"Imagina" - Chandler Riggs. [CERRADO TEMPORALMENTE, LOVE U♥]

Imagina #03 Parte 2 "Cegada por él" Chandler Riggs

Narra Yoselin:

- ¿Qué? ¿Có-cómo que he quedado ciega? ¡No puedo haber quedado ciega! Esto es un sueño y nada es más que una mentira. Si, eso debe ser -.

- Hija -.

- ¡¿Qué?! -.

- Nada es una mentira. Todo esto es real. Quisiera decirte que es todo lo contrario, pero no es así... -.

- Salte. No te quiero ver... Agh, más bien, no te quiero escuchar - ya ni siquiera puedo decir 'ver', porque no puedo ver, o sea... ¡No! Rayos... ¡No puedo estar ciega! ¿Cómo puede ser esto posible? No puedo pasar toda mi vida así. Debe haber algún remedio para todo esto. Debe haberlo.

El sonido de la puerta interrumpió mis pensamientos, haciéndome voltear a la izquierda, pero una mano se posó en mi hombro derecho y fue entonces cuando supe que la puerta estaba del otro lado, y volteé a la derecha. Pero aún no sabía quién era.

- ¿Quién eres? -.

- Soy Chandler - mi corazón comenzó a latir a mil por hora, causando que mis manos temblaran y que me pusiera muy nerviosa.

- Ah... Hola - la verdad, no sabía que más decir, porque no quería hablarle. Por su culpa, ahora estoy ciega -. ¿Qué se te ofrece? -.

- Quiero... Quiero pedirte perdón. Realmente lamento el que estés aquí, por culpa mía. Te juro que esta no era mi intención, en serio. Te amo con todo mi ser, no he dejado de quererte, en serio - podía escuchar como estaba tratando de aguantar el llanto, pero lo hacía fatal.

- Eso es mentira. Sólo lo dices, porque no quieres cargar con la culpa de todo esto. Pero, ¿Sabes qué? Tú tienes la culpa de todo. Todo. No quiero volver a escuchar de ti en mi vida, ¿Escuchaste? Espero que su. Vete - escuché el rechinido de una silla, unos cuantos pasos alejándose y el cerrón de una puerta. Justo cuando se cerró, me eché a llorar. No creo que vaya a poder con todo esto, sinceramente. Y, ahora que lo pienso... Si yo he quedado ciega... ¡¿Jamás podré volver a patinar?! Esto no es posible, no, no, no, ¡Y no! No lo es. No puede ser que me esté pasando esto. Jamás podré volver a patinar, o al menos, no por mi cuenta. Jamás podré ir a las Nacionales y ganar el torneo de Patinaje Artístico. Jamás. En. Mi. Vida. Pero esto nadie puede saberlo. Tal vez debo desaparecer para siempre de aquí y que nadie, nunca jamás vuelva a saber de mi.

(3 Semanas Después)

Narra Chandler:

Debía volver a intentarlo. Debía volver a buscar por cada rincón del país hasta dar con Yoselin. Hace mucho que no sé de ella. Nadie en el instituto sabe de ella. Se ha convertido en un misterio... El cual, yo resolveré.

Toco el timbre de la casa de los Brown y una cara muy familiar me abre la puerta.

- Buenas tardes, Señora Brown -.

- No sé qué tienen de buenas con tu presencia -.

- Claro... Sólo quería saber si se encuentra Yoselin -.

- ¿Para qué quieres saber? ¿Ahora para dejarla sorda? ¿Paralítica? ¿En coma...? -.

- Mire, es urgente que hable con ella, necesito saber de ella. Quiero remediar mi falla con ella... Quiero volver hacerla feliz, como antes -.

- ¿Y quién dijo que no está mejor sin ti? Tú lo único que trajiste a su vida fueron puras tragedias. Le rompiste el corazón, la dejaste ciega, y ahora, ya no podrá volver a competir. Jamás. En su vida - ya me ha dejado bastante claro que soy un caso perdido, pero no me dijo si o no.

- De acuerdo... Pero no me ha dicho que si puedo entrar o no... -.

