Mientras los enormes monstruos (Que antes eran un par de títeres de manos) atacaban a Smoke con sus enormes garras, este saltaba de árbol en árbol para protegerse de sus ataques.
Sin embargo, cada que aterrizaba en una nueva rama el muñeco femenino se encargaba de morderla y arrancarla.
*Demonios, se me acaban los arboles*
Y por si fuera poco. Smoke no podía detenerse para mirar si moriría.
Por primera vez tenia que hacer las cosas sin consultarse a si mismo.
Smoke saltó a otro árbol y miró a los alrededores. La niña se había ido, por lo que la opción de atacar el problema desde el punto de origen ya no era una opción factible.
Ok, solo se necesita un poco de cerebro para pensar en una solución factible.
Smoke únicamente contaba con su agilidad, su cerebro y la mitad de su capacidad de respirar. (hablando de eso... Somke estaba a punto de desmayarse por el esfuerzo.
*Necesito... Tiempo*
Utilizando un poco de ingenio Smoke decidió hacer algo de lo que si fallaba moriría. Pero si lo lograba pondría salir ileso y ganar tiempo.
Smoke saltó hacia la cabeza del títere femenino y se deslizó por su cuello hasta quedar atorado en este.
Ok... Una vez atorado. El títere femenino comenzó a girar para quitárselo del cuello mientras Smoke se sostenía para no caerse e intentaba no vomitar.
Cuando se detuvo. Smoke abrió los ojos y la enorme garra del títere masculino se acercaba toda velocidad ¡Ahora era el momento de saltar!
Smoke saltó del cuello del títere femenino y aterrizó dolorosamente en el suelo.
El títere femenino abrió tanto la boca que se le desprendió por la mitad. Mientras el relleno se salía de su cuello y se desplomaba precipitadamente.
Smoke miraba la escena anonadado mientras recuperaba el aliento (ya era bastante difícil por el hecho de no tener pulmones.)
El títere se agacho sobre los restos de su compañera y puso sus garras encima de estos, después abrió la boca y del circulo metálico de su boca salio un hilo transparente con una aguja y reconstruyeron al títere femenino a un ritmo medianamente lento.
*Maldición. ¡Eso es trampa!*
Smoke llenó su tanque con todos los ángeles de sus bolsillos y se preparó para algo que no quería hacer, tomando un fuerte respiro, se quitó la mascara de oxigeno y apretó un botón en su tanque que hizo que el tanque pasara de ser un tanque de oxigeno a un lanza llamas . (Así de tóxicos eran los ángeles)
Smoke caminaba pesadamente y se dispuso a quemar los vestigios semi rotos del títere femenino antes de que fuese totalmente reparado.
El títere soltó lo que parecía ser un grito mientras se encendía en llamas.
Y el títere masculino soltó lo que parecía ser una lagrima de su ojo de botón y luego dirigió su mirada a Smoke (Quien se sentía culpable ver llorar al gigante bastardo) dio un par de pasos atrás mientras el miedo crecía cada vez más en su interior.
El gigante abrió la boca y del circulo metálico salio mas hilo que rápidamente tomó a Smoke de las piernas y lo tiró al suelo mientras más hilo le tomaba las muñecas y se las juntaba.
Poco a poco el cuerpo amordazado de Smoke se acercaba más a la boca del títere.
El miedo invadía los ojos de Smoke. Sin embargo no tenía el aire suficiente para gritar. Sabía que este era su fin sabía que ya nada podía pasar en el futuro. No había necesidad de ver su fin antes de vivirlo.
Las ataduras estaban tan apretadas que si movía sus muñecas tobillos le dolería mucho.
Cerró los ojos e intentó relajarse en su ultimo momento.
Sin embargo ese no era el futuro de un héroe.
Una llamarada de fuego subió por la espalda del títere masculino. Provocando que todo el títere se quemara. Sin embargo cuando el títere se desplomó hecho una enorme bola de fuego. El fuego se propago por el hilo transparente. Provocando que el fuego se acercara cada vez más a Smoke.
Cerró los ojos muy fuerte, esperando que el ardor llegara a su cuerpo... Pero no lo hizo...
El fuego simplemente dejó de avanzar a milímetros de las muñecas y tobillos de Smoke.
Entonces el fuego se transportó a otro lugar detrás del títere quemado.
Shin y Rin salieron por donde se había perdido el fuego. En la mano de Shin había una llama que apagó al cerrar la mano.
-¡Eh! Mira. ¡Allí está!- Dijo Rin señalándolo. -Entonces estas cosas si funcionan.- Shin y Rin miraron al montón de polvo blanco y brillante que vibraba en el suelo. Luego esta cosa se dirigió Smoke y estalló dejando un agudo y débil sonido y un montón de su polvo en todos lados.
