"Facebook". [Hijack/Frostcup]

6

"¿Enamorado?"

La mañana era fresca, la casa estaba sola y el castaño irradiaba felicidad, por alguna razón desde aquel beso la sonrisa ya no se le borraba del rostro, sus labios ardían al recordar el suave tacto y sus pensamientos lo dejaban aturdido, esa juguetona sonrisa invadía sus pensamientos al igual que su penetrante mirada.

«¡¿Qué diablos está pasándome?» pensó mientras jalaba sus cabellos desesperado.

Caminó con pereza hacia el comedor encontrándose con una nota.

Hiccup, salí con tu padre a casa de tu tío Bocón, está algo enfermo y tu papá quería verlo, volvemos en tres días, te dejé dinero en el buró, espero y no te enfades, cuídate.
Te quiere, mamá.

El castaño miró la nota algo enfadado, el tío Bocón era (sin lugar a dudas) su tío preferido.

Caminó hacia el frigorífico y sacó un bote de helado y una cuchara para servirse un poco, hoy no tendría la primera hora, así que al terminar salió con calmas hacia el colegio, la brisa le daba en la cara con delicadeza y con dulzura.
Era un buen día.

Al llegar al plantel caminó hacia el salón donde se encontró con que Peter lo esperaba fuera de este.

—¿Porqué tan tarde Haddock? —preguntó el pelirrojo dándole golpecitos al suelo.

—Porque es viernes y el cuerpo lo sabe –explicó el ojiverde sonriendo.

Peter soltó una carcajada.

—Hoy es jueves, idiota —argumentó Peter apunto de caer al piso por la risa que tenía.

—¿Eh? ¡Es enserio!

Peter se golpeó la barriga y contestó.

—Si, hahaha ¿Qué te pasa? Tu no sueles ser tan despistado.

Hiccup no contestó.

—Oh, creo que ya sé lo que pasa...—dijo acercándose un poco (mucho) al castaño— ese brillo en tus ojos, tu inexplicable sonrisa y tu cara de idiota ¡Estas enamorado! Dime, quien es la o él afortunado.

El ojiverde lo miró perplejo.

—¡Nadie! ¡No estoy enamorado!

—A mi no me engañas, pero si insistes, te dejaré pensar que estas tan cuerdo como yo...

(...)

El castaño salió directo a la cafetería dispuesto a hablar con Jack no sabía porque pero sólo necesitaba mirarlo, que sus miradas se encontraran para descubrir que todo lo que había pasado era verídico y que el albino en verdad lo quería tanto como él comenzaba a quererlo.

Entró en la zona de alimentos seguido del pelirrojo que lo miraba juguetón y buscó al chico con la mirada, no tardo en encontrar los blancuzcos cabellos. Pero no era lo que esperaba, no exactamente, lo que miró logro derrumbarlo completamente.

Se estaba besando con otro sujeto.

Sintió algo dentro de él derrumbarse, era demasiado sentimiento para tan poca historia ¿Qué curioso, no?

El pelirrojo no tardó en darse cuenta de lo sucedido.

—¿Hiccup? —susurró el chico mirándolo— ¿Qué pasó? Estabas bie... ¡No llores! Sólo dime que te pasa.

El ojiverde salió corriendo hacia no-sé-donde seguido del pelirrojo, se sentía tan estúpido por haber caído en su juego, sólo lo besó para ilusionarlo y matar el sentimiento.

¡Vaya que había sido estúpido!