- Querida, dejalo que pase. Está bien - en ese instante, el Sr. Brown se puso en medio de nuestra discusión y se puso a mi favor. La Señora se hizo a un lado y pasé con paso triunfante... Hasta que vi el gesto preocupado de su padre -. Debo platicar contigo sobre mi hija... Yoselin últimamente ha estado muy deprimida, al punto de querer renunciar a su vida... Y creo que la única persona que la puede hacer entrar en razón... Eres tú, Chandler - la verdad, es que esa no me la esperaba.

- ¿Está de broma, Señor? - ele negó -. Entonces... Debo ir a conversar con ella, Señor. Y debo admitirle algo, y es, que todavía la sigo amando, Señor. Jamás debí haber terminado nuestra relación... -.

- Si, muchacho, lo sé. Se nota en tus palabras que realmente estás arrepentido. Y precisamente por eso, te iba ir a buscar. Sólo tú puedes hacerla entrar en razón -.

- Y sé que podré hacerlo -.

Narra Yoselin:

Estaba sentada en un gran tronco que estaba a las orillas del lago congelado, pues ahí me había dicho mi padre que lo esperara. Y así lo hacía. Hasta que escuché unos pasos venir en mi dirección. Levanté un poco mi mirada, para probar a ver algo, pero lo único que logré ver, fueron borrones de colores celestes y marrones. Igual a ayer.

- ¿Papá? ¿Eres tú? -.

- En realidad... Soy Chandler. ¿Me recuerdas? - en ese instante, mi corazón comenzó a latir con más fuerza de la que nunca jamás había latido. Al igual que los colores de mi cara se fueron al suelo.

- ¿Cha-Chandler... Riggs? - pregunté nerviosa de su respuesta que era más que obvia.

- Si, soy yo. Quiero hablar contigo... -.

- La primera y última vez que dijiste eso, fue cuando más me heriste... -.

- Pero esta vez no es para herirte... Y esa vez tampoco lo fue... Pero esta vez, es porque... Quiero que vuelvas a mi lado, Yosi -.

- Por favor, no me digas Yosi -.

- Por favor, dame el privilegio de ser quien te nombre así. Dame el privilegio de ser quien te de su chaqueta cuando tengas frío. Dame el privilegio de ser quien te bese cuando ganes un trofeo. Dame el privilegio de ser quien te haga sentir la persona más querida sobre toda la Tierra... En resumidas cuentas, dame el privilegio de formar parte de tu vida y acompañarte en cada momento de ella - su voz, se escuchaba tan sincera, que le creí. Juro que le creí con todo mi ser. Y, aunque no puedo verlo, puedo escucharlo, y me di cuenta de que decía la verdad, y que en verdad me quiere.

Intenté ponerme de pie en el hielo, pero resbalé... Aunque por suerte, caí en los fuertes brazos de una persona.

- Jamás te dejaré caer - su simple voz me lo dijo todo. Todo. Sentí su respiración muy cerca de mi, invadiendo mi espacio vital. Y se sentía fantástico.

De repente, sucedió.

Sus labios se encontraron con los míos, mezclándose suave y lentamente a juego. Éramos la pieza perfecta. Sentía como todos los recuerdos volvían otra vez a mi memoria, y, esta vez, me hicieron feliz y melancólica. Pero sobre todo, feliz.

- Jamás dejaste de ser parte de mi vida -.

- Y esperó que así sea -.

(Un mes después)

Ya me encontraba en casa, después de la difícil operación de córneas para devolverme la vista. Era genial volver a ver todo, tal y cómo es, no por medio de descripciones orales.

Y también, ya había logrado ganar las Nacionales en Patinaje. Me sentía genial, sinceramente, y todo, gracias a que Chandler me ayudó con mi rutina todos los días, hasta que pude hacerlo por mi misma. Jamás me arrepentiré de todo lo que hago. Jamás me arrepentiré da haberlo dejado volver.

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Hola. Hola, ¿Cómo están? Espero que muy bien .
Bueno, quiero pedir disculpas por no haber actualizado antes, pero es que la escuela me vuelve loca, neta. Jaja, pero ha estoy aquí. Digo, por si me extrañaban

Bueno, espero y les haya gustado lo que escribí. Me inspiré en una película llamada "Castillos de Hielo". Tienen que verla. (Claro, cambié unas cuantas partes.)

Esto es todo por hoy. Chao Chao.