André y Cannelle despertaron con una cruda inimaginable, Argus en cambio parecía no haber bebido nada y Victoria como conductora designada estaba apenas almorzando.
-Buenos días- dijo Quetzy sonriendo a los cuatro- Anoche no vi llegar a...- Corbin estaba justo frente a ella- A la pequeña Mili- todos rieron.
-No tan fuerte- dijo sujetando su cabeza. El celular de André comenzó a sonar y él se levantó de inmediato.
-Hola Andy, solo quería despedirme antes de tomar el vuelo a España. ¿Algún mensaje para Eli?
-Quédate en donde estas. No puedes marcharte de inmediato.
-¿Qué propones? ¿Qué me quede y ser tu novia? Tal vez un encuentro de película, verte llegar por mí y que me pidas no marcharme, pero somos muy jóvenes.
-No juegues con eso. Debes quedarte y estudiar como las personas normales, nada de leyes por internet o en casa, solo quiero que vuelvas a esos días en que teníamos catorce.
-Andy, no quiero volver a explicarte de nuevo como es lo nuestro.
-Si tomas ese avión te juro que no te esperare, que me alejare de ti para siempre. Te juro que lo lamentaras. Por favor, no lo hagas, no me dejes en el olvido.
-El drama no es lo suyo señor arquitecto. No me arrepentiré, te amo.
Anaél estaba aún recostada a lado de Oscar, había pasado la noche en su casa, en su recamara, incluso en su cama y simplemente no había pasado nada, estaba sorprendida. Ahora que estaba el día iluminando la habitación pudo ver que la casa era modesta, tenía tres habitaciones, sala, comedor y cocina, todo en una sola planta y con espacios abiertos, dejando las habitaciones apenas cerradas con puertas pero con enormes ventanales, seguramente costaba bastante pero también debía ser seguro que su familia estaba siempre trabajando pues a pesar de que todo estaba limpio no había nada en el refrigerador.
-¿Ya estas husmeando?- dijo sonriendo tomándola de la cintura y jalándola a él.
-Dejamos la puerta abierta y tus ventanas...- él sonrió
-Bueno no vendrá nadie aquí, así que duerme- ella se voltio y lo miro a los ojos
-¿Cuántos hermanos tienes?- él tenía los ojos cerrados, pero su sonrisa era lo único que en ese momento la tenía atrapada
-Somos nueve- Anaél se levantó de golpe y él comenzó a reír, entonces ella comenzó a golpearlo.
-Sofía y yo, es todo... ella tiene quince- abrió sus ojos y la observo- ¿Por qué preguntas?
-Bueno, tú conoces todo de mí, pero yo no sé nada.
-¿Qué más quieres saber?- dijo mirándola, entonces ella sonrió y lo beso.
-¿Quién te educo?- él la brazo y con su mentón en el cabello de ella comenzó a relatar como sus abuelos habían ayudado a sus padres para que ellos se dedicaran a trabajar, entonces entendió de donde venía ese lado tan gentil y caballeroso, ese único detalle que no vio venir jamás.
-¿Estamos en una relación?- ella lo beso y eso fue más que un si para ambos.
Cannelle miro su celular por sexta vez, estaba más que molesta por la falta de un mensaje o llamada, siempre había sido de las que no aceptaban una cosa así pero con Leonardo, ahora mismo quería ser como todas y llamarle, reclamándole que no estaba al pendiente de su decisión. Si sabía que no estaría en su casa, podía llamar a la hacienda, pero no tenía el número tampoco.
-¿Todo bien?- dijo Quetzy sonriendo, entonces Cannelle asintió.- ¿Podemos hablar?
-¿De?- dijo mirando su celular de nuevo- No tengo temas de... es verdad tienes mi edad ¿No?
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PROMETO AMARTE
RomancePrometo amarte hasta que mis labios ya no puedan pronunciar más tu nombre, hasta que mi alma quede flotando en el espacio. Prometo tenerte en mi corazón hasta que la última gota de sangre desaparezca, cuando ya no pueda pensar en nada más, aun estar...