Dustland Fairytale

Cambio Disfrazado de Revelación.

—¡Hey Kent!— una chica llamó a mis espaldas cuando estaba cerrando mi casillero, dudé en voltearme a ver quién era, el timbre no iba a tardar en sonar y lo que menos quería era llegar tarde a Sociología, la profesora ya me odiaba demasiado, no podía darme el lujo de hacer que me odiara más. — ¡Vamos, no me ignores!

Sonreí cuando reconocí la voz de mi mejor amiga, me giré y me encontré con un familiar par de ojos grises cubiertos por un flequillo negro a la altura del puente de mi nariz.

— Scarlet, ¿eres plenamente consciente de que vamos tarde?— se nos unió un muchacho musculoso y alto de cabello castaño claro y ojos azules, su pecho quedaba a la altura de mi frente, y a mi 1.70 eso era demasiado. Él había hecho la pregunta.

—Bah, un par de minutos menos a la clase de la Señorita Morton no va a hacer que nos suspenda— Scarlet dijo de manera despreocupada mientras jugaba con su corbata.

—Puede que a ti no, ¡pero a Sally y a mí nos odia!

—Gracias, Oliver— dije mientras le daba un golpecito en el antebrazo, él me sonrió y luego los dos miramos a la miembro más bajita del grupo. Scarlet levantó la vista hacia nosotros y sacudió la cabeza.

—De todas las personas que pudieron ser mis mejores amigos terminé con el par de niños buenos...y gigantes—dijo ella mientras nos dedicaba una sonrisa deslumbrante, cualquier persona se hubiera ofendido con el comentario de Scarlet, pero Oliver y yo la conocíamos desde primer año de secundaria y estábamos acostumbrados a su humor cortante.

—Vamos a clase Scarlet, prometo llevarte a comer algo en la tarde— le dije sonriendo, mi mejor amiga levantó una ceja y después se encogió de hombros.

—Kent, tú si sabes como ganarte el corazón de una chica. Y te juro que si no estuviera ya saliendo con este idiota aquí al lado ya estaría en tus brazos.— Todos soltamos una carcajada y empezamos a caminar hacia el salón donde teníamos clase esa mañana; a veces la gente preguntaba si no me sentía incomoda con Scarlet y Oliver siendo pareja y amigos al mismo tiempo, pero ya estaba acostumbrada a ello, y ellos sólo actuaban como pareja cuando estaban solos o yo tenía alguien más con quien hablar, así que no era tan complicado como algunas personas creían.

 —Bueno, si alguna vez Sally quiere unirse...—Oliver fue interrumpido por el zumbido agresivo del timbre resonando por los pasillos.

 —Oh no, maldita sea.—fue todo lo que atiné a decir antes de lanzarme en una carrera a lo largo del pasillo, Scarlet y Oliver detrás de mí.

—Scarlet Marie Evans, si llegamos tarde...—Pude escuchar a Oliver decirle algo a su novia pero yo estaba muy ocupada en la puerta blanca frente a nosotros, tomé impulso y corrí a toda la velocidad que pude, ignorando el comentario de Scarlet sobre como debería usar mi falda unos centímetros más larga. En el último segundo alcanzamos a entrar, por algún milagro sin caernos como en las caricaturas.

—Vaya, así que decidieron unirse a nosotros—la voz arrogante y nasal de la Srta. Morton nos recibió,—Kent, Evans, Rogers, sientense y muestren algo de respeto. Por favor discúlpeme y continúe, Señor Adams.— Y con eso la Srta. Morton estaba fuera del salón.

Mis amigos y yo caminamos rápidamente a nuestros asientos en la parte de atrás del salón. Mientras nos sentábamos de la manera más disimulada posible un hombre de traje negro se había puesto de pie frente a todos y sonreía agradablemente.

—Buenos días a todos, cómo la amable Srta. Morton les venía diciendo me llamo Michael Adams y soy miembro de las Better Living Industries,— era un hombre guapo, tal vez estaba en la mitad de sus veintes, tenía cabello rubio de un tono sucio, peinado hacia atrás elegantemente y brillantes ojos color avellana, incluso su sonrisa era agradable a la vista. —Pertenezco a la división social, y el día de hoy he venido con unos compañeros, que se encuentran en otras clases, para hablar con ustedes sobre los Rebeldes.