-Martha... Martha... - Las palabras del hombre con pelos color nieve salieron de su boca en forma de un susurro que luego se convirtió en un grito.
-¡Se desmayo mierda!- ¿Cuál era la necesidad de gritarle eso a su abuelo? No lo sabía, lo dijo siguiendo un impulso sin sentido ni justificación.
Caminó un poco más y se coloco en la banquina al lado del tractor contra el que habían impactado. Un hombre con uniforme de policía se le acercó.
-Preciso algunos datos- ella se lo quedo mirando unos segundos y él prosiguió- ¿nombre?
-Milagros Martínez- contestó con voz ronca.
-¿Con quienes estas viajando?-
-Mis abuelos y mi hermana-
-¿De donde vienen?-
-Montevideo-
-¿A donde se dirigían?-
-Rosario-
-¿Podes darme algún número de contacto tipo el de tu mamá o tu papá?-
-Si pero son números uruguayos-
-No importa ya veremos como nos comunicamos con ellos-
Después de darle los números vio como se le acercaba una mujer con unas cositas en las manos, no pudo ver bien que eran hasta que la tuvo en frente:
Era un rosario de plástico que tenía entrelazada una cinta con el "símbolo" del autismo (un rompecabezas pintado con los colores primarios), desde que tenía memoria eso estaba colgado del retrovisor del auto azul en honor a su hermana, más pequeña que ella pero más grande que la niñita que se encontraba todavía en el interior del vehículo. 12 era su edad, con una ondulada (muy ondulada) cabellera color azabache; igual a su madre.
Lo recibió y lo sostuvo en sus manos de la forma más delicada posible, como si fuera un alma frágil y débil que debía ser protegida y cuidada. De repente escuchó voces desde atrás del tractor y observó como traían entre 4 personas a una pequeñita con cara de ángel y cabellos tan largos como Rapunzel. Su ropa estaba llena de sangre y seguía teniendo esa expresión desorientada; pero ahora tenía también cierto dejo de cansancio. La recostaron en el pasto y su hermana se arrodilló junto a ella, una mujer vio el rosario que tenía en la mano.
-Reza, vos quédate tranquila, reza- y se alejó.
En ese momento se sintiórara. Hacía unos meses que se había declarado "atea" después de 13 años de ser"Cristiana de crianza", no era que no creyera en Dios, sino que desde su puntode vista los seres humanos eran como un granito de arena en un desierto, y elresto de los granos de arena eran todas las posibilidades de teorías de como surgióla luz, la oscuridad, la vida misma.
"¿Cómo pueden estar tan seguros de tener la respuesta correcta?", se preguntaba ella a veces.
Pero no me mal interpreten, ella si creía en que había algo mucho más grande que el mundo mismo, pero había decidido tener paciencia y esperar el momento en el que algo se revelara ante ella.
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Holiii
Bueno... solo les voy a pedir perdón por no actualizar muy seguido y todo eso, es que voy subiendo los capítulos mientras escribo y bueno mi cabeza queda tipo jkafsgiaulfjbcvafgiuleffgerf. Igual voy a tratar de actualizar por lo menos 1 vez por semana así ¡¡porfaaa perdón sino actualizo mucho!!
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Pesadilla, ¿con o sin fin?
Teen Fiction"El cielo era del azul más claro que ella había visto en su vida y la carretera por la que viajaban estaba completamente desierta. Hasta el día de hoy recuerda la canción y que parte de la misma estaba escuchando cuando todo lo que conocía se desvan...