Capítulo 2: "¿Cómo te llamas?"

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-¿Está bien, señorita?-repitió.

-Eh, sí. Venía a tomar su orden-respondí con la voz temblorosa.

Por dios, era Romeo Santos, pero estando en mi lugar de trabajo no podía saltar y gritar de la emoción, pedirle autógrafos, fotos y de más. Él le pregunto a su acompañante que quería comer, la observe unos segundos. Morocha, ojos color verdes, llevaba un mini vestido que dejaba la mitad de su trasero al descubierto, zapatos de más de veinte centímetros <<Por dios, ¡Es petiza!>>. Volví mi vista a él, tenía un saco gris claro con oscuro, Jeans oscuros, camiseta color gris clarito y zapatillas a juego con todo.

-Para la señorita-dijo-, ensalada de tomate y lechuga, y ¿canelones vegetarianos?-dijo lo último en pregunta-. Para mí lasagna.

Asentí y apunte lo que me dijo en la libreta que llevaba en las manos. Me devolvieron las cartillas y me dirigí hacia mi jefe, le di la hoja donde apunte el pedido y este sonriendo, murmuro:

-Bastante bien, ¿te gusto pedir la orden de tu ídolo?

-Bastante nerviosa ¿No cree?

Reímos. Javier me conoce desde que tengo doce años, es amigo de mi mamá, un hombre muy amable.

Mire el reloj, marcaba las nueve y media, estaba por agarrar mis cosas para irme, pero, mi jefe me volvió a llamar para darle la cuenta a Romeo. Agarre lo que me entregaba, me acerque a la mesa, este ya estaba preparándose para irse, le entregue la cuenta, me pago y dio propina. Pero, antes de irme me llamo.

-¿Cómo te llamas?-me pregunto.

<< ¡Dios! ¿Le digo o no le digo?>>, lo pensé y decidí contestar.

-Victoria Connor.

-Un placer- dijo estrechándome la mano, al sentir su mano un cosquilleo eléctrico me recorrió haciendo que se me erizara la piel. Miro hacia Javier y exclamo-: ¡Muy buen personal, Javi!

<< ¿Qué? ¿Javi ya lo conocía?>>, lo mire y este me guiño un ojo. Sonreí y me dirigí a buscar mis cosas, las agarre y fui detrás de Javi.

-¿Con que sabias y no me lo habías dicho?

-Era sorpresa-contesto riendo.

-Mmm... bueno me voy, mañana no, el lunes nos vemos-reímos-. Good bye.

Salí del restaurante, estaba mirando el celular, llegue para cruzar por el semáforo. Guarde el celular, mire hacia todos lados, el semáforo se cambió a rojo. Camine tranquila y de un momento a otro escuche un chillido...


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