Caníbal

Olvido

Narra Dario

Abrí mis párpados lentamente y estaba en la habitación blanca, y mi cabeza me dolía.

Maldición! Nunca en mi maldita vida vuelvo al golpear mi cabeza contra algo!, me regañe a mi mismo.

- como te sientes Dario? - dijo el doctor entrando en la habitación mirando unos papeles que había en sus manos.
- pues aun me duele la cabeza - dije tomando mi frente que estaba envuelta en vendas
- dime Dario, hace cuento te diagnosticaron el transtorno? - me pregunto el doctor sentándose a mi lado
- Mmm..........cuando tenía 13 o 12, pero me hicieron el diagnóstico cuando golpee a mi hermano Connor de una manera muy brusca y el no se pude defender a pesar de ser más alto y fuerte que yo - le dije rascando mi barbilla
- y tuvieron que llevar a tu hermano al hospital? - me pregunto algo sorprendido
- si, le abrí una ceja y y casi le rompo la nariz, ah! y le abrí el labio inferior, así que aprovechando que fuimos al hospital me hicieron el diagnóstico - me alce de hombros
- Wow, y tu ya habías notado que tu manera de enojarte no era normal? - me pregunto anotando unas cosas
- si, porque yo cuando me enojaba rompía cosas y le decía a mis padres que se habían roto por accidente, y una vez me pelee con un niño en la escuela y a ese si le rompi la nariz y una pierna, y el director me quizo expulsar y sus padres me quisieron demandar, pero me salve, no se como pero lo hice, de niño me metía mucho en ese tipo de problemas cuando chico, pero desde que empecé a tomar el medicamento mis problemas se calmaron y ahora que estoy en la prepa solo me eh peleado dos o tres veces - sonreí
- no sabia que tenias tantos problemas en cuanto a tu manera de enojarte, pero creo que te puedo dar un nuevo medicamento que te puede ayuda mejor que el que estas tomando, pero eso si tendrá pequeños efectos secundarios -
- como cual? - le pregunte algo preocupado
- después de tomarlo te dará un sueño enorme que no vas a poder aguantar y aparte te daré otro medicamento que servirá para tus intensos dolores de cabeza - sonreí al escucharlo, eso de verdad me alegraba
- gracias doctor - el sonrió y estrechamos nuestras manos
- De nada Dario - sonrió - te dejare descansar un poco más - me dio una pequeña palmada en el hombro y salio de la habitación cerrando la puerta, yo me acomode en la cama, me tape con la suave sabana blanca y cerré los ojos para descansar.

Narra Anie

Abrí los párpados con mucha pesadez y mire el cielo, era de un azul celeste precioso, me recordaba a los ojos del vocalista de mi banda favorita, mire a mi izquierda y había hermosos árboles enormes con las hojas muy verdes, y a mi derecha estaba Jay dormido, parecía un angelito, sonreí y con cuidado me solté de su tierno y cálido abrazo y me levante, me estire un poco y fui a la orilla del acantilado, el aire soplo y era fresco, una le hondo y solté un enorme suspiro, me sentía increíble y llena de vida, parecía que la preocupación, el enojo y la tristeza se habían esfumado sin dejar rastro alguno, entrelace mis dedos detrás de mi cabeza y sonrei abiertamente

Debes terminar con Dario y quedarte con Jay, el es mejor mucho mejor y jamas te dejaría
Dijo mi conciencia en un susurro.
Tal vez no era lo correcto o si?, había esperado mucho tiempo por la propuesta de Dario, y ahora que eramos novios ¿tenia que dejarlo?, pero Jay era tan lindo y me hacía sentir de una manera que no puedo explicar, pero cuando pienso en el los elefantes comienzan a saltar en mi estómago revolviendolo, parcia que el estaba hecho para mi, apenas lo conocía de un día y ya sentía conocerlo de toda la vida, aun estaba muy confundida estaba en un horrible cuadrado amoroso y no en un triángulo, porque son tres chicos los que quieren estar conmigo, y yo ya estaba con uno pero creo que si hubiera conocido a Jay antes Dario no fuera mi novio
- Buenos días - susurraron en mi oído, me gire y ahí estaba con el pelo completamente revuelto, joder! Que guapo se veía
- Hola - dije y sonreí, el sin avisar me robo un beso en los labios haciéndome sonrojar, el puso las manos en mis caderas y me pego a su cuerpo
- dime algo - me dijo
- que cosa? - le pregunte y después sonreí
- tienes novio? - mierda, como contestaría a eso
- si.. - no me dejo terminar y me soltó
- debí imaginarlo - bufo molesto
- no pero escúchame, si lo tengo pero el día que me pidió ser su novia por la noche hicimos cosas y... - me interrumpio
- tuvieron sexo - afirmó el
- si, y pasó la noche conmigo pero se fue por la mañana y desde ese día no eh sabido nada de él - dije jugando con mis dedos
- ocea que tienes novio y a la vez no - dijo rascando su barbilla
- si algo así - dije alzandome de hombros
- entonces..... - se comenzó a acercar a mi y me tomo de las caderas y se acercó más, yo puse las manos en su cuello
- entonces que? - le pregunte acercando mi cara al la suya
- entonces si ese tonto no te valora o no te llama en días, ¿tengo una oportunidad? -
- mmm.......podria ser, si - el sonrió y yo también y nos besamos, creo que esperaría a que Dario me llamara o que me mandara un mensaje, así que esperar unos días.

