CAPÍTULO 27 LA CARTA

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Narra Valentina:

Jay vuelve luego de unos pocos minutos con algo más presentable ante visitas... Aunque, tiene lindo abdomen.

Le cuento a Andrea todos los detalles de mi visita y bueno, sobre todo la razón de por qué vendré a vivir con ella.

Fue un poco difícil contarle la fuerte discusión de mis padres junto con su separación.

No sabía que las cosas estaban tan mal como para que hubiera un divorcio.

Creí que se amaban.

-Es que... -suspiro. - Ellos se veían felices, nosotros éramos felices. -siento aquel conocido picazón en mis ojos y la nariz ligeramente caliente en la punta.

-Oye, Valentina, sé que es difícil, pero piensa que quizá es mejor verlos separados y felices a verlos juntos e infelices. -me abraza.

Jay escucha y nos mira atentamente sin decir nada, me gustaría saber en qué piensa.

Luego de separarme del abrazo de Andrea, Jay me mira fijamente, sonríe y extiende sus brazos para abrazarme.

No lo pienso dos veces y me lanzo a abrazarlo.

Me abraza fuerte y da un corto beso en mi frente, después de varios segundos me separo de él y le sonrío como agradecimiento.

-Pues, yo no tengo nada más que decir que... ¡bienvenida a Toronto! -Andrea levanta sus brazos en señal de victoria y me abraza por los hombros. -Que suerte que ya no estaré tan sola, tendríamos tanto que hacer juntas...

-Y yo me alegro de que Andrea ya no esté sola, porque ese chico de ayer no me ha dejado muy tranquilo. -Jay se cruza de brazos y frunce el ceño.

Andrea rueda los ojos y le lanza un beso en el aire.

-Bien, supongo que iré a escoger una habitación...- digo y tomo mi maleta de mano para llevarla adentro.

-No escojas una tan alejada de la mía, por favor. -ella me responde.

Entro a la primera habitación que veo, pareciéndome enorme, está casi al frente de la habitación de Andrea, por lo que creo que es perfecta.

Es enorme ésta habitación...

Dejo la maleta de mano encima de la cama y recuerdo la carta que ese tal... Steven me dio hace un rato.

No debería, no debería, pero es que ese chico no me da buena espina, no debería... Pero la curiosidad de leer lo que dice la dichosa carta de "administración", me gana.

La abro lentamente dándome cuenta que es una carta escrita a mano.

"Hola, Andre :)

Debido al inconveniente de ayer con tu novio quería pedirte disculpas si tal vez te causé problemas.

Pero si estás leyendo esto y él está cerca, es mejor que pares de leer o que te alejes unos cinco minutos.

La verdad es que me pareces un chica muy simpática, y puede que ésta propuesta te incomode un poco.

Pero me gustaría salir contigo.

Y antes de que lo malinterpretes, no te preocupes, solo quiero ser amable sabiendo que eres nueva aquí y será una salida de amigos, igual a la de hace unos días, que por cierto, me divertí mucho ese día.

Recuerda que aún tengo que llevarte a conocer la zona de comercio y si aceptas mi invitación de llevarte a cine.

Nos vemos en el lago mañana a las cinco en punto, si no puedes ir, llámame, de lo contrario, asumiré que aceptaste mi invitación.

Famosa *PAUSADA*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora