Invisible Kids (METALLICA)

Capítulo 5: Furia total.

¿Saben qué es peor que perder al bajista de tu banda? ¡Perder unos meses después al vocalista de la banda, tu mejor amigo de casi toda la vida!

Aunque Kirk haya estado con muy poca inspiración para escribir ayer, logró reflejar muy bien las constantes peleas por el asunto de la salida de Jason, los ataques de pánico y sus intentos por mejorar a la banda, los cuales resultaron todos en vano.

Yo hoy les voy a explicar mi peor ataque de furia en toda la historia de mi existencia.

Fue un día en que nos reunimos todos en el estudio con la idea de componer algo porque, estábamos pagando el correspondiente arriendo al estudio, le pagábamos a los sonidistas y técnicos, a Bob... ¿para qué derrochar tanto dinero y no hacer nada? Fue algo forzado, no obstante, acabaríamos en la banca rota si seguíamos dándole más tiempo al tiempo.

Y... bueno, la cita fue a las dos de la tarde, pasaron las horas y era normal que alguien llegara tarde, generalmente solía ser yo que llegué a las tres y algo, no obstante, seguía faltando alguien ahí. Más horas pasaron y, ese alguien no llegaba nunca.

- ¿Y dónde mierda está James? -recuerdo haber gritado furioso un montón de veces, los chicos me miraban encogiendo los hombros.

No recibía respuestas de ningún tipo. Yo hacía mil y un llamadas a conocidos en común que tengamos, a su esposa y nadie sabía en dónde él podía estar. Caminaba en círculos en el estudio, soportando comentarios idiotas en plan "¿Y por qué no te relajas?", "Seguro se quedó dormido." Y otras mierdas.

Yo negaba porque sentía que se trataba de algo muchísimo peor.

Y vaya que resultó así.

En todo el día, no hubo rastro de James. Desperdiciamos el tiempo en sólo querer saber de él, algo irónico, ¿no es así?

Hasta que nos dimos cuenta que no hacíamos más que perder el tiempo, entonces, nos separamos para cada uno irse a sus respectivos hogares.

Recuerdo que ese día yo estaba hecho furia, ¿y cómo no? Tantas horas desperdiciadas que pudimos usar para trabajar y componer algo fantástico. Al final, llegué a mi casa lleno de ira, echando puteadas cada cinco segundos, maldiciendo en todos los idiomas que yo sepa hablar o al menos decir malas palabras.

Obviamente traté de moderarme cuando vi a mi hijo Myles, era todavía un bebé para mí así que era muy mal educado actuar de forma pesada. Quise ser amable, traté de hacer como si nada con mi familia, que los problemas esos no afecten mi vida privada, Lars no es sólo Metallica...

En aquel entonces no lo comprendía, sólo vivía en esa burbuja de fama llamada Metallica, no asimilaba lo que sucedía fuera de eso, el mundo real tras la fama, llegaba a dudar quién era yo en realidad, bueno, supongo que Kirk y James pasaron lo mismo, lo sé, en medio de las terapias psicológicas que tuvimos, recuerdo que me lo confirmaron.

Finalmente, cerca de la una y media de la mañana, recibí una llamada de Francesca, esposa de James, explicándome qué sucedió con él o algo así... Dijo que él se iba, por unas semanas, que pronto regresaría, dijo que me tranquilizara, cosa que no hice, que él estaría bien, que no regresará hasta mejorar un poco.

Lo comprendía en aquel instante a medias, sabía que él y yo teníamos conflictos internos, ¿sería que él combinó los conflictos de la burbuja con su vida privada y está pagando las consecuencias como lo hacía yo? Probablemente.

Y... me gané un buen regaño por parte de Skylar, esposa que tuve durante esos años, ¿por qué? Ella consideraba de muy mal gusto que yo llegue de mal humor a casa, me las dé de hipócrita por "ignorarla" e ir directo por mi hijo, porque claro, todos los hombres debemos abandonar a nuestros hijos y ser unos bastardos, huir como maricas de los niños que tú mismo procreaste porque o sino eres un cobarde. También me llamó hipócrita por estar echando puteadas en la llamada telefónica con Francesca, tachándome de machista sin saber ella que no insultaba a la esposa de James, sino, estaba liberando la rabia que tenía acumulada por culpa de la burbuja.

Entonces, ahí fue cuando mis problemas personales se mezclaron con los problemas de la burbuja y estalló el caos.