digo caramelo de menta me refiero a que solo te usan para hacer favores, solo en los malos momentos, como los caramelos de menta s...