Había una vez un padre que no entendía que sucedió, el chico de sus entrañas simplemente huyo.
Tal vez por mal agradecido, pero sus canas le nombraban lo acontecido.
El sabía que era su culpa el hacer rebelde al niño desde su cuna.
Encaprichado por su dolor, no dejando cerrar la herida de su corazón.
Tal vez tardo en reaccionar, pero obtener cariño de su niño no era un plan que iba a fallar.
-Humanostercos como ellos solos, encerrándose como repollos.-
ESTÁS LEYENDO
El costurero
Cerita PendekLos humanos son tan hermosos, como tan desatrozos... pero siguen llenandome de gozo.