Jurame que no es pecado [Rubelangel]

Epílogo

Cinco años después...

Estaba en mi casa empacando mis cosas, listo para mudarme con mi pareja. En uno de los cajones encontré la carta, esa vieja carta que dio un giro a mi vida. Me senté en la cama y la releí, jamás me había atrevido a volver a tocarla. Mis ojos se cristalizaron sólo con recordar aquel día. Rubius murió durante la operación por una hemorragia cerebral.Ese día mi cabeza hizo click, jamás había sentido el verdadero dolor en carne propia. Recuerdo haber llorado días y días, jurandome no volver a amar a alguien, hasta que una semana después recibí esta carta.
-Miguel, ya estás listo?.- mi abuela se asomó por la puerta de mi habitación y me vio con aquella carta, se sentó a mi lado y me abrazó mientras yo me hundía en un mar de lágrimas. Me aparte de ella y me dijo.- Uno jamás supera la muerte de alguien Miguel, sólo se aprende a vivir con ella. Tú lo amabas y siempre lo harás, pero ahora es momento de que mires al presente y veas el regalo precioso que está por llegar.- Se levantó y salió de la habitación dejandome en mis pensamientos, miré la carta y la guarde en la caja con la etiqueta de "no desechar".
Se estarán preguntando que fue de la vida de los demás y mia. Pues Alex y Eva están viviendo juntos hace unos meses, Guillermo y Samuel están viviendo en L.A y comenzaron en youtube hace cuatro años, Frank tiene novia pero no vive con ella. A veces pasamos la noche entera hablando por skype o jugando algún juego, no dejamos que la distancia mate a la amistad.
Y yo... bueno, vine a vivir con mi abuela en Andalucía cuando terminé la secundaria y comencé a estudiar fotografía. Un año después de vivir aquí conocí a mi actual pareja en una salida con el curso de fotografía. Actualmente trabajo de fotógrafo y estoy por mudarme a una nueva casa.
Entendí que la vida me dio sus golpes, pero después te recompensa. Si, Rubius fue mi primer amor y su partida fue dolorosa pero en algún momento tenía que dejarlo ir. Él será siempre un hermoso recuerdo que guardaré para siempre.
Aún recuerdo la primera noche que pasamos juntos como pareja. Estábamos en su cama cuando me dijo "Mangel, jurame que no es pecado".
Te veré del otro lado Rubius, y gracias por haber llegado a mi vida