PROMETO AMARTE

CAPITULO 6: SUSPENDIDOS

Cannelle despertó con esa sensación de haber perdido algo, aquella conversación había marcado todo en sus memorias, al voltear se dio cuenta de que él se había marchado dejando en su cama una rosa blanca y una nota que la hiso perder el piso, después de la seguridad en sus brazos la noche anterior... hoy estaba sola y con un mensaje que decía más de lo que quería escuchar.

<Princesa debo irme, pase una noche hermosa, te dije que no te arrepentirías de este juego>

Leonardo se maldecía por haber hecho aquello, sin embargo debía poner una barrera entre sus sentimientos y su diversión, ella no podía ser la mujer que buscaba. Sus traumas ya eran grandes como para ingresar a su vida nuevos, la decisión la había tomado hacia tanto, que prefirió mirar el paisaje y olvidar que entre sus brazos había una paz que no conocía. Estaba pensando en aquello cuando un mensaje llego a su móvil.

<Gracias por la rosa, obvio me encanto pero no vuelvas a hacerlo, aborrezco estos detalles>

<Estaré atento de no molestarte. Prefiero que no haya detalles para no confundirnos>

<Claro, serán solo unos meses hasta que encuentre a alguien, es la parada del autobús mientras llega el nuestro podemos tener una linda charla. Nos vemos>

Leonardo llamo a Cannelle, tenían que aclarar las cosas, debía defenderse o por lo menos intentar que ella comprendiera que eso solo era una aventura más.

-¿Para qué llamas?- dijo ella mientras bajaba las escaleras.

-Me parece que te has molestado princesa. Solo quiero poner las cosas en claro.

-Estoy ocupada, mejor me dices otro día que pasa- abrió la puerta y encontró a José parado frente a ella con un ramo de rosas- ¿Creí que nos veríamos más tarde?

-Pensé que te arrepentirías. ¿Con quién hablas?- ella colgó el celular y lo miro sonriente.

-Solo una amiga, bueno ¿vamos?- dijo sonriendo y él quiso creer aquello. La tomo de la espalda y la condujo hasta su auto modesto.

André observo su correo de nuevo, estaba pensando en ir directo tras ella cuando descubrió aquel mensaje, era concreto y sincero, pero también le abrió los ojos. Elibel no iba a esperar por él durante más tiempo. Ahora ese correo estaba mostrando aquello.

-¿Estás pensando?- dijo Anaél mirando a su hermano.

-Sí, es que Elibel me conto que está saliendo con una persona ¿No es muy prematuro? A penas han pasado dos meses y ella ya sale con un tipo extraño, es solo que siempre elige mal.

-Quiero entender que las cosas con ustedes solo son de amistad, pero la verdad es que veo demasiadas cosas juntos que han hecho y pienso en lo divertido que su relación.

-Bueno, tengo la solución para no preocuparme por aquello.- se levantó y tomo las llaves de su motocicleta.- ¿Quieres venir?- dijo a su hermana.

-Lo siento, esta vez te mataras tú solo, tengo planes con la familia de mi novio- dijo divertida y André se marchó sin más.

Cannelle bebía su batido como cualquier cosa, estaba sentada frente a su primer amor, aquel que la conquisto un día de lluvia, mientras visitaba la tumba de su madre.

-Debiste ver cómo fue todo esto cuando te fuiste, casi quitan la cantina, pero Argus se opuso como siempre, entonces el presidente municipal acepto su petición.

-Escuche que tu estas con ellos, que vas a postularte para la candidatura del gobierno y que por eso te comprometiste con Ángela- José sonrió tristemente, ella era libre, pero él no. Sus manos tocaron por unos segundos las de ella, sin embargo Cannelle se soltó.