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–¿Q... qué? – tartamudeó Hoseok, moviendo su cabeza hacia atrás ligeramente sorprendido ante la inesperada confesión de Taehyung. – ¿Qué acabas de decir? –

– Te quiero. – murmuró adormilado. Estaba de cara a Hoseok con sus ojos aún cerrados, con la voz suave y ronca por el sueño.

– ¿Lo haces? – preguntó con un tono bajo y tímido.

Taehyung asintió con la cabeza en afirmación antes de cambiar su posición en la cama ligeramente para acurrucarse más en Hoseok. Levantó su mano derecha que aún estaba posicionada en el costado derecho de Hoseok, y lo puso completamente sobre su torso, con sus dedos rozando ligeramente la espalda de su novio.

– ¿De verdad? – preguntó aún en shock, desconfiado de sus oídos.

Taehyung asintió de nuevo con la cabeza y puso a Hoseok más cerca, con sus caderas tocándose. Hoseok sonrió al obvio agotamiento en la cara de Taehyung, dándose cuenta de que su novio ahora estaba apenas despierto, todo su cuerpo anhelando evidentemente dormir, con sus ojos aun cerrados. Hoseok suspiró al verlo, desesperado por hablar con Taehyung en condiciones sobre la declaración. se giró sobre su espalda, poniendo el brazo derecho debajo del hombro de Taehyung. Hoseok dio la vuelta a Taehyung hacia su lado para que así su cara estuviera descansando tranquilamente sobre su hombro y besó suavemente lo alto de su cabeza. Hoseok sintió a Taehyung respirar fuertemente como si estuviera deshaciéndose de cualquier fuerte estrés y preocupación de su cuerpo.

Hoseok sonrió para sí mismo mientras observaba a Taehyung, la versión perdida de él, la escondida en las sombras de la noche y en la soledad de los confines de su habitación desde el accidente. Aquí, ahora, mientras dormía, Hoseok podía ver a al Taehyung real, el chico que había sido antes de que las pesadillas corrompieran cada sueño. Tumbado en sus brazos ahora estaba el Taehyung que aún sabía que existía, seguro de sí mismo y confiado en su sueño, con sus problemas olvidados. Cuando era afortunado con la oportunidad de dormir placenteramente, cuando sus sueños eran buenos y sus preocupaciones descansaban, Taehyung era como cualquier chico de su edad. Hoseok sabía que era lo que Taehyung quería más que nada, sentirse normal y corriente. Cuando el resto de sus compañeros estaban intentando fuertemente sobresalir, ser extraordinarios y únicos, Taehyung tan sólo quería encajar.

Hoseok sintió una lágrima bajar por su mejillas con los pensamientos de las luchas de Taehyung, preguntándose porqué alguien que él encontraba tan excepcional podría desear algo menos que eso. Hoseok sabía que Taehyung era especial, lo había sentido en el momento en el que se conocieron, ero, en aquel breve encuentro nunca se había dado cuenta en lo extraordinario que se iba a convertir su novio, en lo realmente especial que era, tan genial. Observar a Taehyung ahora mientras dormía después de haber escuchado finalmente las tres palabras de su boca que tan desesperadamente había querido escuchar, Hoseok intentó recordar otra ocasión donde se hubiera sentido tan feliz. Cualquier otra recuerdo que él intensase traer de vuelta sostenía a Taehyung firmemente e u corazón y se dio cuenta de que las palabras del profesor Ling eran ciertas. Taehyung puede que dependa del apoyo de Hoseok pero, Hoseok estaba igual, sino incluso más, dependiente y enamorado de él. Taehyung sostenía la llave de la felicidad de Hoseok, era el único responsable de salvaguardar el corazón de Hoseok y viviría y moriría con él.

–Yo también te quiero. – dijo Hoseok felizmente.

Hoseok besó a Taehyung en la frente otra vez, con otra lágrima escapándose de sus ojos mientras miraba a su novio, con una expresión contenida en su rostro.

Taehyung se movió ligeramente contra Hoseok, el tacto de sus labios despertándolo un poco. Taehyung se movió un poco y acarició su cara contra el cuello de Hoseok, besándolo suavemente con sus labios, semiconsciente, aun luchando la inevitable demanda de sueño. Siempre peleando pensó Hoseok.

[ VHope ] Sin QuererDonde viven las historias. Descúbrelo ahora