Un mes después.......

En todo este mes pasaron bastantes cosas, unas más interesantes que otras, por ejemplo: un día lleve a Jay a casa, grave error, lo se, y al tonto se le ocurrió la gran idea de decir que era mi novio frente al mi familia y mi madre lo invito a cenar, otro grave error, pero era mucho mejor para comer que yo, así que todo un mes fue mi novio falso ante mi familia y le agrado a todos, lo cual me sorprendió mucho, y también durante ese mes mi madre me metió a clases de baile moderno y lo odie por completo pero mi madre dijo que no le devolverían el dinero y que me tenia que quedar a menos de que encontrará una clase en el mismo edificio y la encontré, clase de arte y me encantó, pero algo que no paso en este mes fue que Dario no me llamo y mucho menos me envió un mensaje.

Narra Jay

- parpadeaste!! - me grito apuntandome con su dedo índice
- es mentira - le dije riendo
- claro que si, parpadeaste yo te vi Jay - río
- esta bien, esta bien, tu ganas - le dije levantando los brazos en señal de rendición, ella sonrió victoriosa y después sonó su celular, la saco de su bolsillo y sonrió aun más
- quien es? - le pregunte curioso y me acerque a ella
- es un WhatsApp de Dario - dijo feliz
- pues que esperas leelo - le dije sonriendo
- Okey - ella abrió el mensaje y al leerlo esa sonrisa se borro por completo y lágrimas comenzaron a caer por sus mejillas, me preocupe mucho
- que dice Anie? - le pregunte tomándola por los hombros
- el.....el me... - ni siquiera pudo articular la palabra, tome su celular y leí el mensaje, no podía creer lo que este idiota le había puesto a una persona como Anie

" No me busques, no me llames, que no voy al contestar, simplemente terminamos "

El mensaje era muy cruel y me hizo cabrearme demasiado, si ese maldito estuviera aquí y no en Canadá ya le hubiera pateado el culo tan fuerte asta matarlo, ella se a refugio en mis brazos y no pude hacer nada más que abrazarla y consolarla
- no me sueltes - me dijo ella entre sollozos
- nunca - bese su frente
- quiero que seas mi novio, quiero que estés conmigo siempre, tu eres mi alma gemela, tu eres con quien quiero estar - dijo, al escucharla no pude evitar sonreír, la separe de mi un poco la tome de las mejillas y con mis pulgares limpie sus lágrimas, ella sonrió con tristeza y las lágrimas dejaron de salir de sus ojos
- yo te ayúdare a que lo olvides y a que estés bien y cuando ese tonto vuelva de Canadá, prometo matarlo yo mismo - le dije mirándola a los ojos, ella río un poco y sin avisar me beso en los labios a lo que yo correspondi aquel beso la tome de las caderas y la senté en mi regazo haciéndome quedar en medio de sus piernas, ella metió las manos en mi camisa y la comenzó a subirla se separó momentáneamente yo levante los brazos para facilitarle quitarme la camisa, y cuando lo hizo me beso otra vez, puso las manos en mis hombros y me comenzó a recostarme sobre la manta, yo sabía lo que Anie quería y se lo iba a dar...
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Abrí los ojos lentamente y aun estaba oscuro la luz de la luna brillaba sobre nosotros, sentía una enorme calidez en mi cuerpo y era ella, su cuerpo desnudo estaba contra el mio, estábamos cubiertos por la manta que traje, ella dormía tranquilamente, se veía tan dulce y angelical, acaricie su mejilla con mi mano y ella comenzó a abrir los ojos y al verme sonrió
- Hola - dijo somnolienta
- Hola amor, que tal dormiste? -
- de maravilla - dijo mirándome y sonriendo, yo me acerque y la bese y ella a mi, y después se separó y se levantó, ver aquel cuerpo que tiene me hace babear, ella se puso su ropa interior de color negro y después se puso el pantalón y por último su blusa que más bien era un suéter blanco y las mangas eran color negras y en la parte del frente había una imagen de lo que parecía ser una banda y decía " 5 seconds of summer " o algo así, y se sentó y se puso sus converse negros y en el cabello se agarro una coleta y dejo caer el fleco por su frente, se subió un poco las mangas y se puso la pulsera negra que traía, y tomo toda mi ropa
- que haces? - le pregunte burlón
- la voy a tirar - dijo y sonrió
- no te creo - le dije riendo, ella se acercó a la orilla del acantilado, sonrió y arrojó mi ropa
- oye! - le grite, me levante y me envolví con la cobija alrededor de mi cadera como su fuera una toalla
- porque hiciste eso?! - le pregunte
- no lo se - ella río, la tome y la cargue sobre mi hombro y salte
- ahhh! - grito ella divertida y al llegar abajo me ayudó a buscar mi ropa y cuando me vestí la lleve a su casa en mi auto pero me pidió pasar la noche con ella y sus padres lo permitieron y lo mejor parecía que se había olvidado de aquel tonto por completo, m