Capítulo 6

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Ninguno de los dos ha sacado el tema del beso que tuvo lugar hace varias noches en el apartamento del escritor. Trabajan como de costumbre, Rick le sigue llevando el café todas las mañanas y Kate agradece el gesto, sin embargo, ninguno olvidará lo que sintieron cuando sus labios se juntaron por segunda vez pero, esta vez, de verdad.

- ¡Hey Espo, revisad las cuentas de la víctima!

- A la orden.- Beckett va de un lado para el otro y Castle con ella, juntos forman un equipo espléndido y no quieren estropear eso por un beso.

Kate mira su reloj de vez en cuando, tiene cita con el Doctor Burke; la tercera esta semana, tiene que hablarle sobre lo que ocurrió, ¿hizo mal? Tan sólo le hizo caso a su corazón.

- Gracias chicos, avisadme de cualquier novedad.- comenta Kate mientras recoge sus cosas.

- ¿Ya te marchas? Pensaba que tomaríamos algo.- Rick no quiere presionarla, ni mucho menos, pero una cerveza nunca viene mal.

- Quizás otro día, tengo que ir a un sitio. Hasta mañana.

- Hasta mañana.- Kate se siente culpable por ocultarle estas cosas, primero la declaración en el funeral y ahora esto. 

En el despacho del Doctor...

- Buenas tardes, Katherine.- el mismo ritual, Kate llega, se sienta en el sillón y espera a que el hombre comience a hablar. Hoy es diferente, ella ha pedido esa cita.

- Buenas tardes, Doctor.- sus manos se entrelazan, su nerviosismo es obvio y no hay forma de disimularlo.

- Usted me dirá, ya son tres veces las que nos vemos esta semana. ¿Qué le inquieta?

Kate no sabe por dónde empezar, quizás si le hubiese contado a Rick que ella recuerda todo lo sucedido con el disparo...no estaría hablando con su psicólogo.

- Castle y yo nos besamos.- espera una reacción, un gesto por parte del hombre pero nada, un silencio absoluto inunda el pequeño despacho.

- ¿No va a decirme nada? Necesito una opinión, algo.

- ¿Él te besó?- Es entonces Kate la que opta por no contestar inmediatamente, baraja la respuesta; no puede construir su vida basada en mentiras, es hora de terminar con la farsa.

- En realidad, fui yo. Tras el secuestro en el banco, cuando estalló la bomba con él dentro...Mis sentimientos hacia él se intensificaron.

- ¿Y ha concertado una cita sólo para decirme que está enamorada del Señor Castle?- En realidad, ese es el principal motivo pero necesita alguien que le diga si es lo correcto o no.

- No puedo salir con él, las normas lo prohiben, si Gates se entera...Castle no podrá trabajar más de asesor.

- Kate, eres consciente de lo que él siente por ti. Lo estuviste negando durante semanas pero esa es la realidad. Si él te gusta, ¿por qué no dejas que se derrumbe ese muro?

- No es tan sencillo, no quiero estropear lo que tenemos. Si empezamos a salir y la relación no tiene éxito...Le aprecio demasiado como para arriesgar la amistad por amor.

- Bueno.- el psicólogo se levanta del sillón y cierra la libreta.- se acabó la cita.

- ¡¿Cómo?! ¡No me ha aconsejado!

- No hace falta, Usted misma se ha respondido. Quiere al Señor Castle pero se niega a aceptarlo, tiene miedo y eso, querida, es una muestra de debilidad.

- ¿No puede decirme al menos que debo hacer?

- Ya sabe lo que pienso respecto a ese tema, si continua prolongando esto y continua con las mentiras; tarde o temprano le perderás y será para siempre.

Y dicho esto, se marcha, dejando a la inspectora sin saber qué decir ni hacer. Es la primera vez, desde que murió su madre, que se siente sola de verdad. Tan sólo puede hacer una cosa, más vale que zanje este tema cuanto antes.

Busca el número de su compañero mientras sale del edificio, no obtiene respuesta, quizás sea porque es demasiado tarde. Coge su coche y conduce hacia su apartamento, necesita un buen vaso de whisky. Se lleva una sorpresa al llegar a la puerta.

- Ca...Castle, te he llamado.- éste quita la aplicación de los Angry Birds y se levanta del suelo.

- Sé que no tardarías en volver, aunque no tenga ni idea de dónde te has metido el resto de la tarde. 

- Ya bueno...por eso te he llamado. Necesito hablar contigo. Pero mejor vamos a entrar.- abre la puerta y entra junto con su compañero.

- Kate, estos días has estado muy distante, más de lo habitual. Sé que tienes un muro y es muy difícil traspasarlo pero...deberíamos de hablar sobre lo que ocurrió en mi loft.- Kate le observa paralizada, quizás ella sea capaz de seguir con la amistad pero Castle ya se le declaró y seguro que es capaz de hacerlo otra vez.

- Verás Castle yo...- pero el móvil de él interrumpe.- Alexis, ¿qué ocurre? Vale, te ayudaré.- y su padre cuelga.

- ¿Alexis está bien?

- Sí, quiere que le ayude con el discurso de graduación, bueno, ¿qué ibas a decirme?

- Es sobre el día del disparo...no fui del todo sincera contigo.- Rick espera paciente, cruza los brazos y sonríe, intenta tranquilizar a su compañera.

- Lo recuerdo todo, sé que te declaraste. Lo siento mucho de verdad pero estaba aterrada y confundida.- el rostro de Castle va cambiando lentamente hasta apretar la mandíbula.

- ¿Y has esperado hasta ahora para decírmelo? ¿Qué te ha hecho cambiar de opinión? 

- Empecé a ir al psicólogo por el disparo y me ha estado ayudando, con mi problema, con lo que tenemos nosotros.

- Me has estado mintiendo Beckett. Te dije lo que sentía y me mentiste en el hospital, en mi cara. ¡¿Cómo pudiste?!

- ¡Entiende que estaba pasando por una situación difícil!

- ¡Yo soy tu compañero, Kate, desde hace tres años! ¡¿Eso no significa nada para ti?!

- Rick, tienes que escucharme...

- ¡¿Escucharte?! ¡¿Por qué debería hacerlo?! ¡¿Se supone que debo creerte ahora?!

- Entiendo que estés enfadado pero tenía miedo, miedo de perder lo que hemos construido durante tres años. Eres demasiado importante para mí.

- Y por eso me alejas, saliste del hospital y estuviste dos meses sin llamarme, sin decirme nada. 

- Necesitaba tiempo, ya te lo dije.

Rick camina de un lado para el otro, nervioso y con los ojos a punto de salirse de sus órbitas.

- Ahora soy yo el que necesita espacio, espero que lo entiendas.- responde al fin algo calmado.

- Pero Rick...

- ¡No! ¡He estado aquí, Kate! ¡4 años esperando a que abras los ojos y veas que estoy aquí...que soy más que un compañero! Cada mañana te he traído un café sólo para ver una sonrisa en tu rostro porque creo que eres la persona más brillante, exasperante, estimulante e irritante que jamás he conocido. Sabes lo que siento por ti y si eso significa algo para ti, si te importa algo, deja que me vaya.

Kate no dice nada, tan sólo observa cómo Rick abre la puerta y desaparece dando un fuerte portazo. Se lo merece, así son las mentiras, acaban haciendo daño.

Sé que me he saltado casi que toda la temporada pero dije que sería una mini historia, espero que os esté gustando. Seguro que os habéis acordado de Always al leer la última parte.


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