-almorzará conmigo-David estaba allí, no sé en qué momento llegó pero estaba detrás de mí, con una bolsa en la mano- no tuve la ultima hora y aproveché para comprar comida para ambos, vendrás ¿verdad, Oli?
A Camila se le borró la sonrisa, lo acusaba mentalmente, como si supiera que me hace daño y lo hace a propósito, como si le divirtiera o que se yo. Interrumpí antes de que David lo notará.
-claro, vamos. Nos vemos luego, Cami.
-claro... - me miro con desaprobación de una madre, yo le sonreí para intentar tranquilizarla –no olvides lo que te dije.
- lo sé, lo sé. Lo que digas.
David me miro con lo que interprete como confusión, pero había algo más. Algo que no pude descifrar porque rápidamente compuso su expresión. Había comprado mi almuerzo favorito, comimos mientras platicamos cosas sin importancia, luego me acompaño de regreso a mi salón justo antes de que sonara el timbre. A la salida ya estaba allí de nuevo.
Eso se convirtió en una rutina, cada día lo sentía mas cerca como si el espacio personal no significara nada. A veces, en el camino de regreso, parábamos por el parque o dábamos vueltas platicando. No se si es mi imaginación pero cada vez camina mas cerca, he querido tomar su mano mientras caminamos, pero no podría hacer algo así... no otra vez, esta vez no lo echaría a perder.
Es viernes y no tengo excusa alguna para verlo mañana, no tengo mucho que hacer pues a los profes les dio por no dejar deberes... será un largo fin de semana...
-¿tienes algo que hacer mañana?-"de casualidad puedes leer mi mente" pensé.
- no, ¿porque?
-tengo un atarea de mate que no entiendo... y ya que tu lo sabes todo, pues ¿me ayudarías?
-en primer lugar, no lo se todo—
- pero casi- me interrumpió con una sonrisa ¿soy yo o sonreía mucho?- ¿y segundo?
-¿es muy complicado?
-para mi, si. Para usted señor genio, no lo creo.
- bien, veré que puedo hacer para meter información en tu cabeza- me burle, intentando escapar de mis propios pensamientos, ¿era una cita? Yo quería verlo así, pero no debía permitírmelo ¿Qué estaba mal conmigo?
- ¡¡que bien!! Después de eso te invito un helado
Me quede perplejo, ¿Qué clase de conversación es esta? Es como si fuéramos pareja, definitivamente no es una conversación de "amigos."
-¿Oliver?
-¿eh?¿que pasa?
- eso te iba yo a preguntar ¿Qué pasa? Estabas como perdido.
- no, nada.
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¿Qué rayos pasa aquí? No es solo mi imaginación, ¿verdad? O solo estoy exagerando todo, ilusionándome... seguro, solo son juegos de mi cabeza. No pasa nada fuera de lo normal, solo actuamos como amigos y yo busco desesperadamente ilusionarme, debo sacarlo de mi cabeza, olvidarlo, es solo que pienso demasiado y eso solo puede terminar en una cosa: Autodestrucción.
El teléfono irrumpió mis pensamientos.
-¿hola?
-hola Oliver, soy yo, Hugo.
-oh, Hugo, ¿Qué pasa?
-los chicos están organizando una reunión con chicas de otra escuela mañana, ¿te apuntas?
-lo siento, tengo planes. Será la próxima.
-¿seguro? Escuche que las chicas son muy lindas... bueno la próxima.- y colgó. El sujeto era un poco raro, pero mi amigo.
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Los problemas de los que David hablaba, con los que se complicó la vida hasta que llegue, eran simples derivaciones, de pronto ya no le eran tan difíciles...
-¡¿es así de fácil?!- exclamo sorprendido después de resolver el primero.
-sí, de hecho es muy simple una vez que lo entiendes... 6 simples pasos.
-bien, si es tan fácil, hazlos tú.
-sí, claro. Yo hago tu tarea, ¿no?
-por favor- me miro con fingida suplica y luego sonrió-bien, ya los hago yo.
En la habitación de David estaba un escritorio de tareas, que es donde lo deje trabajando mientras me dirigí a la cama. No había dormido y estaba exhausto, así que me acosté en el borde de la cama con los pies colgando.
-¿Qué pasa, no me piensas ayudar?
-estoy cansado. Trata de resolverlos y luego me despiertas.
-si, claro, abandóname- se quejó, luego se rio.
Caminaba solo y sin rumbo por el bosque, nada me preocupaba. Llegue a un hermoso claro lleno de flores silvestres, donde la luz se colaba tenuemente creando una asombrosa atmosfera. En el centro del claro, esperándome, estaba David, al verme su rostro se ilumino en una sonrisa, la sonrisa más hermosa que he visto nunca, sus ojos relucían. Me miraba fijamente, una mirada tan profunda que me quede embobado.
Sin dejar de mirarme se acercó a mí, con esa sonrisa permanente en sus labios, se detuvo justo frente a mí, poso su mano en mi mejilla y se acercó a besarme. Fue un beso suave, cálido, dulce lleno de amor.
Desperté confundido y exaltado. David seguía de espalda, trabajando. ¡Que sueño! Era tan real, quería que lo fuera. Era hermoso y feliz, si tan solo... ¡No! ¡Despierta ya! Si sigo así terminare haciendo otra tontería.
Me dirigí a ver si David había terminado los problemas, al sentirme acercarme volteo sobresaltado ¿Por qué? ¿Qué hacía?
-oh, despertaste. ¿Dormiste bien?- ¿Por qué se oía tan nervioso?
-tuve un sueño raro... ¿terminaste?
- sí, y estoy seguro de ellos- dijo en un tono presumido, orgulloso de si mismo- eres un maestro estupendo! Cumpliré mi palabra, te invitare el helado que te prometí, vamos.
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-Oliver, acompáñame a buscar al tutor- me dijo Hugo en una hora libre que teníamos.
-claro- al ver que no tenía nada mejor que hacer, decidí ir con él a dar una vuelta.
No lo encontramos por ninguna parte, recorrimos toda la escuela y nada. Llegamos a una parte solitaria, casi nadie iba allí y de pronto Hugo se detuvo abruptamente y volteo, quedando frente a mí.
-la verdad es que había algo que quería decirte- me quede perplejo ¿actuaba extraño? No dije nada, continuo- tal vez sea un poco raro o pienses que estoy loco, pero es la verdad
-¿Qué cosa?-pregunte confundido. Él vacilo un poco.
-me gustas-soltó de pronto. Respiro profundamente y me miro con seriedad antes de continuar- me enamore de ti la primera vez que te vi... y cuando comenzaste a hablarme y te conocí solo me volví a enamorar, me sentí la persona más feliz del mundo. Sabía que tenía que decírtelo para tener una oportunidad, tener un momento en tu mente ya que tú no sales de la mía-se acercó lentamente y sus labios rozaron los míos, robándome un beso...
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Solo Otra Historia De Amor.
Romancelas historia de Amor de amigos de la infancia, nuevos conocidos y viejos amores olvidados.