POV Vila
Luego de salir de allí logré alcanzar a Chris y nos fuimos en su avión privado quedamos en que me dejaría en la casa de mi abuela Helena la mamá de mi papá en Alefkandra porque a pesar de que vive en Atenas sus hermanas viven en Alefkandra, Mykonos y allí es donde vamos, él si irá directo a Atenas.
-Angeleine - dijo Chris tomandome la mano
-¿Si?
-Me encanta llamarte como lo quiso hacer Angelene - Sonreí
-Te amo Chris
-Y yo a ti - me sonrió
- Ahora quiero saber algo - Me miró con una sonrisa forzada. Sabe muy bien que es lo que le voy a preguntar - ¿Desde cuándo Ky y tu...?
-Desde hace unos 6 meses
-¿Y no pensabas decirmelo? - lo golpeé en el hombro
-Deja la agresividad mujer - hizo un mueca de dolor pero obviamente no le dolió
-No quiero ser la última en enterarme de todo - hice un puchero
-No lo sabe ni mamá así que... - Se encogió de hombros
-¿Por qué no lo sabe? - Arqueé una ceja
-Ky y yo solo estamos juntos para que ella no pueda comprometerse
-¡¿Qué?!
-Sus padres la comprometieron y la única forma de anular el compromiso es que ella esté en una relación - Se paso una mano por la cara y chasqueó con la lengua - Maldigo el día en que acepte
-Pero... ¿Por qué aceptaste?
-Créeme ni yo lo sé -
No seguí preguntado pero se muy bien que Chris si sabe el porqué acepto y no se en que momento me lo dirá pero de que lo hará, lo hará.
-Cariño Helena te estará esperando en el puerto - Acarició mi mejilla y me sonrió - Cuídate, hablaré con Argus para terminar con esto lo más pronto posible.
-Gracias
-Hasta luego
*********************
-Nana - dije a mi abue
-Hola mi niña ¿Cómo has estado todo este tiempo?
-Bien pero no tanto - hice un puchero <<Si ya se mucho puchero, pero así me quieren>>
-¿Por qué Catalina? - Hice una mueca al escuchar mi segundo nombre y negué con mi cabeza. Por más que insista no dejaran de llamarme Catalina.
-No pude ver a la abuela más bella del mundo - la besé en la mejilla
-Oh Gracias me alagas mucho.
ESTÁS LEYENDO
La Heredera ©
Novela JuvenilVila se sentía fuera de lugar, fue a tantos lugares y nunca consiguió sentirse en paz, como una pieza que no encaja en el rompecabezas, como una incógnita que le buscas vuelta, pero no le consigues respuesta. Es frustrante como tu destino c...