mirada de ángel

Capítulo 6

Al día siguiente cuando desperté vi a mi madre un poco preocupada y parecía que estaba llorando la noche anterior, eso me preocupó en gran medida que la abrazé y le pregunté -¿que tienes madre-, algo en mi mente me decía que era algo que iba a impactarme mucho y que me diría algo de gran importancia para mi.

-madre dime ¿qué sucede?, me estoy poniendo intranquilo-, dije con mucha preocupación pues ella era mi madre terrenal y la amaba con todas mis fuerzas y no me gustaría que le pasara algo.

Ella guardo silencio y me respondió -mi niño sucede que tuve un sueño, bueno una pesadilla donde tú tenías un para de alas radiantes como el sol tan hermosas como las estrellas y que estabas luchando contra unas personas extrañas y de pronto alguien apareció y tú la abrazabas y esa persona te asesinó. Tuve miedo de que ese sueño hubiese sido real mi niño, yo te quiero demasiado y no me gustaría que te lastimaran-.

Inmediatamente mi corazón empezó a palpitar tan fuerte que se podían escuchar mis latidos fácilmente, pues me asustó que mi madre tuviera esa clase de sueños ya que ella no sabía mi realidad y podría ser una señal.

-tranquila madre, a mi no me va pasar nada tú lo sabes, no te preocupes por un sueño recuerda que no es real es solamente un sueño. Prometame que va estar tranquila y no se va preocupar por mí-, le dije yo a mi madre con tal de tranquilizarla.

-está bien hijo-, dijo ella -pero prometeme que tú te vas a cuidar por favor-.

-si madre, tú sabes que no me va pasar nada, sabes que soy muy fuerte y nada me hará daño y te lo prometo.

Le di un beso en la frente a mi madre y abrazandola le dije -tranquila madre, yo siempre estaré para protegerla y proteger a mi pequeña hermanita, usted son lo más importante en mi vida y a quiénes más amo en el mundo-.

Mi hermanita me dijo -hermanito, te quiero mucho eres el mejor hermano del mundo-.

-¿sabes una cosa?-, le pregunté a mi hermanita.

-dime hermanito-, respondió mi dulce hermanita.

-Sabías que los hermanos mayores nacen primero porque es nuestra obligación proteger a nuestras hermanitas menores-.

En ese instante me despedí de mi madre y mi hermanita y decidí marcharme a la S.A a ver como marchaba todo y cuando llegué a la S.A pude ver que todo estaba en perfectas condiciones y vi un ambiente tranquilo y decidí descansar.

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