Pay
-¿Qué pasa? -repito algo asustada-.
-La fiesta de Jenny se ha adelantado para mañana a las cinco y no tenemos nada -dice alterada-.
-¡¿Qué?!
-Prepárate que nos vamos -dice gritando desde el salón-.
-Voy.
Nos preparamos rápidamente y fuimos casi corriendo porque no nos daba tiempo a acabar. Cuando llegamos a la cafetería estaban tosos preparando los adornos y las mesas, nos dijeron que nosotras solo teníamos que hacer los pasteles, mil pastelitos de diferentes sabores,¡MIL! No me lo puedo creer no los acabaremos a tiempo.
Eran las seis de la tarde y no llevábamos ni 300 pastelitos echos, nos estábamos desesperando, los chicos terminaron de montar todo y se fueron mientras que nosotras teníamos por delante tandas y tandas de pastelitos de todos los sabores. De repente suenan unos golpes en la puerta, voy a abrirla y son los chicos.
-¡Chicos! -digo sorprendida- ¿Qué hacéis aquí?
-Nos hemos enterado de que tenéis mucho trabajo -empieza diciendo Ash-.
-Por eso hemos venido a ayudaros -termina Bruno-.
-¿Pay, quién esta en -Kai se queda sorprendida- la puerta?
-Hola, Kai -sonríen-.
-Eh esperad, ¿esa sonrisilla cómplice a que viene?
-Eh chicos -termina Ash por Pay-.
-Nada -dicen los dos a la vez. Bruno se va para una de las cocinas y Kai para la otra, aun medio sonriendo-.
-Ash y yo nos miramos- ¡vamos! -decimos a la vez y corremos detrás de ellos-.
En una parte de la cocina
-¡Kaila Santa María Hernández!
-...
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El chico de la ventana de al lado
Storie d'amoreKaila se ha mudado a una nueva cuidad junto cn su mejor amiga Payton. Ahora están en Boston. Una mañana se encontraran con el motivo de muchas peleas. Jamás pensaron que su alma gemela sería el chico de la ventana de al lado.