Mellizos

VIII. Preparándose Para la Obra.

¡Rayos! Mi cuerpo está adolorido... Es un milagro que pueda caminar. Tengo que llegar a la parada. ¡Juro Harry, qué me vengaré! No te perdonaré esto, ¡maldito bastardo! Tus celos me enferman. A pesar de decirte que no tenía nada con él, tú... ¡Te cobraré todos y cada uno de estos golpes lo prometo!, pensaba Niall mientras caminaba.

Narra Niall:

Llegué a casa lo más normal que pude, en el metro no dejaban de mirarme. Cuando me despedí de mis amigos para ir a la estación del metro tenía la ropa rasgada y manchas de mi propia sangre. Yo sólo ignoré a los demás pasajeros. Por suerte mis abuelos no estaban cuando llegué a casa, entré a mi cuarto y pasé directamente al baño para darme una ducha y ponerme ropa limpia, mi uniforme estaba arruinado. Luego de terminar pude notar moretones por todo mi cuerpo, uno en mi mejilla derecha, en mi estomago también tenía, me habían dado tantas patadas que era comprensible mi estado, me recosté recordando lo sucedido. Estaba solo. Los miércoles Harry se va con Louis a su casa, con la excusa a Zayn de que tiene clases de defensa personal.
   Tengo que pensar qué decir para cuando lleguen mis abuelos, pensé y luego dormí un poco.

Fin de la narración de Niall

-¡Niall! ¿Qué te pasó?- dijo Amanda preocupada.
-Intentaron asaltarme y como no tenía nada de valor se desquitaron golpeándome- el rubio habló despreocupado, tratando de tranquilizar a su abuela.
-Mmm... tendrías que ir a clases como tu hermano- alegó Robert.
-Abuelo se defenderme, es sólo que... eran muchos...- dijo Niall pensando las palabras correctas- como lamento tener que mentirles... abuelos...- pensó tristemente.
-Ten más cuidado la próxima vez- dijo su abuelo preocupado.
-Dime ¿Te duele algo? ¿Cómo te sientes?- comenzó a cuestionar su abuela.
-Abuela, no te preocupes ya limpie mis heridas, sólo estoy un poco adolorido- respondió con una sonrisa gracias a la preocupación de sus abuelos.
-Que moretón te han hecho en la cara, ¿irás a la escuela mañana?- preguntó su abuelo.
-En este estado no, no iré, empezarán a correr el rumor de que me atacaron y no me gusta ser el centro de atención- respondió y su abuela asintió, pues conocía a su nieto.
-¿Pero qué pasará con la obra? Dijiste que es este viernes- comentó su abuelo.
-Faltaré mañana, pero iré el viernes directamente para actuar, la verdad no quisiera, pero ya me comprometí y no quiero que la profesora Cyrus se decepcione de mí- Niall explicó a su abuelo y éste sonrió.
-Bien dicho, entonces aprovecha y descansa mañana- comentó su abuelo al escuchar lo maduramente que habló el rubio.
-¿Y Harry?- preguntó por su hermano al notar que hacia falta su presencia.
-Me llamó y dijo que se quedaría a comer en lo de Louis, ya debe estar llegando- respondió su abuela.
-Está bien, que descansen- respondió levantándose de la mesa- gracias por la cena.
-Buenas noches- se despidieron sus abuelos.

-Narra Niall:

En ningún momento me cruce a Harry, sólo sentí que se levantaba para ir a la universidad, luego a mis abuelos que se iban a trabajar, quedando completamente solo, yo y mis pensamientos, divagando de lo que dijo Harry, antes de que me golpeara.

-'¡No me engañas, idiota! ¡Te gusta, admítelo!'- el rubio recordaba una y otra vez- no sé si Zayn me gusta, la verdad todo me tiene muy confundido, jamás me he enamorado, por lo que no sé que se sentirá... y si me enamoro, tiene que ser de una chica. ¿Es lo normal, no? Pero al parecer siento esto por un hombre. Que estúpido soy, no debo tentarme ante estas ocurrencias de mi corazón, seguro que pasarán. Estar cerca de Zayn sólo me ha causado problemas- el rubio pensaba sin dejar de mirar el techo de su habitación

-Niall ha faltado. ¿Qué hacemos maestra?- preguntó Lottie preocupada.
-¿Alguien sabe que le pasó a su compañero? ¿Harry tienes idea?- preguntó Miley, pues al ser su hermano los mas lógico es que supiera algo.
-A mi hermano lo golpearon, quisieron asaltarlo- dijo simplemente encogiéndose de hombros, eso hizo pensar a la maestra que todo estaba bien.
-Es un mentiroso- dijo en un susurro Liam. Los demás se quedaron sin habla por unos segundos.
-Pobre Niall- se lamentaban sus compañeras.
-No me esperaba eso. ¿Sabes si vendrá mañana a la obra?- preguntó Miley con una expresión de preocupación.
-Tengo entendido que sí- respondió simple.
-Eso espero, bueno nos encargaremos de limpiar el salón de teatro para mañana, excepto los actores, necesito que se prueben los trajes, Gemma, Maddie, ¿los han traído?- preguntó viendo a ambas chicas.
-Sí, maestra- afirmaron ambas con una gran sonrisa.
-Muy bien, los que actúan quiero que vayan a los vestidores del gimnasio y se cambien- ordenó y los jóvenes asintieron- el resto venga conmigo, tenemos que ir por los elementos de limpieza- la maestra salió y detrás de ella los alumnos que iban a ayudar con la limpieza.
-Chicos vamos- dijo la castaña la cual con Maddie y Lottie llevaban unas bolsas. Se dirigieron hasta los vestidores pasando cada uno a un cuarto que tenía una cortina como única salida, las chicas se pusieron a un lado y revisando que traje le pertenecía a cada uno.
-Zayn este es el tuyo- dijo estirando su mano por la cortina.
-Harry, aquí está el tuyo- se lo pasó Maddie.
-Liam ten cuidado con los botones del traje- dijo Lottie.
-Problemático...- exclamó y escuchó una risita de Lottie. Así estuvieron esperando a que lo jóvenes terminaran de cambiarse.
-¿Están listos?- pregunto Gemma. Fueron saliendo de a uno, todos con sus respectivos trajes, Liam y Louis con las coronas, remeras mangas largas negras y capas que se situaban en sus hombros, Liam con una azul marino y Louis con una roja, y pantalones azul oscuro, Harry camisa manga larga celeste con un abrigo encima, tono azul y pantalones negros, Liam camisa blanca, encima un chaleco de terciopelo verde, y pantalones marrones. Pero hay alguien que no salía.
-Zayn, ¿qué sucede?- preguntó Lottie.
-¡No me gusta! ¡No quiero que nadie me vea!- respondió e hizo un puchero que nadie pudo ver.
-No seas así, todas nos esforzamos en hacer sus trajes- dijo Gemma.
-Arg...- gruñó y salió molesto, todos se le quedaron mirando asombrados, más específicamente las chicas. Finalmente terminaron de probarse los trajes, y siguieron con sus actividades diarias.