¡ Yo soy asi !

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Me dolió
                            Me enamoré
                                                            Pero no supe tratarlo bien
                                                                                                             Y se fué
Destrozándome.

Aquel dolor en lo mas fondo de mi pecho aumentaba por días.

Puso su casa en venta y se marcho de la ciudad. No volví a verlo. El estaba mejor sin mi. Pero yo no era nada sin el. Era era la parte de mi corazón que me faltaba para ser plenamente feliz. Pero lo fastidie. Le deje ir.
Poco después acababe el colegio y no volví a ver a mis amigas, ni compañeros.
A mis padres les gustaba viajar. Bastante. Y se volvieron a ir.
En la ausencia del mundo, no comía, no dormía. No realizaba lo básico para vivir.
Me di cuenta de que si que existen los príncipes azules. En nuestra imaginación. Pero que en verdad nunca se encuentra al amor que uno sueña. Siempre acabas conformándote con una parte de ese amor.

Al ver que jamás encontraría a ese príncipe azul que se esconde de mi, llegue a la conclusión de que jamás realizaría el sueño de mi vida. Jamás le tendría. Entonces por que nacer ? Si no tienes una meta clara.

Decidí ir al único sitio donde poder acabar con este dolor.
Un lugar que me encantaba por sus vistas y la relajación que transmitía.
Un lugar que odiaba por su desafío al peligro y a la muerte.

El mar

Desde aquel acantilado disfrutaba de la última apuesta de sol que vería. Era preciosa.
Pero no podía seguir así. Así que sí. Dije adiós al dolor, al sufrimiento que provocan las pérdidas y la soledad y le dije adiós al mundo. Sin despedida .

        
                                                           SALTÉ

Buscando a mi príncipe azulDonde viven las historias. Descúbrelo ahora