Narra Dylan
En cuanto vi que Kath estaba bailando sobre la mesa supe que tenía que detener eso, ella estaba borracha, no podía no cuidarla si se encontraba en ese estado. Así que fui acercándome, abriéndome paso entre la multitud, y en el momento en que llegué junto a la mesa vi como Kath caía... y en un movimiento rápido la sostuve, y la llevé afuera para que tomase aire.
No sé ni cómo fue que sucedió, pero sus labios que esta noche estaban de un color carmesí se acercaron a los míos, finalmente llegando a fundirse en un beso. A pesar de que deseaba ese beso, tuve que detenerla, no podía aprovecharme de ella en ese estado.
-Así no, Kath -dije dulcemente luego de apartarla, mientras le acariciaba la mejilla-. Estás borracha.
Kath se quedó mirándome durante un rato, como si no hubiese entendido lo que dije, como si mis palabras careciesen de sentido alguno.
-¿Cuál es tu disfraz? -preguntó finalmente-
-¿Mi dis...? -suspiré, ella ni siquiera me había reconocido, tal vez probablemente ni recordase el beso al día siguiente- El de un luchador -respondí intentando mostrar mi mejor sonrisa-.
Kath me siguió mirando, pero de una manera ausente, luego dio un giro y empezó a vomitar al costado de su silla. Me levanté rápidamente y le saqué su sombrero y le sostuve el cabello para que no se lo manchara. «Oh, mi pequeña Kath, ¿qué haría contigo?»
-¡Hey, Thomas! -grité en cuanto vi a mi amigo, él volteó- ¿Me puedes traer una botella de agua?
-¿Tú quieres agua? -preguntó en un tono burlón, dio media vuelta y recogió algo que había en una mesa- ¡Ahí va! -avisó mientras arrojaba el agua, y yo la atrapé-
-¡Gracias, Tommy!Le hice tomar un poco de agua a Kath, me destrozaba tanto verla así...
-Tengo sueño, Luke -dijo mientras cerraba los ojos y rechazaba el agua-.
-No soy Luke, soy Dylan.
-Vamos a casa.
La levanté en mis brazos, ya que al intentar caminar se tambaleaba, y en cuestión de segundos se quedó dormida en mis brazos.Narra Kath
¡Oh, que dolor de cabeza! Entrecierro los ojos debido a la luz del sol que entraba por mi ventana, miro la hora... ¡2:30 p.m.! No era de esperar que mi padre me llamase a comer, probablemente ni siquiera vino a casa, pero, ¿y Luke?
Me levanto, me tambaleo un poco y vuelvo a caer sentada en la cama, me froto los ojos y me levanto otra vez. Voy hacia el baño, necesitaba una ducha y cepillarme los dientes, tenía un sabor horrible en la boca.Termino de bañarme y salgo con una toalla cubriendo mi cuerpo y otra en mi cabello.
Abro la puerta del baño y veo a alguien sentado en mi cama.
-¡Rayos, Dylan! -exclamo al mismo tiempo que vuelvo a entrar al baño y cierro la puerta de un portazo- ¿Qué haces aquí?
-Escuché que te levantaste y vine a ver que tal amaneciste, pero en cuanto llegué ya estabas bañándote, y no quise molestarte.
-Espera un momento afuera y lo hablamos mejor.
Sentí como se cerraba la puerta de mi habitación, así que salí. Tomé un short negro con tachas doradas y una remera blanca suelta con un estampado.
-Pasa -dije abriendo la puerta en cuanto me terminé de cambiar, Dylan entró y se sentó en mi cama-.
-Te dejé un vaso de agua y una pastilla -dijo apuntando a mi mesita de noche-, es para la resaca -sonrió burlonamente-.
-Oh, gracias -me dirigí hacia allí y tomé la pastilla junto con el agua-.
-¿Recuerdas algo de anoche?
Intenté recordar... Luke y yo llegando a la fiesta, lo vi a Dylan, me alejé de él, comencé a tomar...
-¡Maldición! -exclamo- ¿En serio he bailado sobre una mesa?
-Así es -afirma-, y te caíste.
-Y tú me sostuviste, ¿verdad?
-Sí, y te llevé afuera.
Intenté seguir recordando, pero esta era la parte que más borrosa tenía. Pero entonces...
-¡¿YO EN SERIO TE HE BESADO?! -exclamo eufórica-
-Humm -se pasa la mano por su cabello, incómodo-, s-sí.
Formo una "o" con mis labios casi sin poder creerlo, casi sin poder creer que anoche besé a Dylan O'Brien.
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•Sweet Agony•
Fiksi RemajaKatherin Aldith Mawson es una joven de 17 años que está en el anteúltimo año de preparatoria, esperando ansiosa por que su vida de un giro de 360°, pero para que esto ocurra tiene que realizar un cambio en ella y ya no seguir la misma rutina de cada...