*Narra ___*
-Tu eres el que quería atención - dije tratando de separarme de el, pero no podía su cuerpo contra el mio, no dejaba mas espacio por donde escapar - Y aquí la tienes - señale mi muñeca con mi vista- Aquí tienes tus 'te amo', hay quedaras... en mi piel, como el peor error que he cometido.
Y así era, era el peor error, el que siempre odiare, cueste lo que cueste.
-Cariño, en la cama no decías lo mismo- una sonrisa de esas que te dicen 'nada bueno me traigo en mente' me dedico.
-Si, esta bien, lo reconozco, eres bueno... en lo único- dije firme.
-¿Que te parece si lo repetimos?- no sabia si el estaba jugando de nuevo, o se había arrepentido de lo que tuvimos. ¿Mis oídos estaban escuchando bien?. Estoy consciente de lo que voy hacer.
-¡¿Que te parece mover tus manitos lejos de mi cara y retirarte por donde viniste?!
Otra vez una de esas sonrisas que no tienen fin apareció en su rostro. Trataba, y traba de salir de su agarre, acercando mis manos hasta su pecho y empujándolo fuera de mi, era estúpido, no podía sacármelo de encima.
-Ya vete- grite, fuerte, por que una mueca de desagrado apareció en su rostro.
No quería hacer esto, lo quería para mi, ¿pero como hacerlo? ¿como rebajarme al nivel de que me destruya nuevamente?
-No, hasta que me des lo que quiero bonita- acerco aun mas su cuerpo al mio, haciendo que mis manos fueran el único obstáculo para que su pecho tocara el mio. El no se iba a ir sin tener lo que quería, así empezó lo nuestro.
-Solo vete, ¿si? aquí ya no tienes nada que hacer, conseguiste lo que querías, dejame sola- el tono frió de mi voz había aparecido por primera vez frente a Zayn.
-No bonita, te dije lo que quiero- y así empezó todo, el sabia como jugar conmigo. Primero esos besos por mi cuello, y ahí mi auto control desapareció de la faz de la tierra. Y es aquí cuando mi mente empezaba a reaccionar, pero mis labios no podían hablar.
Estaba perdida, terminaría en la cama con la misma persona que me prometió amor eterno y al mismo tiempo me rompió el corazón. No sabría como describir sus besos, pero una cosa estaba mas que clara, me besaba y yo me perdía en el. El era mi talón de Aquiles, mi debilidad mas grande, aunque lo quiera negar a los cuatro vientos de que el no es nada para mi, lo haría, pero no podría convencerme a mi misma de que eso es real. No caería de nuevo con la misma piedra, no otra vez.
-Zayn, basta - trate de decir entre el beso, pero no respondió- Basta - y de nuevo mis palabras se las llevaba el viento como si no me escuchara. Pero el destino me decía que esos mismos labios se alejarían luego de morderlos, y eso hice- Te dije que basta!- con tan solo unos pequeños centímetros de distancia de cuerpo a cuerpo, logre salir.
-Eres una perra, y de las peores- sus palabras me llegaban y bastante, aunque quisiera bloquearlas no podía.
-Si, lo soy - conteste, ¿psicologia inversa? o realmente eso sentía de mi misma.
*Narrador Omnisciente*
No, no era una perra, por que ella no sabia las intenciones que en ese momento tenia Zayn. Ella estaba en la punta contraria del sofá a la que estaba el moreno de un cuerpo de los mil dioses, según ___.
Ella estaba consciente que Zayn no es iría así como así de ese lugar, había dicho y pensado que se la llevaría a la cama, y eso haría. En su mente se debatía si dejarla en paz o jugar un poco mas con ella. Si, no tenia cargo de consciencia, pero las cosas se pueden complicar.
Los dos cara a cara, uno con la mirada fría de siempre, pero no dudaría mucho, se le había olvidado lo que ____ había echo por el, y se sentía culpable, por que lo era, pero el se lo ocultaba a si mismo. Miraba su venda repetidas veces, los ojos de aquella muchacha que desde un principio le robo la mirada, la que le había complicado las cosas, esa, la misma que se hizo daño a ella misma estaba parada a pocos metros lejos de el, no podía aguantar la tentación de tocar esas vendas y acariciarlas como lo había echo con alguien alguna vez. Ella estaba mas que consciente lo que Zayn miraba.
-Ahora me doy cuenta de que no tienes corazón, de que eres frió al igual que por dentro, si, eres el culpable de esto, y ¿sabes otra cosa? - lo miro esperando un disparate de estupideces de su parte, pero en los primeros segundos no respondió- el karma existe, para mi, y se que pagaras.
-Yo no pago nada- dijo con la voz apagada, esa voz que lo hacia sentirse débil, por que lo estaba.
-No se como no me dí cuenta antes del cerdo a quien me estaba acercando, ¿lo puedes creer? ¡Me acosté con un cerdo sucio y frió como Zayn Malik!
Sangre correría, y la muerte abundaría.