Era lunes, un dia casual, me levante para ir al colegio, tome mi ducha diaria y sali de esta, seque mi cuerpo frente al espejo, observaba cada sentimetro de el, mi piel estaba mas palida de lo común, mis ojos tenuaban una profundidad por mis ojeras, cerre los ojos por un instante y despues los abri, las lagrimas rodaba por mis mejillas, ese jodido dolor habia regresado a mi pecho de nuevo, recordaba cada momento de esa escena, cuando mis padres...fueron asesinado frente a mi. Limpie mi lagrimas y comenze a vestirme, era epoca de frio, bueno, realmente casi todos los días del año eran fríos, seque mi pelo y después lo deje suelto, puse una bufanda en mi cuello, un saco hermoso y unos vaqueros entubados, mis botínes negros, saque mis cosmeticos y cubri un poco esa cara de tristeza, tome mi mochila y me diriji a la cocina, baje las escaleras y camine hasta la nevera, tome una manzana, sali de mi casa y cerré la puerta camine hasta mi lamborgini y subi, puse mi mochila en el asiento copiloto y Prendí el auto, maneje hasta una cafeteria cerca del colegio y pedi un frapuchinno, me dispuse a esperarlo. Depronto mire a un chico sentado en una de las mesitas de la caféteria, hiba en mi colegio, en el mismo año que yo, el era muy mono para mi, se podria decir que mi amor imposible, sus ojos color avellana y su pelo negro contrastaban con su sonrisa deslumbrante, su cuerpo era atletico, era el capitan de soccer en el colegio, era el tio perfecto que toda chica querria de novio. Creo que noto que lo observaba o que lo estaba follando con mi mente, volteo a mirarme, rápidamente mis ojos se pusieron como platos, mi sangre comenzo a subir por mis mejillas.