Smoke sonrío de oreja a oreja al verlos y antes de que pudiera decir algo empezó a ahogarse.
-Ch...Chicos...- Shin y Rin sabían lo que pasaba y corrieron por el respirador/Lanza llamas.
-¿Que esto no era un respirador?- Rin lo observo con curiosidad... Pero no había tiempo para averiguar como devolverlo a su forma inofensiva. Así que apagó la flama con un soplido y llevo el tubo a la boca de Smoke para que diera un respiro (lo cual hizo.)
Cuando Smoke pudo respirar una vez más les dio la instrucción de como devolverlo a su forma natural y una vez hecho eso, lo desataron y lo salvaron.
-Y... ¿Cuanto nos va a cobrar la bruja de oro?- Smoke hablaba entrecortadamente y Shin y Rin lo llevaban apoyando un brazo en un hombro.
-Bueno... No queremos mentirte.- Dijo Shin. -Pero no sabemos.- completó Rin.
-¿Han encontrado a los demás?
-Eso tampoco lo sabemos.- Corearon los gemelos.
Smoke guardó silencio mientras los gemelos lo llevaban a algún otro lado.
Conociendo a Gold. Seguramente estaría llevando a Smoke directo a la mesa donde la reina podría comérselo con un poco de sal y pimienta.
Pero tenía el perecimiento de que no sería así esta vez. Después de todo los Caza recompensas no siempre eran unos malditos.
Smoke cerro los ojos y miró un poco más del futuro.
Kana estaba débil y no podía moverse. Lo único que podía hacer era mover los ojos y sentir que hiba a vomitar.
La piel de Kana era de un tono ligeramente verdoso (Esto debido al veneno de Arachne,) su cabeza dolía y daba tremendos esfuerzos para no dormirse, pues sabía que si dormía posiblemente ya no despertaría.
Las ultimas palabras que Arachne le dijo aún resonaban en los oídos de Kana como si tuviese eco. *No es mi deseo el matarte ahora, la carne blanda y envenenada siempre sabe mejor un tiempo después.* Después se había ido moviendo sus vulgarmente grandes caderas y mirando atrás diciendo *No mueras*
La muñeca de Kana se sentía como si fuese a explotar y respiraba de una manera cada vez más pesada.
Si iba a morir ese sería el momento perfecto. Prefería mil veces más morir por defensas bajas a morir siendo comida.
Kana empezó a dejarse llevar mientras la sonrisa de Souto, la voz de haru y los consejos de smoke sonaban en su cabeza como una despedida digna.
Ya estaba lista para decirle adiós a aquel mundo.
*Dejate llevar pequeña rata. Camina hacia la luz...*
Kana abrió los ojos y una bola de luz estalló en hermosas chispas blancas. Lo malo era que Smile apareció mirándola desde abajo hacia arriba.
Abrió la boca para decir algo, pero las palabras no salían de su boca *Maldito. Ni en casi muerte me deja de molestar*
-No digas más. Ya se lo que estás apunto de decir.- Smile juntó las manos y las puso en su mejilla, después se paro en un pie y floto un poco.
-Oh Smile. ¡Has venido a rescatarme! ¡Enserio aprecio que arriesgues tu vida para salvar a una pobre e insignificante rata!-Dijo imitando la voz de Kana (o mejor dicho "haciendo el intento de imitarla")
Kana frunció el ceño y su visión se nubló otro poco.
-No molestes.- Dijo en una voz tan débil que incluso le sorprendió que pudiese hablar.
Smile era tan horripilante que podía hacer que Kana luchara en la casi muerte para responderle algo.
-Que poca gratitud para la persona que vino a salvar tu miserable y pequeña vida. ¡Enana!-
Kana le escupió a la cara y Smile se limpió rápidamente.
-¡AHG! Pequeño monstruo voy a...- Smile cerro los puños y se enderezó dando un respiro.
-No. No vales la pena. Ahora... Gold nos pidió que los rescatáramos gracias a los corazones de pollo de Shin y Rin. Así que en cuanto te suelte procura agradecernos y no escupirnos.- Dicho esto. Smile abrió la mano y sus garras metálicas remplazaron sus dedos, luego corto unas cuantas partes de la telaraña y Kana calló precipitada al suelo con un estruendo y un grito ahogado.
-De nada.- Dijo Smile empujándola con el pie para que quedara boca arriba
Kana lo miró furiosa y una gota de sudor frío callo por el costado de su frente como una gota de roció cayendo por el pétalo de una flor.
-Baya, te ves peor de lo que te recordaba. Pero como me siento de maravilla te voy a dar un regalo.- Smile metió su mano en un morral que colgaba a su costado y sacó las mangas/espadas de Kana para después tirarlas encima de su cara.
