¿Puede ser amor?(CLATO)

18-Ellos.

POV Cato.

Escuché unos ruidos que venían de mi habitación.

Conforme iba subiendo esos ruidos se convertían en una conocida canción,Shatterd.

Me sonaba mucho.

Ya se,es el tono de Clovie.

¿Entonces Clove está arriba?

Aceleré mi paso para llegar antes a la segunda planta.

Como esa enana esté arriba...

¿Qué pasa?

¿No se fía de mi?

Es obvio,le hemos mentido,pero ha sido por algo que se merecía aquella chiquitísima mentira.

Abrí la puerta de mi habitación de un portazo,haciéndola resonar por toda la casa.

Pero no vi a Clove.

Simplemente a su móvil sonar encima de mi cama.

Y yo que había sido tan desconfiado...

Se lo habría dejado.

Pero esta mañana lo llevaba ella.

No,tal vez me lo quedara yo en alguna clase y se me olvidara devolvérselo.

Bajé de nuevo las escaleras corriendo.

-Era el móvil de Clovie encima de mi casa.-anuncie por toda la habitación.

POV Clove.

Escuchaba las pisadas subir cada vez más rápido hasta aquí.

Si me iba,sabría que había estado allí porque había escuchado mi móvil, si me quedaba allí...

No tenía tiempo de pensar,estaba ya en la segunda planta.

La habitación de Cato estaba al final del pasillo.

Aún tenía unos tres segundos para reaccionar.

O sí,tres segundos son muchísimo...

Ya estaba allí vi que el pomo se movía...

Tiré mi móvil que sorprendentemente cayó encima de la cama.

Salté por la ventana.

Noté que al caer en mi cabeza se escuchó un fuerte estruendo,me había dado un buen golpe.

Escuché un portazo y supe que Cato había llegado.

No me podía levantar del suelo.

Hacía frío,caí encima de un charco de barro.

Buena puntería Clovie.

Logré levantarme y salí corriendo.

La culpabilidad me estaba comiendo.

Sabía que Cato no me había visto,pero aún así tenía la sensación de que desconfiaba de mi.

Sigo sin saber qué hacían allí todos,y porque se comportaban tan raro estos dos últimos días,pero tampoco me importa,ahora lo único que quiero hacer es llegar a mi casa.

Seguía corriendo,y para colmo empezó a llover.

Por fin llegue a mi casa.

«Oh no,esto no me puede estar pasando a mi,dime que no es verdad»