Alec se relajó cuando la ciudad quedó atrás.
La carretera estaba casi libre de infectados, pero era un lugar macabro.
Los autos todos uno detrás de otro con las puertas abiertas o los vidrios rotos todo manchado de sangre.
Ellos en cambio habían tenido suerte.
Pero a Alec una nueva angustia le recorrió el cuerpo.
Ahora ya no estaban en la seguridad de la estación de bomberos, estaban fuera y expuestos a todos los peligros, tenían que viajar más de 4661km para poder llegar a un lugar seguro y eso en el mundo en eel qu vivían ahora era demasiado.
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Isabelle estaba nerviosa.
El hecho de estar afuera le producía un nerviosismo increíble.
Pero no más que la nueva integrante del grupo.
Flash Back
Isabelle había rogado a su padre que detuviera el camión, cuando su padre finalmente lo había hecho, Isabelle había bajado del camión junto con Simón.
Isabelle quería robar una casa rodante.
Simón le ayudó a entrar y cuando estaban ya adentro ambos se fijaron en algo.
Un par de ojos se habían asomado desde la oficina, era una persona viva.
Isabelle se dirigió directo a la oficina, con Simón detrás, ella llevaba un arma y un machete(n.a: cuchillo grande) y Simón un hacha, ambos se detuvieron frente a la oficina.
Isabelle se dirigió a la puerta, estaba cerrada con llave, entonces Simón comenzó a romperla con el hacha, hasta que finalmente cedió.
Adentro, había una chica.
Sólo uun sobreviviente.
La chica los miraba como si fuesen peligrosos, esperando a que ellos hicieran el primer movimiento para ella responder con un balazo.
Pero Isabelle comenzó a hablar.
- Hola, somos...sobrevivientes, de la ciudad...el- dijo señalando al chico- se llama Simón y yo soy Isabelle...ahora nos vamos, hemos podido hacer una transmisión de radio con unos sobrevivientes de Portland, ello dijeron que el gobierno... sabia lo que pasaría y por eso construyó una ciudad segura, donde ellos se encuentran ahora...estaremos gustosos de que vengas con nosotros...
Pero la chica la interrumpió
- Si, sólo quiero irme, de verdad no sabes como estoy de agradecía por ofrecerme ir con ustedes- dijo levantándose, para luego mirarlos- ¿vinieron para llevarse una casa rodante?- preguntó.
- Osea si...creo que sería bueno que nos lleváramos una, si es grande estaremos más seguros..- dijo pasándose la mano por la nuca.
- esta bien- dijo la chica sacando unas llaves de un cajon- por cierto me llamó Maia, y estas llaves son de la casa rodante más grande que hay aqui- dijo agitando las llaves.
- Muchas gracias- dijo Isabelle realmente agradecida al ver el camión al cual Maia se refería, era enorme, y tenía todo lo necesario para estar un poco más seguros- Maia no te quiero alarmar...pero vámonos...- dijo Isabelle al escuchar unos gemidos proviniendo desde cerca.
-Claro, yo los seguiré en la casa rodante, ¡ustedes subanse al camión!- gritó al ver quienes eran los que producían esos gemidos se estaban acercando- ¡rapido! ¡Corran!- chillo, pero al ver donde estaban Simón e Isabelle sonrió al ver que ya estaban a sólo metros del camión, Maia puso las llaves en el contacto y piso el acelerador despedazando a un infectado que estaba delante del camión.
