No Soy AFRODITA y Mucho Menos ZAFIRO.

Capitulo 8

Aquí estamos Nick, Aaron y yo. Llevamos ya varios días entrenando. Creo que ya podre defenderme sola.

Cada vez que estoy en combate Afrodita se apodera de mi cuerpo y es ella quien hace todo el trabajo duro. Afrodita es quien toma el dominio y la destreza de mi completa anatomia.

Ella es quien actúa con su majestuoso e inigualable poder. Todo esto me resulta tan extraño.

Si hace varios meses atrás me hubieran dicho que mi vida iba a dar un vuelco radical, le hubiera dado la razon.

Pero, si hubiesen dicho que estaría asociada con vampiros y que mi alma le pertenecía a una antigua diosa griega, me le hubiera reído en la cara y le hubiera dicho lo inútil y estúpido que eso se escuchaba.

-Lo estas haciendo muy bien - Felicitó Nick.

-Chicos me tengo que ir. Necesito arreglar varios asuntos.- se despidió de nosotros y se marchó.

Yo me senté exhausta en el suelo y me recosté de un Árbol frondoso. Estábamos en el Bosque Epping de Londres.

Frente a nosotros había un hermoso lago. Me quedé embobada mirando hasta aquellas cristalinas aguas.

Estos días con Nick han sido los mejores. Me mira como si yo fuera la cosa más bonita del mundo.

Se que hay algo entre los dos. Algo más que una simple amistad. Hay química.

-Zafiro .. - se sentó junto a mi.

- Dime- Respondí.

- Quiero decirte algo - Se rascó la nuca y me giré hacia él. Lo miré fijamente. Estaba nerviosa. No sabia que me diría.

El me miraba serio.

-Pues dilo - le insisto a que me dijera.

-Me ...me...gustas - Abrí los ojos como platos. Elefantes bailaban brea dance en mi.

- Tu también me gustas. Pero...

- ¿Pero que ? - me miró fijo y serio.

- Tengo miedo a enamorarme.- Solté

-¿Porque ?- me miró esperando una respuesta.

- Porque cuando te enamoras terminan dejándote y lastimandote. Es por eso que cuando me empezaste a gustar me decía mentalmente que no podías gustarme...- hize una pausa- tuve un novio, llamado Daniel. Yo le quería bastante. Pero llegamos al punto de acabar por el simple hecho de que no había sincronía en ambos. El buscaba todos los defectos que habían en mi y con eso me hería. - dije en media sonrisa.

- Recuerda que para empezar una nueva etapa, tienes que cerrar otra.No tengas miedo de decir adiós.- Con una de sus manos acarició mi rostro.

- No es sencillo.- dije.

-Confía en mi. Yo nunca te haría eso.-¿ Será correcto confiar en él?.

- No quiero acostumbrarme a ti, ni a tus besos, ni a tu olor...-tomé una bocanada de Aire.- Porque algún día te cansarás, te irás y echaré de menos todas esas cosas a las que me acostumbre.

En un abrir y cerrar de ojos, los labios de Nick ya se había posado en los mios. Era la primera vez que los probaba. Eran cálidos , suaves y dulces. Era un sabor embriagador.

Sentí que todos mis sentidos por fin despertaban de su siesta. Su lengua pidió permiso para entrar. Ambas lenguas danzaban. El beso se había profundizado más.

Sentía tantas emociones mezcladas. Le Hale del pelo fuerte mientras lo besaba. De su boca salí un leve gruñido placentero para mis oídos.

Desde ahora su aliento sería lo que más me gustaría en toda la vida.

Dejamos de besarnos porque me faltaba aire. Mis pulmones necesitan oxígeno. Pero aún así nuestras frentes quedaron unidas, nos mirábamos fijamente y mi respiración era agitada.

-Eres Hermosa- me ruborizó su halago.

Y iba a responder, pero volvió a unir nuestros labios como si su vida dependiera de ello.