No, me niego, no voy a ir.

43 3 0
                                    

-Hola Ali -dijo con intenciones (?).
-Te repito, ¿qué haces aquí?-me sequé las lágrimas y luego giré a verla.
-Oí vuestra conversación, vi que no te dejaban quedar con ese chico... ¿Como se llamaba? Ummm... Bueno da igual, no sé, uno. Y pensé que podría ayudar.
-¡¿CÓMO?! ¡No me espíes! Esta es mi vida, por algo es MÍ-A,- recalqué.-no te necesito para salir de esta, si alguien tiene que salir soy yo, por mi misma. ¿Qué haces que no te estas yendo ya?
-Olvídalo, lo importante es que puedo ayudarte y tu eres la principal interesada. Y claro que es tu vida, pero en tu vida he entrado yo, tu hermana... Y si he venido no ha sido para molestar, sino para ayudar a lo más importante de mi vida.-Rodé los ojos ante tal cursilada y le invité a que contara su "plan", si es que se le puede llamar así.-Bien. Tú quieres quedar con el chico ese y sus amigos y bla bla bla, pero tu madre no te va a dejar salir, entonces... ¿Qué te parece si yo me quedó aquí como buena Alicia y tu te vas por ahí a donde quiera que tengáis que ir?
-Eh... No sé... ¿Y si te descubren?
-No va a pasar, tranquila. Me encargo yo.
-Entonces...-me acerqué al armario-¿Camiseta rosa o azul?-balanceé.
-¿Eso es que aceptas?
-Sííí.-dije con emoción tirando las prendas y yendo a sus brazos.
-Calla que al final nos pillan.-susurró-Por cierto, azul.
-Vale ya me tranquilizo-me senté en el suelo con las piernas entrelazadas y pronuncié un " oooom" tal y como si fuera una profesora de yoga.
-En serio, eres bipolar, tan pronto estabas llorando como te he sacado una sonrisa.
-Eh, que yo no estaba llorando.-intente reprimir una sonrisa tonta, de estas que salen cuando estas mintiendo pero tu deforme cara te delata...
-Claro Alicia, claro que sí.
-Si no tienes nada más interesante por decir, puedes irte.-señalé la ventana.
Y eso hizo, irse como toda persona normal haría cualquier día de diario para salir de la casa de una amiga.
¿Por qué no podría ser una chica normal?
°°°
MIÉRCOLES

Buenos días, ¿quién inventaría esa frase hecha para recibir al día? ¿Por qué tienen que ser buenos? ¿Y si tengo que ir al instituto y de verdad no tengo ninguna gana? "Buenos días" ¿Y si es un lunes, empieza la semana otra vez y para mi no son buenos días? Oh, ¿y por qué lunes? ¿Y si me gustan los lunes?
Ogg... No es bueno filosofar por las mañanas, en absoluto. No lo recomiendo.
No he dormido nada, por eso no son "buenos días"... Pero ¿quién tuvo la gran idea de poner la célebre frase de la película " La Vida Es Bella" recitada por Roberto Benigni todos los días con sus amigas porque detestaban escucharlo y hacía gracia cuando no aguantaban más y ahora no hace más que escuchar esas palabras en su cabeza?
Adivinen.
"¡Buenos días princesa! he soñado toda la noche contigo, íbamos al cine y tu llevabas aquel vestido rosa que me gusta tanto, solo pienso en ti princesa, pienso siempre en ti."

A veces dudo de mi inteligencia mental.

Tomo una taza de café con leche y cereales.

