26.Capitulo: La recaida

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BEA:

Parecían majas, aunque un poco locas, pero bueno, ¿quien no esta un poco loco? jaja

Mientras los chicos se hacían fotos, nosotras nos vimos obligadas a esperar tras las cámaras, no nos dejaban ni acercarnos a los modelos:

-Oye, que son nuestros novios -se quejo Charo.

-Ya, pero ahora están trabajando chicas -nos dijo Magi.

Era cierto, nos volvían locas, pero ante momentos como ese debíamos ser serias, ya nos lanzaríamos a sus brazos cuando la sesión acabara jaja.

LOLI:

Nos aburríamos tanto esperando, que nos pusimos a jugar a las cartas en la sala de al lado.

Entonces oímos un ruido y fuimos de nuevo al estudio.

Todo el mundo se había juntado y no podíamos ver nada:

-Laura -oí a Blas llamándola y esta se giro.

-¿Que pasa? -ella.

Blas miro a Charo y se entristeció:

-¿Que le ha pasado a mi pastelito? -dedujo ella.

-¿Como sabes que se trata de el? -se sorprendió.

-Por la cara con la que me has mirado y no me cambies de tema -ella.

-Se ha desmallado 

-¿¿QUEEEE?? -todas alucinadas y avanzamos con ella al frente.

CHARO:

No lo dude, en cuanto me entere de lo sucedido comenze a dar empujones a todo dios para poder llegar al centro de la congregación.

Me choque con Carlos:

-Déjame pasar -le pedí.

-No -el- te vas a deprimir y no me da la gana de montar un numerito, ademas la ambulancia esta de camino.

-Mas numerito montare si no me dejas pasar -me cabree- asique tu veras.

Debía echar fuego por la boca, porque accedió con temor.

Cuando porfin me zafe de Carlos, le vi en el suelo, atendido por Alvaro y Dani que trataban incansablemente de que recuperara la consciencia.

LAURA:

Porfin tras muchos intentos, logramos pasar entre el equipo y vimos una escena no muy agradable. Nuestro querido pastelito se hallaba tendido en el suelo inconsciente y no parecía tener prisa por despertar.

Ajena a cuantos la miraban, Charo se arrodillo a su lado y le suplico que despertara, mientras los demás, en silencio, arropados por nuestros respectivos, enmudecíamos:

-Abra sufrido una recaída -me susurro Blas.

-si, es posible, aun sin estar del todo curado, fue a visitarla -le sonreí con tristeza y suspire- espero que no vuelva a quedarse en coma -casi llore.

-Yo también -el y me abrazo.


Cuantas vueltas da la vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora