Tenemos mucho en común, pero no todo, nos queremos, sí que lo hacemos... Recuerdo uno que otro detalle desde que nos conocimos, todo tan confuso, tan lleno de emociones y de nuevas experiencias... Para mí.
Nos conocimos a finales de el año 2.012:
Andaba distraída en clase, y fui llamada junto con otros compañeros para participar en unas clases en las que nos iban a dar nota por asistir, y obvio, necesitaba notas, me iba pésimo en esa institución, así que acepté, sin saber para qué iba a madrugar cada sábado...
Para el primer sábado el "profesor" se presentó diciendo su nombre: Duvan Pemberthy. Un nombre muy normal con un apellido fácil de gozar, y sí que goce de ello. Él era joven, unos 23 años, creo, pero aun tenía esa chispa de joven que producía confianza así que no dude en reírme.
-¿Qué pasa?- Pregunta Duvan.
- Pemberthy....do!
- ¡Ay! ¿Enserio?
- Sí- y sonreí picara, como siempre.
- Está bien, comencemos.
No era una clase muy divertida, pero el molestar con mis compañeros me confortaba, y con el "profesor" también, aunque aveces sí aprendía, o mejor dicho, prestaba atención. ¿Mi parte favorita? La comida que llegaba a las 10:30. Oh sí, definitivamente era mi parte favorita.
Luego de unas tres clases Pemberthy llevó a un joven, ¿Su nombre? Julián. Se veía tan serio, tanto que evitaba contacto con él, ni le hablaba. Alto, mono, y ojos claros, pero no era muy bello, no lo veía para nada lindo y tampoco me caía muy bien, ni me esforzaba en caerle bien.
Y así continuaron las clases, ya era un poco más seria, pero no dejaba de ir, y seguía molestando con mis amigos, hasta hubo una ocasión en la que le robamos el sanduche a ese Julián. Me reí, y no me molesté ni en decirle quien se había quedado con el suyo, no era mi problema, ¿Para que lo deja con un montón de niños de 11, 12, 13 y en mi caso 15? No quería ni tenía tiempo de madurar, aun no, así que dejé todo así.
Al salir a vacaciones, me fui con otra perdida de año pero con ganas de ya salir adelante y un nuevo amigo en Facebook: Julián.
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Nosotros.
Krótkie Opowiadania¿Quién diría que de un juego puede llegar a ser algo tan grande? Con el sexo no se juega, leí por ahí... Y yo jugué con él, y hoy en día estoy enamorada.