Miro el horario y bufo, toca educación física... ¡A primera hora! ¿Qué puede haber peor que eso?
Preparo los libros y me cambio.
Cuando estoy lista para salir alguien timbra.
-¿Si?
-Buenos días Ali.-dijo una voz masculina.
Sí, eso estaba pensando yo, buenos días...
-¿Quién eres?
-Baja y lo sabrás.-me picó
Colgué. Que daría en estos momentos por un telefonillo de estos con cámara...
Bajé y me encontré con Jorge.
-¿Qué haces aquí?
-Quería verte.
-Ah... Pues... Ya me has visto ¿qué tal si me dejas ir a coger el bus, no me haces perder el tiempo y lo que pierdo es a ti de mi vista?
-Alguien no se ha levantado de buen humor.
-Y que lo digas... Entonces, ¿te vas ya?
-No pretenderás ir en autobús ¿no?
-Es lo que acabó de decirte que iba a hacer.-rodé los ojos con fastidio.
-De eso nada, vienes conmigo.
Enarqué una ceja.
-No tengo ganas de ir andando, venga dejame ir, o me harás perder el bus.
-No vamos a ir andando.-señaló una bici a su lado.
-No pienso ir contigo en... Eso.
Mi reacción se resumía en cuatro palabras: malas experiencias con bicis.
-Venga... Anda, intentalo por mi.
-Prefiero ir andando a montar en esa máquina de matar.
-Esta bien...
De todas formas no tenía nada que perder, el bus ya habría pasado haría 10 minutos.
Caminamos en silencio mucho tiempo, o al menos eso me pareció. Hasta que no pude más, no aguantaba este silencio.
-¿Por qué viniste a recogerme?
-No se, yo con mis amigos hago eso...
-Oh.-venga, di algo no lo irás a dejar en un simple "oh" ¿no?-Y... ¿qué haces en tu tiempo libre?
Oh, venga, tanto tiempo para sacar un tema que podría haber pensado un niño de 5 años en menos tiempo.
-Me gusta mucho la natación, a veces voy por mi cuenta a nadar en la piscina cubierta.
-¿Ah sí? ¿Y no te importa ir sólo?
-No. No se, me relaja.-Sonreí nerviosa. No sabía que decir. Todo era tan incómodo...-¿y qué hay de ti? ¿Que es lo que haces tú?
-No suelo tener una cosa sola... No sé. Depende del día, las ganas... Me gusta mucho dibujar, pero últimamente no encuentro inspiración. Otras veces escribo canciones que me gusten en un cuaderno y luego las decoro... No sé... Cualquier cosa mantenerme entretenida.

- ¿Y hay alguna cancion de esas que escribes que me hayas dedicado?

-No dedico.
-Estoy seguro de que alguna canción por lo menos, te recuerda a alguien, o a algún momento en concreto.

Entonces me acordé. La última que escribí fue Counting Stars. Era necesario, después de haber pasado la tarde con Kristian... La verdad es que si no hubiera sido por él...

-Eh, ¿qué piensas?
-Nada, nada. Estaba intentando hacer memoria pero no, ninguna me recuerda a nada.
-Bueno, no importa, otro día me dirás... Ya hemos llegado.
°°°
Llego a clase y veo que no hay nadie. Dejo la mochila y bajo al gimnasio.
Ahí estaban Kristian y Almu... ¿Discutiendo?
-No, me niego, no voy a ir.-protestó ella.
-¿Qué me he perdido?
-Que te lo explique él, yo paso de decir nada más.-se marchó en dirección al vestuario y miré a Kris.
-¿Qué has hecho?
-¡YO NADA HA SIDO LA LOCA DE TU AMIGA!-le tomé de las manos para que se tranquilizara- me pidió que le enseñara quienes eran mis amigos, con los que íbamos a ir a la bolera. Y por lo visto conoce a uno de ellos y precisamente no fue un dato que le agradara. Se había quedado como en shock, le pregunté qué pasaba pero no paraba de decir lo mismo. "Cualquiera menos él" yo no entendía nada, y sigo sin entenderlo. Le dije que podría venir igual, no le hacia caso y ya, que lo vamos a pasar bien igualmente. Y entonces entraste y bueno... lo que oíste.
-No entiendo nada...
-Yo igual... Ve a hablar con ella anda.
-Eso haré.-le sonreí y fui con mi amiga.

Your love is my energy [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora