Capítulo 8

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Las cosas se están poniendo cada vez más interesantes...

Multimedia: Drakkar (Demonio con la habilidad de convertirse en humano).

NARRA ONYX.

-¿Dónde las dejaremos?- Preguntó Vladimir ingresando a la cabaña con Danielle sobre su hombro.

-En el sótano hay dos sillas, amárrenlas allí.

Ambos asintieron, y bajaron las escaleras que daban al sótano.

A los minutos bajé yo también. Al llegar, me encontré con ambas chicas atadas a las sillas, todavía inconscientes.

-¿Cuánto tardarán en despertar?- Preguntó Kan verificando cada nudo que había hecho.

-No lo sé, quizás hora u hora y media.

Asintió y subió a la otra planta.

-¿Lograste sacarles información durante tu "estadía" allí?- Vladimir se sentó sobre la mesa que había en una esquina.

Negué con la cabeza acercándome a él.

-Fue muy difícil. Skylar tiene un excelente sentido de deducción; cada cosa que decía yo, ella lo interpretaba y sacaba mucha información de eso.

-¿Información? ¿Qué información?- Percibí la alteración en su voz.

-Nada comprometedor, estate seguro. Cosas personales, pero insignificantes.

Asintió poco convencido.

-Está bien. Entonces es alguien peligroso, ¿No lo crees?

-No sé si esa sea la palabra adecuada. Hay que tener cuidado con lo que decimos, sí; pero de ahí, a que sea peligrosa, es muy diferente.

-Entonces, ¿Trataras de sacarles información?

-En efecto.

-¿Qué te interesa saber?

-Todo. Sé que es muy cercana a Gabriel, por eso la capture.

-¿Qué tienes planeado?- Preguntó entrecerrando los ojos.

-Quiero entrar en su mente; modificarla y manipularla, para luego usarla contra el arcángel. Sé que no sospechara de ella, le tiene mucho cariño para hacerlo.

Abrió los ojos sorprendido y soltó una carcajada.

-Hay veces, amigo mío, que me das miedo con tus propósitos. Eres macabro como nadie más, creo que Drakkar ha hecho un excelente trabajo con tu entrenamiento.

Lo fulmine con la mirada. Él más que nadie sabe cuánto odie los entrenamientos de mi "padre".

************************Flashback*****************************

-¡Dale! ¡Con más fuerza! ¿O es acaso qué ya te has rendido?- Preguntó burlón mientras atajaba el saco de boxeo.

-¡Llevo más de 10 horas haciendo esto! ¿Al menos puedo descansar aunque sea 5 minutos?- Pregunté frustrado. Él arrugo el entrecejo.

-¡No! Escúchame bien Draven- Se acercó más a mí- Cuando estés en una verdadera guerra entenderás que tu oponente no tendrá compasión por ti, ¡Deja de mostrar debilidad y golpea!.

Suspiré, conté hasta 10 y comencé nuevamente a golpear el viejo saco.

Un golpe...

Dos golpes...

Tres golpes...

Golpes iban y venían. Dejando, a causa de mi frustración, marcas de uñas en el.

-Está bien, detente- Mi "padre" se alejó un poco y fue a buscar la botella de agua que se encontraba sobre una mesa- 10 minutos de descanso, luego entrenaras con la espada.

Asentí y me senté en el piso a descansar e hidratarme.

***********************Fin Flashback***********************

Así era todos los días. Entrenamiento, entrenamiento, y más entrenamiento.

Estaba tan metido en mis pensamientos que no me di cuenta cuando Vladimir se había ido, ni que Skylar ya estaba despierta.

-Hasta que por fin reaccionas, ya pensé que tendría que llamar a esos matones tuyos- Reí ante la forma que llamo a los muchachos.

******************************************************************

NARRA SKYLAR.

Abrí lentamente los ojos y, después de acostumbrarme a la luz, pude apreciar donde estaba y quien se encontraba también.

Draven estaba junto a una mesa, de espaldas a nosotras, completamente metido en sus pensamientos. A los pocos segundos reacciono con un movimiento de cabeza y observó a su alrededor, hasta que reparó en nosotras, y vio que ya había despertado.

-Hasta que por fin reaccionas, ya pensé que tendría que llamar a esos matones tuyos- Dije burlonamente. Pude ver que lanzó una pequeña risita, la cual trato de disimular.

-¿Hace cuánto estás despierta?

-Lo suficiente para ver que estaban completamente metido en tus pensamientos, pero dime, ¿Qué era eso tan importante que te tenía totalmente lejano al mundo?- Frunció el cejo.

-No tengo porque decírtelo.

Rodé los ojos.

-Entonces dime ahora, ¿Qué mierda hacemos aquí?- Sonrió al escuchar mi molestia.

-Eso tampoco te lo puedo decir, ¿O acaso ustedes me dijeron por qué me capturaron? No.

Bufe molesta.

-Entonces puedes ponerte cómodo, porque de mí no saldrá ni una palabra, y menos de Danielle

Soltó una risa macabra que me helo la sangre.

-Eso piensas tú querida.

-¿Qué insinúas?- Pregunté entrecerrando los ojos.

-Que tengo mis métodos para hacerles hablar. Ya sea por las buenas, o por las malas.

Suspire. Esto se pondría interesante...

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