XXI

30 5 0
                                    

No puedo arrepentirme ¿Verdad?, el pasado no está en mis manos.

Y el futuro no del todo.
Mierda.
Tobias, eres lo único que me queda, y comienzo a pensar que ya no eres real, que la fuiste, pero ahora debes estar reencarnado en un pingüino.

Mi compasión por mi es pésima, se nota en mi sentido del humor.

¿Puedo arruinarlo más?
Estoy pensando en dejar de escribir estas cartas, dejar se pensarte y correr a casa de Tate ahora mismo.

¡Dios Tobias apestas!
¿Puedo odiarte?
¿Puedo comenzar a odiarte?
¡Maldita sea!
¡Porque si no lo hago me odiare a mi!

Y es que no p

EdurneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora