LA FIESTA DEL VECINO DE LA VENTANA

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Kai

Mire el reloj, las siete y media, tenemos que empezar a arreglarnos o sino llegaremos tarde a la fiesta de Ash. Me levanté del sofá y fui a la habitación de Pay <<Tock Tock>>

-Pay... -dije abriendo la puerta- Pay despierta.

-Un ratito mas -dijo mientras se removía entre las sábanas-.

-Llegaremos tarde a la fiesta del vecino.

-¿Kaila?

Me di por vencida y fui a la cocina a por un vaso grande, lo llené de agua y me puse al lado de la cama de Pay.

-¿Pay? -gruño y yo le tiré el vaso de agua a la cara- para que te levantes.

-gritó- ¿Pero a ti que te pasa en la cabeza? -se levantó y se metió en el baño-.

-Pay venga no te enfades y arreglate que sino llegaremos tarde -dije hablándole a la puerta del baño- además ha sido una pequeña venganza por llamarme por mi nombre.

-La próxima vez me tiras de la cama -dijo caso gritando a traves de la puerta- Venga vale te perdono.

-¿Qué tu m perdonas? -abrió la puerta y asintió mientras se dirigía al armario- vale, vale, lo que tu digas.

-Yo me voy a bañar ya y empezar a arrgarme ¿y tu?

-Igual. Bueno luego cuando termines ven al cuarto para avisarme -ella asintió y yo me fui-.

Eran casi las nueve y media y llevaba un rato esperando a Pay, pero al ver que no venía fui a su cuarto y llame, justo al momento una dulce y atodigada voz dijo:

-¿Kai eres tu?

-Obvio ¿quién sino?

-Ya salgo.

-Si venga date prisa -dije ansiosa por ver cono iba vestida-.

Fue decirlo y al instante salió vestida con un vestido turquesa claro con algo de vuelo, pedrería en el escote de corazón, sin tirantes, largo por un poco mas abajo que las rodillas por detrás y corto hasta la mitad de los muslos por delante, llevaba también unos tacones blancos altos, el pelo suelto con algunos tirabuzones por encima, llevaba poco maquillaje ya que a ninguna nos gusta maquillarnos mucho. Al vernos nos quedamos las dos boquiabiertas.

-Dios Kai es la segunda vez que te veo con vestido -me sonroje un poco. Yo llevaba un vestido ajustado, hasta la mitad de los muslos, sin tirantes, sin escote, tacones negros altos y el pelo suelto con rizos perfectamente definido - estas preciosa.

-Tu también -reí- ¿vamos? -asintio-.

Cogimos algo de dinero, los móviles y las llaves, nos pusimos también nuestros abrigos totalmente iguales tipo gabardina (Pay blanco, yo negro) y salimos por la puerta dirección al piso de Ash. En cuanto salimos del edificio notamos el frío de la noche que nos hizo quedar paralizadas, en cuanto nos acostumbramos seguimos andando hasta el edificio de en frente. Unos minutos después estábamos llamando al timbre del piso 47A (lo se son muchos pisos) en unos pocos segundos un chico moreno de ojos oscuros e hipnotizantes nos abrió la puerta.

-Hola ¿debeis de ser las vecinas de en frente no? -asentí sin poder hablar-

-Si, yo soy Payton, aunque mis amigos me llaman Pay, y ella es Kai -dijo hablando por las dos-.

-¿Kai? Precioso nombre, como tu -me miro a los ojos y sentí mis mejillas arder- Yo soy Bruno, un amigo de Ash. Pasad por favor -nos hizo espacio para que pasemos-.

Al pasar dentro la musica empezó a oírse mas alta que nunca y las luces hacían que hubiera un buen ambiente. Bruno dijo algo sobre que Ash vendría en seguida y se perdió entre tanta gente. Entonces suspire y me gire a ver a Pay que miraba a todos lados asombrada.

-Ni que fuese tu primera fiesta Pay -dije teniendo que levantar algo la voz para que me escuchase. Ella rió- creo que debería ir a por algo de beber.

-Vale, yo te espero aquí.

Estaba cogiendo dos bebidas de yo que se que cuando veo a Bruno a lo lejos hablando con dos chicas rubias y muy guapas, sentí algo en mi pecho, una punzada muy dolorosa y a la vez sentí mucho odio hacia el y hacia esas dos tipas. Cogí las dos bebidas y volví hasta donde deje a Pay, pero no estaba ¿dónde diablos estaba? Me sentí muy mal en ese momento y me fui a una esquina a beberme esas dos copas yo sola.

Iba por la quinta copa cuando alguien me agarra del brazo y me dice:

-Ya has bebido suficiente

-!Devuelveme mi copa! -dije intentando cogerla, pero Bruno era mucho mas alto que yo- quiero beber.

-Pues yo también -dijo vacilante- y yo me bebo esta.

-Ve a por la tuya idiota y devuelveme la mía -dije levantando la voz-.

-¿Y si no quiero que? -dijo acercándose a mi cara-.

-Te vas a enterar -iba a darle un puñetazo pero agarro mi mano y me dio la vuelta quedando mi espalda muy pegada a su torso- ¡IDIOTA! -me gire y grite, luego me separe de el y fui a por otra copa-.

-¿A dónde vas? -preguntó mientras me seguía-.

-No te interesa.

Ya estaba cerca de la barra cuando alguien me coge y me mete en una habitación. Justo el idiota tenía que ser. Lo mire mal e intente salir pero el tapaba la puerta y no me dejaba salir.

-¡Idiota dejame salir!

-¿Por qué? Aquí estamos bien.

-¡JA! Ni en tus mejores sueños me quedaria aquí, vamos ni de broma -intenté de nuevo salir, pero no había manera- !dejame salir!

-No quiero -rió- eres tan enana que no puedes ni abrir una puerta -volvió a reir-.

-No es mi culpa que tu seas un gordo -dije alterada- Jamas le había cogido tanto odio a alguien en tan poco tiempo.

-¡Bien! Soy un récord -suspiré rodando los ojos- Esta bien dejaré que salgas, pero solo si me das un beso.

-Puaggg ni de coña -hice el gesto de potar- no pienso hacerlo.

-Venga si lo estas deseando -se hacercó a mi y yo retrocedí hasta chocar con la pared- sabes que te encanto -me acorralo contra ma pared- Venga, ¡bésame!

-Que se mejore tu palomita -me miro extrañado, aproveche esa situación para darle una patada en sus... Y salir corriendo- Pon hielo es lo mejor -dije y le guiñé el ojos antes de salir pitando por la puerta-.

Por el camino me encontré a Pay, la cogí del brazo sin importar con quien estuviata hablando y salimos de allí rápidamente. No fue hasta que entramos en casa cuando Patrón me preguntó:

-Bien cuéntame -dijo con naturalidad aunque sabia que estaba enfadada. Me conocida tan bien que sabia que en este momento necesitaba descargarlo todo-.

-Pues...

El chico de la ventana de al ladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora