Recuerdos helados

capitulo siete

Mi cuerpo, tembloroso fragil, sacudido por oleadas bravas , duras , dificiles de surfear, me encontraba tan perdida.Tenia tanto que pensar y tanto que perder, tenia un sabor en mis labios a pesar de que mi mente se dirijia a otros.

Tentación.
Me llamaba la atención.
Esos labios carmín.
Y cuerpo atenuado.

Quiero probar. Taladraban en mi mente dichas palabras, el fin de semana no me las sacaba, se encontraban prisioneras en mi y sabia que no las podía hacer salir. Mi corazon bombeando letras en sangre que forman confusión, Ian mirandome pidiendome con la vista besarme y yo cual pajaro que soy huyo y me sumerjo en un vuelo solitario.No no puedo, no puedo decidir, no se que hacer, no quiero dañar a nadie y mucho menos ser dañada de nuevo, mi mente me pide una cosa y mi corazón otra, la única asignatura del día a la que atiendo lo de es literatura pues es la mejor vía de escape que conozco de resto camino por el mundo como si no estuviera herida, pretendo no estarlo y pienso que no lo estoy hablando con Arabella, cuanto desearía tener a alguien a quien contarle mi confusión grita con desespero mi corazón.

Belle sin duda es una zorra, arpia y sin duda no tiene un apice de humildad en ella , cada vez que paso a su lado comenta algo ...lo cual me hiere, ella que todo lo sabia, ella que en todo me ayudaba me abandono de noche en el bosque y conto injurias y secretos mientras yo seguia cayendo. Y hoy ...hoy me hizo hablar con la vainilla, ver el dolor, la soledad de nuevo, queriendo esconder mis pesadillas bajo el humo de mi cigarrillo.

   A vainilla huele, ojos claros y labios muy gruesos, pelo castaño y figuara de infarto, es linda muy linda pero no tanto como Arabella, aun notaba como recordaba sus frías y heladas palabra,  vainilla es dulce, vainilla es frio , vainilla es dolor.

   - Oh mira quien pasa por ahí-señaló Belle regocijandoce y meneando su melena rubia, y con sonrisa triunfante.

-Zorra-escupo con sinceridad.

-Puta.

-Zorra asquerosa, perra, hija del capitolio ojala tobias te lance cuchillos y te clave uno en la cara.-supuse que no lo entendería pero me salio del interior , para mi sorpresa me miro con mala y cara e hizo un gesto llamando a una tercera persona que se encontraba tras de mi, el perfume ,penetró en mis fosas nasales al instante.

-Hola Eve cuanto tiempo-saluda Belle con esa vena teatrera que siempre me ha dejado ver, el resto del mundo son ciegos a sus trucos.

-Tienes razón Belle.-dice afirmando ella con una sonrisa que una vez llegó a cautivarme aunque ahora solo me hace sentir dolor...o puede que ira.-Oh vaya...hola Elizabeth

-Eve.-le dirijo un movimiento seco de cabeza mostrándome indiferente aunque se que no es así, la mirada de Belle me acosa con su victoria, el olor de Eve me marea y yo me disculpo y corro hacia los lavabos, y maldigo en silencio, trato de relajarme pero en ese momento mi móvil no para de sonar con mensajes suplicantes de Ian , suplicando hablar.Cuando salgo del baño siento como si fuera el centro de atención, como si fuera en ropa interior o algo así.

       Esta vez Belle no ganará, tengo cogida a esa zorra y me las pagará, esa chica plástica, la Barbie de la sociedad, voy con decisión hacia ella, esta con el chico rubio de nuevo y este la observa con fascinación, y me pregunto que vera en ella pues lo único que logro entrever es una cubierta bonita para un oscuro interior.Estoy lo suficientemente cerca como para escucharles y me sorprendo a mi misma haciéndolo.

-Belle mi pequeña Belle como no me vas a gustar.

-hay gente que no piensa como tu...

 -¿Y que que importa lo que digan ?

-a mi me importa.-responde mirando a un punto muerto.

-pues no debería-le asegura con un beso en los labios.

     Y ahí es cuando intervengo yo, hago como ella, finjo que me cae bien , como si lo que pasó no importase y como si mis cicatrices no se hicieran mas visibles para mi al tenerla ahí, como si siguera siendo mi mejor amiga, él me mira como si supiera lo de Ian pero aun asi me abraza y hablamos de la fiesta del fin de semana, entonces le pido disculpas y que si me presta a Belle unos minutos, ella me mira sorprendida pero me sigue al instante.

-¿que quieres ahora?
-Solo preguntarte por que te divierte tanto joderme

-No te das cuenta, eres fuerte, después de burlas, de muertes ...de todo eso sigues en pie, por eso quiero hacerte caer.

-oh inocente Belle cuando sientas que una gran parte de ti a muerto ya hablaremos de lo que es caer.

-¿Ah si? Y tu que sabes de mi vida.¡NO SABES NADA!

-Te conozco mejor de lo que crees y esta chica preocupada de como la ven todos, que se divierte con los problemas del resto para olvidar los suyos no es la misma persona que creía conocer, una persona eras ahora te has convertido en la protagonista de tu propio mundo de de las maravillas -le digo duramente como una piedra.

-Tal vez así sea feliz.

-Si tu lo dices...Yo me he cansado de seguir asi , bueno ya puedes volver a tu Putalandia , he oído que eres la reina de ese sitio, tengo un regalo mi reina, es un dedo reservado solo para ti.-le espeto y saco mi dedo del medio, me doy la media vuelta y río .

   Y al fin me siento un a ganadora, que he dicho lo debido, que al fin y me he librado de este teatro tan horrible que no quería representar, me he librado de Belle, de sus comentarios, de ser juzgada.Y ahora quiero gritar y dejar mi libertad volar junto a las nubes.

    Hoy he esquivado a Ian como si fuese una piedra en mi camino, lo cual no me enorgullece pero después de lo pasado no me encuentro con ganas de enfrentarme a él, ni a perderle, no quiero perderle. Al salir veo a Arabella con un cigarrillo , esta apoyada en un muro, vestida con un top negro, una linda chaqueta y unos vaqueros oscuros, se ve muy linda, golpeo mi cara ante el pensamiento y me dirijo a Abrazarla, su olor me envuelve y me siento tan bien, me siento libre .

-¿Sorprendida?

-Mucho y gratamente.-respondo besando su mejilla.-No sabía que ibas a venir...

-Estaba por aquí y ya sabes me apetecía estar con Lizzy.-comenta rodeándome con su brazo y sonriendo, me gusta que me llame asi, es más podría oírla todo el día diciéndolo.

-Pues Lizzy se alegra de que sea así.

-Vamos pequeña hagamos locuras, riamos y paseemos.-me tiende la mano y no lo dudo la agarro con fuerza y no la suelto, como si fuera una cuerda que me sujeta al borde del precipicio.