Capítulo 58

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Como mañana no podré subir seguramente la quiero terminar entre hoy y el viernes y en cuanto pueda empiezo la segunda parte en otra obra.

¿Final bueno o malo? Quién sabe quién sabe, después lo comprobaréis.

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Tenemos que hablar... - le dije a Dani.

- Entra.

- Dani, lo siento. - dije con las lágrimas saltadas. - Soy idiota, gilipollas...

- Pequeña para de insultarte y cuéntame que ha pasado.

- Ayer cuando fui al baño creía haber agarrado tu mano para que me acompañaras pero esta mañana después de leer tu whatshapp me puse a pensar y me di cuenta que del que había agarrado la mano era de Jesús... - dije llorando. - Y si, es lo que estás pensando, me lo follé creyendo que eras tú. Por eso, creo que lo mejor para los dos será darnos un tiempo, yo me voy a Londres a la escuela de moda y tú te quedas aquí con tus fans y todo.

- Pero, jodeer voy a matar a mi hermano. - dijo levantándose.

- Dani para. - dije empujándole. - No vas a conseguir nada peleándote con tu hermano, solo haceros más daño, ¿qué quieres que Gemeliers acabe? Porque yo no.

- Joder, es que no se como se le ocurre, siendo mi hermano se tira a mi novio. - dijo llorando y lleno de rabia.

- Dani íbamos todos muy borrachos y casi no sabíamos lo que hacíamos, así que deja a tu hermano, intenta olvidar todo, intenta olvidarme, rehaz tu vida, puede que nos queramos mucho pero los amores llegan un día que se acaban. Puede que te prometiera un para siempre pero no siempre todo se cumple, lo siento. - dije dándome la vuelta y yéndome.

Llegué a mi casa y me encerré en mi cuarto.

Sabía que decirle a Dani que se olvidara de mí era lo mejor, porque no iba a volver más hasta que por lo menos no acabara mis estudios, así que lo mejor es que el rehiciera su vida y yo la mía.

Aquel día y los siguiente me los pase encerrada en mi cuerpo. Casi no comía, no dormía, me pasaba el día llorando.

Mi madre intentaba calmarme pero no podía, echo de menos a sus caricias, sus palabras, sus caras, echo de menos a Dani.

El otro día mi madre me comentó que el 7 de enero me iba a Londres.

- Mi niña. - dijo mi madre entrando en mi habitación.

- Dime. - dije intentando no llorar.

- ¿Sabes que día es mañana?

- 6 de enero, ¿por?

- Deberías acompañarnos a casa de los Oviedo, Eva te tiene unos regalos.

- Mamá no quiero cruzarme con él, me derrumbare más de lo que estoy.

- Venga mi niña, saca a esa Brenda que tienes dentro. Esa niña fuerte que no se rinde ante nada y que es fuerte contra todo.

- Bueh mamá lo intentaré, quiero darle una cosa a Dani y a Jesús antes de irme.

- Vale. - dijo abrazándome. - Y baja a comer algo anda que llevas muchos días aquí encerrados.

- Si acaso ahora bajo. - le dije volviéndome a tumbar en la cama.

*6 de enero*

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¿Qué pasará cuando se vuelvan a reencontrar?

Campamento de Verano [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora