Esto es malo, muy malo. Decidí que no le diría nada a menos que hubiese esperanza de que le gustase... y ahora voy y le digo todo.
- Me gustas
-¡¿Qué?!- su cara de shock me lo dijo todo, fue la mayor estupidez de mi vida, lo arruine todo.
- que te quiero, siempre me has gustado- que tonto!, pude retractarme, hacer como que fue una broma y noooo, tenía que insistir. ¿Por qué? ¿Porque lo hice?
-¿gustar de "gustar"? ¿Cómo de "los mejores amigos"? -ahí esta! Otra oportunidad! Él quería salir por otro lado y solo insistí tontamente.
- gustar de "amar", quiero besarte, abrazarte y que estés solo para mí.-se quedó en shock. ¡¿Pero que me pasaba?! No era lo que quería decir. Si, era lo que sentía. La verdad más pura que conocía. Pero No lo que quería decir!!!!
-lo siento,-oh, no, me rechazara- nunca te había visto de esa forma... -claro! Ambos somos hombres, seguro siente asco de mi -somos amigos y no quiero que dejemos de serlo, lo aprecio mucho.-fue una gran herida. ¡¿Amigos?!
Intente recuperarme, al menos podía seguir viéndolo. No, no podía. No podría verlo como amigo después de esto, sin embargo...
-olvídalo, estaba jugando- reí, podía pretender que nada paso, que no lo recuerde ni lo tome en serio- no te lo habrás creído ¿o sí? Debiste ver tu expresión.
El resto del día fingí que nada había pasado, pero era difícil. Solo quería decirle que era cierto y exigirle... no, rogarle una oportunidad... no podría, él saldría huyendo, le causaría repulsión y no me volvería a hablar.
Llegando a la privacidad de mí recamara, me derrumbé. Me quede dormido en algún momento mientras lloraba desconsoladamente. Sería muy doloroso seguir cerca de él, tan cerca y tan lejos... tendría que alejarme un tiempo, un error y lo alejaría permanentemente... me odiaría... si no lo hace ya ¡que idiota!
Desperté por la mañana sin ganas de ir a la escuela o siquiera de levantarme... tendría que evitarlo cuando lo que más quiero es estar con él. No podía estar así, tenía que levantarme e ir, enfrentar las consecuencias de la estupidez que cometí.
Sabía que no podía verlo, si me acercaba no me controlaría y empeoraría todo, pero evitarlo fue más difícil de lo que pensé, a veces lo veía de lejos, anhelándolo, sufriendo. Veía su expresión de confusión cuando me iba deprisa, inventando patéticas excusas... lo peor fue el camino de regreso, siempre volvíamos juntos. Me invente algo de unas tareas y se fue antes, no pude concentrarme en lo que hacía, no paraba de darle vueltas a mi estúpido error. El camino se me hizo eterno, frio, solitario...
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Transcurrió así una semana y luego otra y otra. Aunque extrañaba mucho su compañía me acostumbre a verlo de lejos. Aparentaba estar bien solo para derrumbarme tras cerrar la puerta de mi habitación. Creo que podre acercarme pronto.
De camino a la escuela pensaba como volverme a acercarme a él. ¿Qué debería decir? ¿Debería actuar como si no hubiese pasado y volver a como era antes? ¿Debería disculparme por evadirlo, pretendiendo que las excusas eran ciertas?
-Oliver!- me sobresalte al escucharlo decir mi nombre, se acercaba corriendo para alcanzarme. ¡No puede ser! ¡Aun no estoy listo! ¡Esto es demasiado para mi corazón! - Hola -dijo simplemente, al llegar a mi lado- vallamos juntos, como antes- tenía una radiante sonrisa, como si nada hubiese pasado nunca y simplemente se alegrara de verme y estar conmigo.
¿Sabía lo irresistible que se veía con esa expresión? ¿Lo hace a propósito o es inconsciente?
-si, al fin volvemos a coincidir- sonreí queriendo aparentar normalidad, todo como antes- parece que por fin podremos pasar tiempo juntos de nuevo, se acabaron mis actividades, me tenían molido- normalidad, normalidad. Ya que él me había hablado debía aprovechar y terminar esta farsa... ojala se lo crea.
-qué bien!- se veía muy feliz.
Demasiado feliz ¿estaré imaginando cosas? Bueno, él dijo que apreciaba nuestra amistad y si así puedo poner tal sonrisa en su rostro no importa cuánto sufra ocultando esto, aguantare para no echar a perder su felicidad diciendo esas tonterías. Solo debo olvidarme de eso, si, enterrado! Puedo controlarlo...
-oli! Oliver!-me sorprendió, me había perdido por completo ¿Qué estaba pensando?...ah, lo olvide!- Oliver, no me estas prestando atención! ¿Pasa algo?
- ¿eh? No, nada. Solo estaba un poco distraído ¿Qué decías?
Me miro con cara de fingido enfado y puso la palma de su mano en mi frente. -tal vez te estas enfermando- quito su mano y pego su frente a la mía ¿Por qué esta tan cerca? ¿Por qué hacía eso? Mi corazón latía tan fuerte que temí que lo escuchara, oh no, ahora debía estar todo sonrojado!
Me aparte, nervioso -claro que no, David, estoy bien.
Entre divertido y desconcertado me miro y se volvió a acercar a mí, demasiado cerca.
-oh, bien- rio otra vez y reanudo el camino. Platicamos como antes lo hacíamos, estaba tan feliz de volver a estar así con el que me olvide de todo, no importaba nada mientras podamos ser así de cercanos. Nos despedimos, pues íbamos en clases diferentes.
Fui directo a mi asiento como en las nubes, no podía creer mi suerte. Camila me esperaba. Ella era la única que sabía lo que pasaba y me apoyaba, era mi mejor amiga (después de David era la persona más importante en mi vida) y compañera de clase, así nos conocimos.
-ya te vi- dijo con una pícara sonrisa- me alegra que se vuelvan a hablar y que te veas tan feliz pero... -bajo la voz- ¿son pareja?- parecía esperar un sí pero algo en mi expresión le conto la verdad, pareció enfadarse- ¿no es muy doloroso así?
- no para él, eso es lo que importa.- eso solo la enfado más.
-tú eres el importante, eso debes pensar.
- no me es posible, me importa más él, su felicidad y bienestar, siempre ha sido así... además esto es mejor que a que no nos hablemos.
-si tú lo dices... pero...
- no discutas- la interrumpí- soy bastante feliz con verlo y tenerlo cerca, eso es suficiente.
-no te lo creo, tal vez por ahora pero... se volverá horrible ¿Cuánto crees que podrás soportar? Siempre querrás más. Estar más cerca, más tiempo... besarlo, tenerlo, poseerlo... hacerle---
-No digas ya nada- la volví a interrumpir, tapándole la boca con las manos- no puedes hablar así aquí- me volví viendo en todas direcciones por si alguien prestaba atención a nuestra conversación pero nadie prestaba atención, la solté.
Suspiro- ¿y cuando le guste alguien? ¿Cuándo tenga a alguien más? ¿Qué harás, eh?
-yo lo amo, Cami, prefiero que sea feliz y seamos amigos que intentar algo y que me odie.
- ¿y nunca te imaginaste besarlo? Sé que sí, no me mientas ¿y hacerlo?
Baje la vista, sonrojado- no había pensado mucho en eso. Si en besarnos pero nunca pase de allí, no lo había pensado.
-¿Cómo puedes ser tan inocente? Qué lindo! Todos, escúchame bien TODOS se la pasan pensando solo en sexo, las tipas presumiendo ya haber perdido su virginidad, los hombres que con cuantas se han acostado... aunque casi todo son solo palabrerías
-la verdad- baje la voz y me acerque más- el que seamos dos hombres, que seamos amigos y el cómo reacciono ocupaban toda mi cabeza. No me lo había planteado... ni lo hare- agregue al ver su expresión.
- bueno, eres del tipo romántico. Pero eso no te ayudara mucho.
La maestra de lengua entro en ese momento, demandando silencio y la atención de todos.
-¿Qué vas a hacer?- pregunto Cami cuando timbraron para el descanso.
-almorzara conmigo-David estaba allí, no sé en qué momento llego pero estaba detrás de mi, con una bolsa en la mano- no tuve la ultima hora y aproveche para comprar comida para ambos, vendrás ¿verdad, Oli?
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Solo Otra Historia De Amor.
Romancelas historia de Amor de amigos de la infancia, nuevos conocidos y viejos amores olvidados.