Cherry Bomb ♡ [Hiccelsa & Jackunzel] ♡.

♡Final♡Be my forever.

-Esto es muy raro... No he visto a Eret desde ese día, pero tengo que hacerlo ¿No?- pensó Elsa antes de tocar la puerta de su ex departamento. Seguía teniendo sus llaves pero le parecía mal o inapropiado abrir y entrar como si nada después de todo. Acomodó su vestido y toco la puerta.

-Ahh ¿Hola?- preguntó confundida Elsa cuando una chica de cabello castaño corto y ojos azules abrió la puerta.
-¿Puedo ayudarte en algo?- contestó aquella chica sonriendo.
-Ahh si... Es que yo vivía aquí y necesito mis cosas-
-Oh tu debes ser Elsa, pasa-
-Gracias- sonrió Elsa mientras entraba. Todo parecía seguir igual, solo unas cuantas habían cambiado pero todo seguía siendo muy familiar para ella.
-¿Quién era Roxie?- preguntó Eret saliendo de la cocina con un par de cervezas.
-Hola, Eret- saludó la rubia apenada.
-¡Hola!- el azabeche sonrió acercándose.
-Solo vine por unas cosas, espero no molestar-
-No lo haces ¿Gustas?- preguntó Eret refiriéndose a la bebida que llevaba.
-Oh no... ¡No puedo por ahora!- sonrió Elsa señalando su abultado estómago.
-¡Eret!- lo regañó Roxanne mientras bebía un poco.
-¡Era una broma!... Por cierto. Elsa, ella es Roxanne Richie- rió el azabeche presentandolas.
-Mucho gusto, Roxanne- Elsa estiró su mano.
-¡El gusto es mío! Vi un par de presentaciones tuyas hace tiempo, la ultima fue en New York- Roxanne le correspondió el saludo de manos muy entusiasmada.
-¿Las viste?- dijo algo confundida Elsa.
-Si, soy periodista y cubría esos eventos ¿Volverás a bailar?-
-Pues estaré fuera una temporada...- dijo Elsa algo nostálgica.
-Lo entiendo, el bebé ¡Felicidades por cierto!-
-Aquí estan tus cosas Elsa ¿Te ayudo a bajarlas?- interrumpió Eret cargando una caja y tirando de una maleta..
-Si... Gracias- sonrió Elsa -Fue un gusto conocerte Roxanne- dijo antes de salir.

-Y...¿Vienes con Hiccup?- preguntó Eret mientras llegaban a un estacionamiento. -No... Tomé un taxi, él esta ocupado- contestó Elsa con una sonrisa.
-Es linda- volvió a decir refiriéndose a Roxanne.
-Lo sé, la conocí hace poco en un evento-
-Me da gusto- ambos se quedaron en silencio mirando a otro lado mientras el taxi llegaba, esa sensación les parecía muy rara.
-¿Va todo bien?- Eret rompió el silencio mirando con una sonrisa el estómago de la chica.
-Si... Aún no sabemos que va a ser- rió Elsa algo nerviosa.
-Pues... Tiene forma de que sera un mini Hiccup ¿no?- se burló el azabeche provocando que Elsa riera mas.
-Todos dicen eso- contestó la rubia
-Te ves muy linda de esta forma- sonrió Eret mientras el taxi iba llegando.
El azabeche ayudó a subir las cosas en el maletero y también a que la chica subiera a la parte de atrás.
-Cuida bien de mini Hiccup-
-Eret... Nosotros, bueno ya sabes-
-Las cosas son como son, tranquila- Eret le guiñó el ojo cerrando la puerta.
-Gracias- Elsa sonrió besó tiernamente su mano antes de marcharse.

El día habia sido pesado para Hiccup, desde que Elsa había regresado con él todos los días se le hacían eternos, no podía esperar a que llegara la hora de regresar a casa para verla, esas ganas habían aumentado un poco mas desde que el embarazo comenzó a notarse mas.
Llegó a casa poco antes del atardecer y vio las cosas de Elsa en el corredor sin embargo comenzó a preocuparse al notar demasiado silencio en todo el lugar. Caminó nervioso hasta llegar a la sala y sintió una ráfaga de aire, miró de donde venía y miró a Elsa totalmente dormida en un pequeño sofá en el balcón del departamento con Chimuelo cuidando de ella. Sonrió mientras se acercaba a ella, ese balcón nunca había sido usado hasta que ella llegó, estar ahí le calmaba de sobremanera todos sus malestares.

-Elsa...- susurró Hiccup mientras se inclinaba para darle un beso.
-Estás aquí...- sonrió la chica perdida aún entre sueños.
-Despierta, vas a enfermarte-
-Tenía calor- terminó de despertar Elsa y sonrió.
-¿Te haz sentido bien? ¿No te ha dolido tu cadera o la cintura?- preguntó Hiccup algo preocupado, los doctores habían advertido que debido a sus lesiones por el accidente Elsa tendría que tener cuidado.
-Estoy bien, tranquilo...- dijo la chica calmada mientras jugaba con su cabello.
-Bien... ¿Iremos a cenar con tu padre?-
-Claro... No nos perdonaría no ir- Elsa se levantó con un poco de trabajo.
-Me daré una ducha y nos vamos-