Ayame Uchiha; La Fuerza Del Dolor 2 [Naruto]

Capítulo 12

Capítulo 12

--- ¡¿Qué?! ---Se exaltó Deidara al oír lo que había dicho la pequeña.

--- Sabes que no haré nada para impedirlo. --- Habló Pain, ocultando que Nagato se sentía un tanto angustiado ya que se iría aquella chiquilla que varias veces lo había alegrado.

--- ¡¿No harás nada?! ---Exclamó Deidara perdiendo la compostura, no debía dejar que se fuera, no ahora que tenía la suficiente confianza para decirle sus sentimientos.

--- Dirigete a líder-sama con respeto. --- Masculló Ayame entre dientes.

--- Pe-pero...-

--- Lo siento, Dei. Debo irme.

--- Apruebo tu desición, Ayame. ---Comentó Konan a lo que recibió una sonrisa de la pequeña.

--- Me iré en seguida.

--- Buena suerte. ---Deseó Pain.

Y a los segundos la visión holográfica de Ayame desapareció.

***

--- Muchas gracias, por todo. --- Murmuró Ayame frente al escritorio de Pain y junto a él, Konan.

--- Espero que consigas lo que estás buscando. --- Espetó Pain intentando ocultar las emociones que sentía en aquel momento.

--- Lo conseguiré, Nagato. ---Rió.

--- Vete, ya es hora. --- Konan sonrió y apuntó con su mirada la puerta del despacho.

--- Si. --- Suspiró y seguido asintió.

Aferró el bolso que yacía en su hombro izquierdo y salió de la oficina, encontrandose afuera a un Deidara furioso.

--- Dei... -

--- No me hables. --- Interrumpió y pasó de ella para entrar en la oficina del líder.

--- Lo siento. --- Susurró.

--- Aya-chan, ¿Recordará a Tobi? --- Apareció de la nada el enmascarado aniñado.

--- Y toda tú estupidez.

--- ¡Tobi es un buen chico! --- Y entró corriendo a la oficina, de seguro irían a dar los detalles de su misión.

Ayame comenzó a caminar por el largo pasillo que la separaba de las escaleras y de camino a ellas Zetsu apareció por la pared, causandole un susto que la hizo saltar en su lugar.

--- ¿No te irías sin despedirte, no? --- Habló el tonto Zetsu blanco. --- O te ibas a ir sin despedirte, mocosa. ---Ahora el negro.

--- Aloe vera bipolar, te extrañaré. ---Rió por el apodo que hace tiempo le había puesto.

--- ¿Aloe vera? --- Inquirió para si mismo.

--- Debo irme.

--- Suerte. --- Deseó y desapareció por la pared.

Suspiró sonoramente y se volteó para continuar con su andar hacía las escaleras, pero esta vez chocó con el sharingan de Itachi.

--- ¿Te vas?

--- Es el momento, ¿no?

--- Uno de mis cuervos te guiará para encontrar a Sasuke.-Murmuró y seguido hizo algo que lo sorprendio tanto a él como Ayame, la abrazó. --- Ten mucho cuidado.

--- Lo tendré, muchas gracias por todo Itachi, Shisui estaría orgulloso de nosotros. --- Susurró en su oído, causandole escalofrios al Uchiha mayor al oír el nombre de su mejor amigo.

Ayame rompió el abrazó y le regaló una calida sonrisa a Itachi para luego por fin bajar por las escaleras y llegar al primer piso.

Un cuervo llegó volando de la nada y se posó junto a ella, seguido de una mirada al gran edificio se dispusó a salir de la aldea de la lluvia.

--- ¡Ayame! ¡Espera!

La pequeña niña volteó y se encontró con un Deidara corriendo en su dirección mojado totalmente por la lluvia.

--- ¿Dei? ¿Qué sucede?

--- No podía dejar que te fueras sin antes darte esto. --- Ayame frunció el ceño al notar que Deidara no tenía nada que darle en sus manos. --- No sabes cuánto me cuesta esto, no quiero perderte.

--- No me perderás Dei... -

Deidara vió la oportunidad y tomó delicadamente el rostro de Ayame para darle un beso, el cual, inconscientemente la niña siguió.

--- Lo siento. --- El rubio se separó unos centímetros y besó la frente de Ayame. --- Al final, te encontraré.

--- Dei... -

--- Adiós, Ayame.

***

El cuervo guió a Ayame por medio día hasta que llegaron a unas montañas algo rocosas, el ave de color negro comenzó a disminuir su vuelo hasta posarse en el hombro de la pelinegra.

--- ¿Estamos cerca? ---Inquirió viendo al ave.

El cuervo abrió sus alas y con su pico apuntó más allá de unas grandes rocas que tapaban la vista hacía un acantilado no tan profundo.

Ayame de un salto subió a una de las rocas y de inmediato pudo sentir el chakra de Sasuke muy cerca.

Vió que por debajo del acantilado caminaba el Uchiha con otro chico, este tenía cabello blanco y llevaba la espada de Zabusa en su espalda.

--- Sasuke. --- Llamó Ayame, aguantandose las ganas de ir y abrazarlo como anhelaba tanto.

El nombrado dirigió su vista hacía donde había oído su nombre y se sorprendió al ver quien lo llamaba, pero además, lo cambiada que estaba.

--- Ayame.

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