Después, en la escuela, empezamos cada vez a esforzarnos más para que nuestros padres no cancelen el viaje, por esto en el último examen, el que decidiría si viajariamos o no, Loren y yo nos habíamos preparado lo suficiente pero Harry no, se la había pasado toda la tarde en la consola aun sabiendo que de este examen dependía nuestro viaje.
Era a la primera hora, se llegó el momento en el que la maestra entrega los exámenes, sabíamos que debíamos ayudarlo, así que partió mi borrador en dos y arranque un trozo de papel de la hoja, allí anotariamos las respuestas y se las pasaríamos a Harry, eran 45 preguntas.
Íbamos en la pregunta número 17, hasta que lance el borrador a Loren para que ella se lo diera a Harry, Loren lo lanzó muy fuerte, de tal manera que Harry no alcanzo a tomarlo, y en ese preciso instante la maestra pasaba al lado del puesto de Harry, se agachó y tomo el borrador, no sospechó nada hasta que en el momento en que se lo dio a Harry, el pequeño trozo de papel cayó al suelo, la maestra lo recogió y lo abrió, al darse cuenta miro a Harry fijamente a los ojos y frunciendo el ceño dijo:
-Señor Parker, por favor diríjase a la dirección-
Inmediatamente mire a Loren y nos levantamos, no podíamos dejar a Harry solo en esto, nos acercamos a la maestra los tres y le contamos lo sucedido.
No dejo que terminaramos el examen y cuando todos acabaron, fuimos a la dirección, allí llamaron a nuestros padres.
Cuando llegaron, los hicieron firmar un compromiso que decía que a la siguiente falta seríamos expulsados, nos miraban con una gran cara de decepción, nuestro viaje estaba arruinado, y por querer hacer más, hicimos menos, además nos suspendieron por tres días y el resto que quedaba de la jornada, al llegar al edificio les contamos el por qué lo habíamos hecho.
Y después de suplicar les que no cancelarán el viaje, aceptaron con la condición de que al llegar del viaje debíamos ir al campamento de verano que organizaba la escuela para nivelar los promedios finales, allí hacen a los chicos estudiar durante 10 horas diarias y 4 horas practicando alguna actividad y eso sin contar la hora del almuerzo, era fatal.
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Las clases habían acabado, sentía mucha emoción al siguiente día sería el viaje, estaba empacando las maletas, el vuelo era a las 8:30 am, debíamos estar allí a las 6:00.
Nos veríamos a las 6:30pm en Times Square para comprar un álbum para ir archivando imágenes a medida que viajábamos, Harry había pedido a su padre la cámara, con ella, teníamos planeado grabar lo que sucederia al momento de unir las 7 zafiros.
Cuando salimos de la tienda de fotografía, nos dirigimos al MC Donalds más cercano, pedí una hamburguesa sencilla y papas, Loren pidió una malteada y Harry una soda, mi papá nos recogeria en 30 minutos en La Bolsa de Nueva York.
Al llegar allí, papá se demoró al rededor de 15 minutos, pero al fin llegó, nos dirigimos al edificio y allí terminamos de alistar el equipaje
