Nadie puede hacerte sentir inferior sin tu consentimiento.
- Eleanor Roosevelt
Días después...
POV Vila
Me desperté algo tarde me sentía algo mal así que tome una pastilla para el malestar y fui al salón del castillo, ya tenía semana y media en el castillo, siempre era lo mismo. Me despertaba, me alistaba iba a la secundaria y si no tenia clases salia con las chicas, pero odiaba quedarme sola en este lugar es como si me diera agorafobia o fobia a quedarme sin compañía sentía algo dentro de mi como si me costara respirar.
Con William las cosas estaban incomodas, era muy serio y si me veía al menos 1 metro cerca de él se iba como si tuviera pulgas o sarna. Estaba paseando por el jardín cuando siento que algo pesado me tira.
-Hola pequeño.- dije a un perro gigante irónico ¿no? es gigante y le digo pequeño.
-Disculpa es que es demasiado fuerte.- dijo una chica de unos 13 años.
-Tranquila ¿es tuyo?
-No, yo solo lo estoy paseando él es Oso y es de William.-explicó.- Principe cuantas veces te he dicho que no puedes saltar encima de las personas?.-Oso agacho la cabeza como si entendiera.- Vale, pero no lo vuelvas a hacer.- y le sobo la cabeza.
-¿Puedo tocarlo?
-Por supuesto, tranquila no hace daño.- y lo empece a sobar.
-Le agrada.
-Oh disculpa mi nombre es Vila, Vila Cian
-Un gusto soy Camila.
-Que lindo nombre.- dije.- ¿eres familia de William?
-Sí, aunque él es muy serio no le hagas caso es todo un caso. Si fue grosero en serio mil disculpas y si te hizo daño lo mataré. Oh lo siento lo he hecho de nuevo, soy un poco acelerada.
-Me he dado cuanta de ello - sonreí un poco - Tranquila no me ha hecho nada - pero luego susurré - excepto olvidarme.
-¿Qué dijiste? disculpa no te escuché - me preguntó Camila.
-Oh sólo decía que tengo que salir de compras con mi familia, mi familia puede ser agobiante si no las veo en mucho tiempo, me abordan con todo tipo de preguntas.
-Ya quisiera yo ser así con mi familia, mi padre nunca esta en casa y mamá se la pasa de compras y mis hermanos cuando pudieron librarse de ellos se fueron.- dijo con una mirada triste.
-Tengo una idea que tal si cada mañana o en las tardes vienes hablas conmigo o paseamos a Oso es que me gustaría compañía porque estar sola en este castillo no me gusta.
-Entiendo, entonces partir de mañana vendré a verte y ¿que tal si salimos a correr?.-
-Me encantaría, ¿Me podrías hacer un favor?- ella asintió.- acompáñame con mi hermana al salón de belleza mañana es que no acostumbro a esos lugares y me siento incomoda.
-Me encantaría voy a aprovechar para ponerme guapa.- sonrió
-Entonces hecho mañana nos vemos.
*.*.*.*.*.*.*.*.*A la mañana siguiente*.*.*.*.*.*.*.*
Me desperté temprano, me aliste y fui a la secundaria, pero como el profesor de física estaba explicando algo que ya sabía no le preste atención.
-Cuando presten atención podrán resolver cualquier ejercicio - Ushh creo que eso fue una indirecta para mí.
Sonó la campana y todos salieron como locos y yo fui al Departamento de Ballet y antes de entrar para buscar a mi hermana y a las chicas, apareció Deiving.
ESTÁS LEYENDO
La Heredera ©
Teen FictionVila se sentía fuera de lugar, fue a tantos lugares y nunca consiguió sentirse en paz, como una pieza que no encaja en el rompecabezas, como una incógnita que le buscas vuelta, pero no le consigues respuesta. Es frustrante como tu destino c...