21.- En el Daze

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*Narra Kano*

― ¿Cuánto tiempo ha pasado? ― pregunto la peli verde que estaba sentada junto a mí.

― No tengo idea ― respondí mirándola de reojo.

Su mirada estaba perdida en algún punto de ese gran y hermoso cielo azul que Azami había creado para este mundo sin tiempo.

― Quisiera saber cómo están... ― susurró, apenas pude escucharlo.

Me acerqué a ella y la rodee con mis brazos, olfatee su cabello y deposite un beso en su nuca.

― Estoy seguro de que están bien ― le susurre al oído. ―, después de todo, son nuestros hijos.

Una leve sonrisa apareció en su rostro, junto a un sonrojo.

― Eso espero, Shuuya ― me respondió y tomo mis manos.

(....)

*Narra Shintaro*

Ayano estaba sentada junto a mí, ambos estábamos en silencio. Ella me miraba curiosa, yo miraba el escritorio frente a mí.

― Este lugar me trae malos recuerdos ― dije en voz baja.

― A mí no me parecen malos ― dijo ella.

― La primera vez que te perdí ― le dije.

― Me recuperaste ― sonó como si me regañará.

― Tú me devolviste la vida ― finalmente me voltee para verla.

― Tú eres mi vida ― dijo ella con una sonrisa.

Una lágrima corrió pasando sobre esa curva en sus labios.

― Tu vida... ― sentí una presión en el pecho.

Me levante del asiento y me acerqué a ella para abrazarla, ella pareció sorprenderse pero me correspondió el abrazo, me aferré más a su cuerpo, no quería soltarla, no ahora... No quiero que ella este triste por mi culpa.

― Nuestra vida ― dijo ella escondiéndose en mi pecho.

― Prometo que buscaré la forma de regresar ― hundí mi nariz en su cabello para sentir su aroma.

Varias lágrimas cayeron por mis mejillas, ella me apretó en sus brazos.

― Volveremos a estar juntos como familia ― susurró.

― Volveremos a ser felices, juntos ― me separé de ella y tome su rostro entre mis manos.

De nuevo sonrío, pero sus lágrimas no dejaban de salir.

La besé, intentando parar su llanto. En el beso le demostré lo mucho que la amaba, lo importante que es para mí. Mi Ayano...

― Te Amo...

(....)

*Narra Hibiya*

Ella no lo dice, me doy cuenta... Le hace mucha falta nuestra pequeña Tomo.

― ¿Habrá crecido mucho? ― pensó en voz alta.

― ¿Hablas de Tomo? ― le dije.

Ella estaba de espaldas a mí, sentados en el césped de esta inmensa pradera. Un viento pasó fuerte, revolviendo nuestros cabellos.

Momo pareció no escucharme, pero yo pude oír un sollozo... Seguido de uno más fuerte.

Giré mi rostro, encontrándome con una triste escena. Su rostro escondido en sus rodillas, mientras abrazaba sus piernas.

― Momo... ― susurré.

Me moví para poder quedar junto a ella, quería abrazarla y consolarla... ¿Qué podría decirle?

― Necesito a mi niña ― la escuche sollozar.

― Yo también la extraño ― apreté los puños. ― ¡Yo también la necesito!

Momo alzó la mirada hacia mí, sus mejillas inundadas en lágrimas, sus ojos estaban rojos por haber llorado.

― Hibiya... ― se lanzó a mí, abrazándome con fuerza y tirándome al césped.

Correspondí su abrazo y ella escondió su rostro en mi cuello.

Ambos comenzamos a llorar, ambos teníamos el mismo sentimiento. Ambos extrañábamos a la pequeña Tomo.

(....)

*Narra Seto*

Había un pequeño bosque en este lugar, por curiosidad entré en el... Tenía mucho tiempo desde que lo descubrí, todas las mañanas venía a este lugar para descansar y pensar en lo que pudiera estar pasando con mi familia...

Nunca había pasado más allá del río que estaba en este pequeño mundo, no sabía que tan profundo era... O que habría del otro lado...

Finalmente me arme de valor y decidí cruzar...

La corriente era más rápida de lo que parecía, casi caigo pero logré mantener el equilibrio. Conseguí cruzar al otro lado y, al hacerlo, me quede mirando aquel lugar donde antes estaba...

― Es extraño... ― susurré.

Continúe mi camino hacia adelante, tenía mucha curiosidad por ese lugar, lo que habría ahí.

Camine por un par de minutos y me encontré con una torre similar a aquella en la que había vivido con Mary por mucho tiempo.

Un sentimiento de tristeza inundo mi pecho y por un momento creí que comenzaría a llorar, estaba a punto de derramar unas lágrimas pero escuche la débil voz de alguien.

<< No quiero que nadie salga lastimado... >> Era una voz parecida a la de Mary.

<< Nadie saldrá lastimado, lo prometo >> dijo esta vez un niño.

Corrí y entre a aquella torre, todo estaba lleno de libros y podía escuchar los pensamientos de dos pequeños niños... Era extraño.

Me di cuenta que había un libro tirado en el suelo, me acerqué a levantarlo y algo cayó de el.

― ¿Una foto?

Al mirar la foto me di cuenta de que había dos niños...

― Mis hijos... ― los ojos de nuevo se me llenaron de lágrimas.

Cubrí mi boca para aguantarme los sollozos y las lágrimas se me escaparon, tanto tiempo tuve curiosidad de cruzar aquel río, me he perdido como fue que mis hijos crecieron... Todo este tiempo pude haberlos sentido conmigo.

<< ¿Cómo era la voz de Papá? >> escuche decir al niño.

Me quedé en silencio al escuchar eso.

<< No sabría explicarte, Rinto... Pero... Solo con escucharla... Me sentí protegida... >> Escuche que contestó ella.

<< Desearía saber cómo es >> hablo de nuevo el pequeño.

― Y yo desearía poder estar con ustedes... ― apreté la foto contra mi pecho y continúe llorando.

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Casi me da un paro. Creí que Wattpad me había borrado esta historia :'v

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-Jacq♪


Children Record♪// EditandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora